Una señal clave de la era Milei: primera semana de deflación desde 2021 y un dato alentador para abril
La economía de la era Milei vive uno de sus mejores triunfos: registró la primera semana de deflación desde octubre de 2021. A pesar de que habrá que esperar para conocer el dato final de inflación de abril, los números de consultoras privadas lo ubican en un dígito, y entre los más optimistas resuena un número próximo al 7%, que podría darse si se descuenta el retrotraimiento tarifario de prepagas.
Por su parte el Gobierno, en base a estos datos alentadores, volvió a bajar las tasas de política monetaria por segunda vez en el mes, fomentando expectativas de que la inflación se caerá como un piano.
La marcha de Economía no se separa ni a diestra ni siniestra de algunas conductas como la licuadora de pesos. De esta manera, se conoció en la jornada que la autoridad monetaria local dispuso una nueva merma de tasas de política monetaria de 10 puntos (llevándola al 60%). Así, se produjo un automático bajón en los retornos ofrecidos a los bancos: el rendimiento efectivo mensual (TEM) pasó a ser del 5% mensual y la tasa efectiva anual (TEA) se ubicó en el 79,6%. Esta decisión podría llevar a que las entidades financieras paguen por el plazo fijo un estimado del 4,2% por 30 días.
Milei festeja la primera semana con deflación desde 2021
La administración libertaria festeja que su gran rival a vencer se debilita en un lapso temporal récord. En este sentido, la consultora privada Alphacast certificó cómo la inflación se desplomó, según su relevamiento de alta frecuencia, la semana que finalizó el pasado 23 de abril. Esta medición respalda el efecto deflacionario tan esperado por el Gobierno para el nivel de precios de bienes y servicios del cuarto mes del año: la inflación cayó 0,8% semanal en comparación con una suba de 0,5% anterior, mientras que la núcleo se hundió 1,8% respecto a un avance de 0,4% en la semana previa.
Sobre este punto el equipo de research de PPI destaca a este medio que el optimismo del oficialismo sobre estos datos se fortalecen la idea de que el plan de Caputo viene funcionando porque "si bien es la primera vez que hay deflación semanal desde octubre 2021, lo más relevante es que ambas medidas se movieron al menor ritmo que se tiene registro (marzo 2013)".
Por su parte, el economista Mariano Sánchez indica a iProfesional que este proceso deflacionario es saludable y acorde con las expectativas favorables sobre el sendero del Gobierno de que luego de explotar la inflación en diciembre comenzara a moderarse en caso de que se hicieran bien las cosas.
¿Cuál será el dato de inflación de abril?
Claro está que abril se prepara para arribar en una suba generalizada y sostenida de precios de un dígito. Sin embargo, las apuestas de los expertos varían.
Considerando la media móvil de cuatro semanas, proxy de la inflación medida por INDEC, la inflación de acuerdo a Alphacast se habría recortado del 8,9% a 7,6%, el cual sería el menor ritmo desde mediados de octubre 2023, mientras que la de la subyacente habría disminuido del de 5,5% a 3,3%, hundiéndose hasta valores de fines de enero 2022 (3%).
Por otro lado Aldo Abrahan, director ejecutivo de la Fundación Libertad y Progreso, menciona a iProfesional que "la desaceleración de la inflación se hace cada vez más palpable, esperamos 9% para abril, aunque podría ser un dígito menor en tanto y en cuanto el INDEC no contabilice la diferencia de precios cedida por las prepagas. Para mayo podríamos encontrarnos con un valor cercano al 7% y en segundo semestre probablemente aparecerán cifras mensuales de entre el 5% y 3%".
Cabe destacar que semejante desaceleración no estuvo descontada ni siquiera por el propio BCRA, que de acuerdo a su presentación expuesta por Werning en Washington, preveía que la inflación ceda a 9% en abril, con la núcleo descendiendo a 6%.
Aunque con cierta cautela, Juan Alra, Portfolio Manager de Southern Trust, sostuvo en diálogo con iProfesional: "Estamos viendo una desinflación causada en gran parte por el congelamiento de la economía real, que puede llegar a ser complicado si no exista un posterior rebote. No obstante, los mercados ya se adelantaban a este recorte de tasas pudiendo verse reflejado en la curva de inflación implícita de los Bonos CER en las ultimas ruedas que estaba brindando retornos por debajo de lo que pronosticaba el Relevamiento de Expextativas (REM) del Central que la calculó en torno al 10,8% para abril.
Política monetaria: por qué el Gobierno profundiza la baja de tasas
El nuevo bajón de las tasas de política monetaria se veía venir, pero ocurrió de forma sorpresiva y sin tener que esperar a estar próximos a la presentación del dato de inflación del INDEC, como suele pasar.
Al respecto, el especialista en mercados financieros Alejo Sánchez afirma a este medio que -como la tasa de pases es lo que paga el Banco Central a los bancos para absorber pesos del sistema financiero- se proseguirá con la licuación y esta modificación también termina impactando en la tasa de plazo fijo. "Teniendo una devaluación de la autoridad monetaria del 2% mensual, estas nuevas tasas estarán por debajo de la inflación, lo que busca profundizar el deterioro de los pasivos del Central", afirma.
También cabe considerar que como esboza Mariano Sánchez el recorte de tipos de interés se adelanta al descenso de la inflación para tener tasas de interés reales negativas, y consecuentemente salga el dinero de los pases y se vaya al Tesoro.
Este movimiento del Gobierno viene alineado con las descendentes expectativas de inflación subrayan desde la Fundación Libertad y Progreso. Además, también tendrá un efecto en el mercado cambiario, como no hay a la vista nuevas depreciaciones relevantes que se trasladen a la divisa estadounidense, el dólar seguiría estando estable. "Con esta tasa de interés perderás en relación a la inflación pero ganarás versus al dólar", agregan los expertos.
Otro impacto positivo buscado por Economía con el descenso de tasas, de acuerdo a Alejo Sánchez viene de la mano de un incentivo al crédito para empresas y público en general, lo cual ha sido defendido a capa y espada por el presidente Javier Milei para fomentar el crecimiento económico del sector privado y enfatizado en la última reunión con los empresarios del Círculo Rojo.