Javier Milei le puso una fecha probable a la eliminación del cepo
El presidente Javier Milei señaló que el Gobierno tiene "muchos elementos para ser optimistas" y aseguró que cuando se abra el cepo, "la Argentina va a empezar a despegar muy fuertemente".
"En primer lugar, si bien el 70% de los argentinos reconocen que hoy están peor. Hay algo que es muy importante: cuando nosotros iniciamos el mandato en diciembre, solo el 20% de los argentinos creían que de cara a los próximos seis meses íbamos a estar mejor. Ese número trepó a 30 en enero. Trepó a 42 en febrero. Hoy está en el 50%, y la mitad de los argentinos cree que de cara a los próximos seis meses vamos a estar mejor", aseguró a CNN en español.
Según adelantó el Presidente, el cepo podría liberarse una vez que se termine de sanear el balance del Banco Central y de eliminar los pasivos remunerados. Y le puso una fecha probable, aunque sin dar grandes detalles. "Nuestra esperanza es que podamos entrar al segundo semestre en esa condición. El FMI, cuando hace las cuentas, da que podríamos llegar a mitad de año, pero eso depende de la voluntad de los individuos de canjear títulos", precisó.
Asimismo, Milei aseguró que son muchos los analistas que ven una recuperación en ‘V’. "Nosotros, cuando llegamos, el riesgo país estaba en torno a 2900 puntos básicos, hoy está en 1400. Es decir, los bonos pasaron de 18 a 54 dólares", dijo.
"El día que podamos abrir el cepo, abrir todas las restricciones del mercado de cambios, el rebote que va a tener la economía argentina va a hacer que se expanda fuertemente", agregó.
Por otra parte, aclaró: "Yo no puedo correr riesgos. Porque esto no es una cuestión de un paper académico que digo, me equivoqué y voy y escribo otro paper y explico por qué me equivoqué. Acá, si me equivoco, eso le va a pesar a 47 millones de seres humanos. Entonces. Es normal que sea más cauteloso y que tenga un nivel de aversión al riesgo más alto que el que suelo tener regularmente. Si fuera algo que tiene que ver con mí mismo nada más, y que fuera algo que solo me impactaría a mí, yo ya hubiera avanzado".
Unificación cambiaria: ¿están dadas las condiciones?
La consultora 1816 enumeró que los argumentos en contra de una unificación cambiaria "son principalmente dos: que las reservas netas aún son negativas, por lo que el gobierno no tendría margen de maniobra para amortiguar el impacto de una caída en la demanda de pesos sobre la nominalidad de la economía, y que los mercados de deuda sugieren que, si bien hay un stock grande de agregados, si hay una demanda no genuina de otros activos locales (por ejemplo por parte de importadores) que deberían desaparecer ante la ausencia de controles de cambios.
A su vez, la economista Natalia Motyl planteó que "es cierto que empieza la época de cosecha gruesa y que hay una mayor liquidez pero también es cierto que muchos problemas se han pateado hacia adelante. Y acotó: "por ejemplo, con los BOPREAL que aliviaron las necesidades de dólares por parte de los importadores; este es un problema que el gobierno tendrá que enfrentar en algún momento".
"Para salir del cepo es necesario mantener un tipo de cambio competitivo, acumular reservas durante varios meses y reducir el gasto público de manera sostenible, no solo mediante la licuación", afirmó.
La economista subrayó que "el plan de Caputo siempre fue salir del cepo lo más pronto posible, pero no debemos cometer los mismos errores de gestiones anteriores, que por apresurarse en salir del cepo y generar cierta ilusión, terminaron pateando el problema hacia adelante y agravando la situación cambiaria a mediano plazo".
"Si observamos los números hoy, las condiciones no están dadas para una unificación cambiaria y salida del cepo. Esto debería plantearse únicamente con el saneamiento de las cuentas fiscales por dos años y una confianza en los mercados totalmente restaurada", opinó.
Para los analistas de Facimex Valores, "aún no están dadas las condiciones para unificar; se necesita sumar reservas netas y profundizar el desarme de pasivos remunerados". Y alegaron que "la unificación cambiaria requiere esencialmente que estén dadas dos condiciones".
"Por un lado, el BCRA todavía tiene que seguir avanzando en la licuación de los pasivos remunerados y la reducción del déficit cuasifiscal. En este sentido, el BCRA redujo el déficit cuasifiscal a la mitad del ritmo que llevaba en las semanas previas al traspaso de mando, aunque sigue corriendo a un ritmo anualizado de 92% de la base monetaria amplia (base monetaria + pasivos remunerados en pesos). Por otro lado, incluso bajo un tipo de cambio flexible como anticipa el gobierno, el BCRA necesita contar con reservas netas para eventualmente intervenir en el mercado cambiario si hubiera un deterioro de expectativas", fundamentaron.
Asimismo, Francisco Ritorto concordó que "todavía falta acumular reservas para una eventual salida del cepo". Pero marcó también otro aspecto que dificulta tomar pronto esa medida: "La salida del cepo implica renunciar al impuesto PAIS, tributo que ha tomado mayor importancia en la recaudación nacional, actualmente es el cuarto gravamen con mayor aporte a los recursos tributario". .