Mercado Pago vs. Modo: en medio de la disputa judicial, así es la batalla de los descuentos en las góndolas

Mientras Mercado Libre y los bancos cruzan denuncias por "cartelización"  y "abuso de posición dominante" por el uso de sus billeteras virtuales, desde hace algunas semanas se desarrolla una batalla por los descuentos en las góndolas. Es que en medio de la caída del consumo, los supermercados encontraron un salvavidas esta puja. Las promociones que ofrecen hasta un 30% off en los pagos con QR de Modo y Mercado Pago se convirtieron en el mayor gancho para aumentar el tráfico en sus locales, en un contexto de menos visitas de los clientes y compras más chicas.

Las cadenas de supermercados aseguran que el ticket promedio incluye en la actualidad tres productos menos que el año pasado. Estas promociones se han convertido en el nuevo "primer sábado del mes", mientras que las promos puntuales de los bancos por día pasaron a ser parte del paisaje, debido a que están muy limitadas.

Coto fue el pionero en este campo con una acción con Modo que ofrecía un descuento del 30% los viernes de julio y funcionó muy bien. Y en forma casi paralela, las promociones se fueron replicando con otros supermercados y billeteras digitales.

Hoy, Mercado Pago tiene distintos acuerdos con DIA, Coto, Carrefour, ChangoMás y varias cadenas del interior. Por su parte, Modo tiene una "promo sistémica" con ChangoMás y acuerdos puntuales que combinan a una entidad bancaria con un supermercado, como Galicia y Jumbo, Carrefour con Macro y Patagonia, o HSBC con Libertad.

Mercado Pago vs. Modo: buscan generalizar el uso de nuevos medios de pago

Desde las billeteras digitales explican que con estas acciones buscan generalizar el uso de los nuevos medios de pago, acercando al cliente al uso de las aplicaciones bancarias.

"Buscamos extender estos beneficios y descuentos a todas las personas, sin importar si están bancarizados o no, o si poseen cuenta o una tarjeta de crédito de un banco determinado", explican en Mercado Pago.

"Con este tipo de acciones buscamos que las personas encuentren una alternativa para hacer sus compras y a la vez acercar al cliente al uso de las aplicaciones bancarias, que pasaron de ser un lugar consulta y uso esporádico, para convertirse en verdaderas billeteras para las operaciones cotidianas", explica Rafael Soto, CEO de Modo.

Según un relevamiento de la consultora ShopApp, hoy el 77% de los consumidores argentinos compra en más de un lugar y la búsqueda de ofertas y precios es el mayor atractivo a la hora de elegir un supermercado. Además, cuatro de cada diez hogares van a determinados comercios solo cuando hay descuentos.

Los descuentos de las billeteras digitales son la segunda promoción más buscada, solo superada por las ofertas del tipo 2x1. Las promos de Modo, Mercado Pago o Cuenta DNI incluso son más valoradas que las de las tarjetas bancarias o los descuentos del 80% en la segunda unidad.

A la hora de explicar el éxito de estas acciones, en las billeteras destacan el efecto amplificador que significa estar presente en los celulares de los consumidores.

"Hoy, Modo tiene una capacidad de difusión única, a partir de las posibilidades de comunicación con sus clientes de los más de 30 bancos con los que estamos trabajando y son los comercios los que nos buscan porque saben que podemos mover la aguja del consumo", explica Soto,

Quién paga los descuentos

La gran pregunta es quién se hace cargo del descuento. En el sector aseguran que no hay una única fórmula y que los términos de los acuerdos comerciales dependen del momento y del tamaño de cada parte.

Desde el lado de los supermercados sostienen que hoy son las grandes cadenas las que absorben la mayor parte de los descuentos. "El costo de las promos corre por cuenta nuestra, pero no te queda alternativa, porque es la única forma de traccionar al público en un momento en que la demanda no responde", añaden.

El desembarco en las góndolas de Modo y Mercado Pago con su agresiva política de descuentos representa el último capítulo de una saga que se inició a mediados de 2002, cuando los bancos encontraron en esta herramienta una manera de fidelizar a sus clientes y empezar a revertir la imagen que había quedado entre el público con el corralito.

En el sector no se ponen de acuerdo sobre qué entidad fue la que lanzó la primera promo, pero coinciden en que las promos no se manchan con el tiempo y que la infidelidad entre supermercados y billeteras/bancos está a la orden del día.