Suben hasta dos puntos las tasas de interés de los créditos hipotecarios
Después de que el Banco Central (BCRA) decidiera este mes -por segunda vez consecutiva- encarecer el costo del dinero, tanto bancos privados como públicos retocaron en los últimos días el costo de sus préstamos para la vivienda o tienen planes de hacerlo en los próximos días.
"Vamos a respetar la tasa del 3,5% anual para el programa Procrear, pero vamos a subir a 5,5% la tasa de los créditos hipotecarios que estaban al 3,5%, y lo que estaba al 4,5% lo vamos a llevar al 7%", anticipó a la Nación Javier González Fraga, presidente del Banco Nación (BNA), entidad que por estos días es responsable de una de cada dos hipotecas que se colocan en el mercado. Aclaró, sin embargo, que la suba rige sólo para los nuevos créditos y no para aquellos que ya se hubieran otorgado o que estén ya en trámite.
"El tema es que han subido todas las tasas a partir del Banco Central, que al extender las tasas positivas a todos los plazos de las Lebac es difícil captar depósitos y nos encareció el costo del dinero. Hasta los depósitos públicos nos están pretendiendo tasas más parecidas a las que paga el Central por sus Lebac. Y no nos podemos comer el capital haciendo malos negocios, aunque seamos un banco público", esgrimió González Fraga.
En la misma línea, prácticamente todos los bancos privados y públicos están sumándose. En el Banco Galicia confirmaron que incrementaron las tasas de sus préstamos hipotecarios en UVA de 4,9% a 5,9% anual, mientras que en el Supervielle planean incrementarlas en un punto, del 4,9% actual a 5,9%, pero las mantendrán intactas para quienes cobran su sueldo en la entidad bancaria.
Lo mismo en el HSBC, que tiene una línea de préstamos para la vivienda en pesos a tasa fija: la subió del 17 al 18% anual.
Hasta en el Banco Provincia, otra de las entidades líderes en el negocio de hipotecas, afirmaron que no descartan retocar sus tasas, que hoy son, para sus préstamos a 10 años de plazo, del 5% anual en el caso de clientes con cuenta sueldo y del 6,25% para el resto. "Estamos mirando, no lo descartamos. Parece que esa es la tendencia del mercado", dijeron voceros del banco provincial a La Nación.
Sólo en el Banco Ciudad aseguraron que por ahora no piensan en cambios. El banco público cobra una tasa de 5,4% para el público general que demanda hipotecas UVA.
Pero en todas las entidades admiten que con la reciente suba de tasas del BCRA, que llevó el costo de sus Lebac más cortas, de sólo 30 días de plazo, al 28,75% anual, se encareció mucho el fondeo de los créditos.
La mayoría, de hecho, ya venía subiendo las tasas de sus préstamos para el consumo y para las empresas. En el BNA, por ejemplo, retocaron esta semana al alza sus tasas para el consumo en 200 puntos básicos (ya habían subido otros 200 puntos a comienzos de noviembre).
Pero en el caso de los hipotecarios se suma el hecho de que, para conseguir fondos frescos en el mercado secundario, también las tasas que exigen los inversores son más altas.
No pocos bancos piensan que, si se mantiene la fuerte demanda de préstamos -que sólo en los primeros quince días del mes aumentó en un 28% con respecto a igual periodo de octubre-, tendrán que salir al mercado de capitales a vender sus créditos (securitizarlos, en la jerga financiera) para así conseguir fondos frescos para fondear nuevas operaciones.
Hoy un bono emitido por el gobierno nacional, que ajusta por inflación, rinde a largo plazo en torno de un 6% anual. En tal sentido, en los bancos creen que para poder vender sus carteras de hipotecas en el mercado de capitales y que sean atractivas para los inversores, deberían estar pagando tasas de no menos de 7% anual, considerando que son un activo mucho menos líquido que un bono soberano.
Para contrarrestar este problema en el fondeo que comienza a surgir es que en el Ministerio de Finanzas están trabajando para desarrollar una suerte de agencia de hipotecas, que permita reducir el costo de securitización (o de venta en el mercado) de los créditos.
En el ministerio que conduce Luis Caputo estudian el modelo norteamericano de Fannie Mae, pero también miran de cerca lo que hicieron al respecto México y Colombia.