Los sueldos crecieron en dólares y mejoran en pesos: ¿por qué todavía la plata no alcanza?
El término "salario" proviene del latín "salarium", que se refería originalmente al pago que se daba a los soldados romanos para comprar sal. La sal era un recurso muy valioso en la antigüedad, utilizada no solo para sazonar alimentos, sino también para conservarlos. Con el tiempo, el término se amplió para referirse a cualquier tipo de compensación económica que se recibe a cambio de un trabajo o servicio. ¿En qué circunstancias se encuentra el salario promedio en Argentina? ¿Cuánto evolucionó en pesos? ¿Qué está pasando con su valor en dólares? ¿Mejora su poder adquisitivo?
De acuerdo al INDEC, el salario promedio registrado evoluciona en el mes de julio de 2024 7,5%. Si lo analizamos en forma interanual evoluciona 206,2% y 98,1 % en el acumulado del año. Es decir, comienza a ganarle a la inflación en forma mensual pero aún está por debajo de la inflación interanual y acumulada en 2024.
Si miramos la remuneración promedio a lo largo de los últimos años podría parecer que el mismo ha evolucionado de manera permanente desde los $20.157 en junio 2015 hasta alcanzar los $1.612.788 en junio 2024 (incluyendo el aguinaldo en toda la serie para este mes). Sin embargo, resulta engañoso dado que el poder de compra no ha seguido esta misma evolución. Mientras el salario en los últimos 9 años evolución un 8.000% en pesos la inflación acumulada en ese mismo período fue 10.927%. La inflación es letal. No falla. Destruye el salario y la calidad de vida de todos los argentinos.
A su vez, muchos argentinos no tienen salario, sino que viven de un ingreso no constante. En junio 2024 el ingreso individual medio por estrato medido por el INDEC era de $422.981. Es decir, ese mes una persona con ingreso no registrado en promedio recibía $1.189.807 menos que la remuneración promedio de junio 2024, o lo que es lo mismo un 281% menor.
El salario medido en dólares
Por otro lado, el análisis del salario en términos de dólares proporciona una perspectiva más precisa sobre la evolución del poder de compra en la sociedad. En junio de 2015, el salario medido en dólares era de u$s2.215. A partir de ese momento, se ha observado una disminución, con un leve repunte en junio de 2017 a los u$s2.027. Actualmente pasa de un piso de u$s777 en junio de 2021 a una mejora sostenida llegando a u$s1.196 para junio de 2024.
Sin embargo, mientras la variación de precios en la economía en pesos fue del 79,8% el tipo de cambio oficial evolucionó en lo que va del año 20% para el mismo período. A su vez, llevado a octubre 2024 el tipo de cambio paralelo está 1,5% debajo de lo que cotizaba en enero 2024. Es decir, los salarios en dólares tuvieron una mejora y en pesos comenzaron a ganarle a la inflación a partir de abril y en el acumulado del año a pesar de tener una fuerte deuda de pérdida de poder adquisitivo en los últimos años.
Salario y canastas básicas alimentarias por adulto
Al examinar la cantidad de canastas básicas alimentarias por adulto que se podían adquirir con la remuneración promedio en pesos a lo largo del tiempo, se observa una clara disminución en el periodo analizado. En junio de 2016, con un ingreso de $20.157, era posible adquirir 16,3 canastas básicas alimentarias.
Aunque se registró un leve repunte en junio de 2017, donde con $26.326 se podían comprar 17,5 canastas, la tendencia general a partir de entonces ha sido decreciente. El punto mínimo se alcanzó en junio de 2024, cuando con una remuneración de $1.612.788 solo se podían adquirir 12,7 canastas básicas. Es decir, que el salario en pesos para mitad de año compraba menos alimentos y bebidas.
En los meses subsiguientes hasta octubre 2024 el salario promedio le gana a la inflación promedio y la variación de precios de Alimentos y Bebidas. Sin embargo, la corrección de precios regulados de la economía deja menor margen del ingreso para comprar la misma cantidad de bienes por lo cual el consumo masivo aún presenta caídas interanuales.
Argentina controló precios y salarios durante más de una década y obtuvo más inflación y más informalidad en el trabajo. Argentina procuró contener la falta de empleo con inflación y recesión con más asistencialismo social y obtuvo más pobreza e indigencia. Argentina intentó sostener la economía y el consumo a partir de deuda y emisión monetaria y obtuvo una inflación descontrolada y pérdida de poder adquisitivo del salario y el ingreso en forma constante y cada vez más pronunciada.
Walter Block, economista americano, expresa: "Algunos animales son más débiles que otros. Por ejemplo, el puercoespín es un animal indefenso excepto por sus púas, el ciervo es vulnerable excepto por su velocidad. En la economía también hay personas relativamente débiles. Los discapacitados, los jóvenes, las minorías, los que no tienen preparación, todos ellos, son agentes económicos débiles. Pero al igual que les ocurre a los seres en el mundo animal, estos agentes débiles tienen una ventaja sobre los demás: la capacidad de trabajar por sueldos más bajos. Cuando el gobierno les arrebata esa posibilidad fijando sueldos mínimos obligatorios, es como si se le arrancaran las púas al puercoespín. El resultado es el desempleo, que crea una situación de desesperanza, soledad y dependencia."
Argentina quiso defender por estrategia clientelar y electoral al más débil generando más pobreza, más indigencia, más inflación, más recesión y más desempleo oculto en el asistencialismo perpetuo de la condición humana. Transformó la dignidad del esfuerzo del trabajo en la necesidad corriente del asistencialismo vil.
Salario y canastas básicas totales
Al realizar un análisis similar sobre la adquisición de canastas básicas totales, se observa una tendencia coherente con la registrada en el caso de las canastas básicas alimentarias, aunque con un descenso menos pronunciado. En junio de 2016, un ingreso de $20.157 permitía la compra de 6,7 canastas básicas totales. En junio de 2017, se alcanzó el máximo, donde con $26.326 era posible adquirir 7,1 canastas. A partir de ese momento, la tendencia ha sido predominantemente decreciente, con algunas fluctuaciones, pero manteniéndose siempre por debajo del umbral de 7,1 canastas. El punto mínimo se registró en junio de 2024, cuando con una remuneración de $1.612.788 solo se podían adquirir 5,7 canastas básicas totales.
La proyección es que en la curva de octubre 2024 hacia adelante el salario pueda adquirir más bienes respecto de los meses precedentes por que la inflación comienza a desacelerar en rubros básicos como alimentos, bebidas, indumentaria, calzado pero pueda adquirir menos servicios que los que adquiría en el primer semestre de 2024 por corrección de precios relativos de la economía cómo tarifas de energía eléctrica, gas, agua, transporte público que forman la canasta de precios regulados y también por aumentos de precios de los servicios vinculados a la salud, educación y comunicaciones entre otros.