Clave para la economía: cómo arrancó la inflación de septiembre
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La dinámica de los precios en el rubro "alimentos y bebidas" arrancó con un sesgo positivo este mes de septiembre: fue la inflación más baja, para una primera semana del mes, desde junio, según la medición de la consultora LCG.
La suba promedio de los precios fue de 0,6%, que se compara con el 1,3% de agosto, y del 1,8% en la primera semana de julio.
Para el Gobierno, se trata de una buena noticia: Luis Caputo persigue que la desinflación sea poderosa en los próximos meses para que no se fomente un atraso cambiario.
De hecho, el objetivo del ministro es que la inflación mensual se ubique al menos en el mismo 2% que sube el dólar oficial a través del "crawling peg".
Inflación: un dato notable
Según LCG, durante la primera semana del mes se dio un hecho particular: el 75% de los precios relevados -en alimentos y bebidas- no se movieron.
Este dato es clave a la hora de evaluar la sostenibilidad del plan del Gobierno para desinflar las expectativas inflacionarias, al menos a corto y mediano plazo.
Una cuestión central para el proceso inflacionario será la estrategia que el Gobierno tenga para el cepo.
El cepo divide opiniones
Como nunca antes, las diferencias entre economistas referentes del mercado quedaron expuestas a la luz pública. Domingo Cavallo y Ricardo Arriazu -dos de los máximos exponentes de las ideas de la ortodoxia económica- dejaron planteadas a cielo abierto su desacuerdo en relación al cepo cambiario.
Y la ruta que debería seguir Javier Milei para dejar atrás las restricciones del mercado cambiario sin que ello signifique un agravamiento de la crisis.
Ambos economistas -Cavallo y Arriazu- fueron (y acaso son) referentes en la formación académica del actual Presidente. El problema es que, en la actualidad, ambos tienen planteos bien diferentes sobre la dinámica económica.
Cavallo vs Arriazu: duelo de economistas
"Si devaluamos explotamos por los aires; se acaba todo el programa económico". Arriazu puso la posibilidad de una salida ordenada del cepo como un imposible.Lo dijo hace unos pocos días durante una charla en el Rotary. Lo escuchan una decena de empresarios.
En las últimas semanas, Arriazu fue contratado en empresas de primera línea. En esas charlas, el economista tucumano insistió con poner límites a las ansias de los ejecutivos que pretenden una rápida salida del cepo.
A través de su blog personal, el exministro de Economía y padre de la convertibilidad plantea un escenario bien diferente del imaginado por Arriazu. Es más, en un párrafo de su última nota, y por la manera de transmitirlo, el mediterráneo deja entrever que puede tener algún tipo de información desde dentro del Gobierno. O al menos contactos con funcionarios.
De hecho, formula el siguiente planteo: "Yo no descarto que más pronto que tarde, el gobierno deba decidir la liberación y reunificación del mercado cambiario. El salto cambiario que ello supondría, lejos de reintroducir inflación galopante, puede marcar el inicio de un plan de estabilización definitivo, basado en la institucionalización de un sistema cambiario y financiero de competencia de monedas capaz de sostenerse indefinidamente en el tiempo".
Es decir, "Mingo" -al revés de su colega Arriazu- dice que vale la pena correr el riesgo.