Llegan nuevas listas de precios a supermercados: ¿Luis Caputo logrará el objetivo de desinflación?
A juzgar por las primeras listas de precios que las principales fábricas de alimentos y bebidas están enviando a las grandes cadenas de supermercados y a los mayoristas con los ajustes para marzo -algunas de ellas, por ahora, sólo de palabra-, Luis Caputo podría sostener la proyección de baja de la inflación. Al menos en el rubro alimenticio.
Los aumentos previstos por las empresas proveedoras van del 6% al 7% en promedio. Algunos nichos, como los lácteos y las bebidas gaseosas podrían mostrar ajustes más elevados, en torno del 12%.
Listas de precios en supermercados: buena señal para el Gobierno
Los menores incrementos se verán en la mayoría de los productos de la canasta básica alimentaria: fideos, arroz, azúcar, harina, fideos y aceites, con remarcaciones por debajo del 7% para el mes de marzo.
Se trata de una desaceleración respecto de lo visto al comienzo de febrero, cuando los ajustes no bajaban del 10%.
De hecho, la proyección de las principales consultoras económicas que monitorean la inflación semana tras semana asciende al 15% en promedio. Con los alimentos en una línea similar al resto.
Para marzo, no obstante, y siempre que se cumplan con las listas que empiezan a enviarse a las grandes cadenas minoristas y mayoristas, la inflación de los alimentos podría situarse varios puntos por debajo del promedio.
Inflación: la calculadora de "Toto" Caputo
El ministro de Economía pretende que la inflación baje a un dígito para el mes de abril. Cree que sería una señal poderosa hacia la sociedad en medio del ajuste.
Para marzo, no obstante, el objetivo es que la tendencia a la baja se manifieste en el rubro de los alimentos. En el Palacio de Hacienda saben que, por una cuestión de estacionalidad, el IPC de marzo suele dar más arriba que en febrero.
Ahora, además de las lógicas subas con el inicio de las clases, se van a sumar otros ajustes: desde las tarifas de luz hasta el nuevo aumento en los colectivos y trenes, y la nueva suba en los combustibles. El objetivo del titular del Palacio de Hacienda es que la inflación de marzo no sea superior a la de febrero.
Sería un verdadero logro. Eso sí, para cumplirse, el Gobierno necesita que la inflación de los alimentos corra un escalón por debajo del resto.
El ministro se quedaría conforme si la inflación de marzo termina igual que en febrero, por debajo del 15%, y lo más cercano posible al 10%.
Es obvio que esta reducción de los índices de la inflación se relaciona con el fuerte deterioro del consumo, ante la caída del poder adquisitivo de la mayoría de los asalariados.
Al parecer, podría ser un objetivo totalmente cumplible. La única duda pasa por la dinámica en el precio de la carne vacuna y el pollo, que volvió a moverse en las últimas horas.
Dólar estable e inflación a la baja
En las últimas jornadas, los carniceros volvieron a ver subas en los precios de los cortes vacunos y también en el pollo. Una dinámica que fue adelantada por iProfesional. En promedio, las subas en ambos casos rondaron el 15%.
Estos aumentos se dan a pesar de una fuerte caída en las ventas en las carnicerías y en las heladeras de los supermercados.
A favor de Caputo, las últimas estimaciones también dan una desaceleración de la inflación. La última fue publicada en el día de ayer por la universidad Di Tella.
De acuerdo a la tradicional encuesta, la inflación esperada por la población para los próximos 12 meses es del 170,8% promedio, prácticamente 60 puntos menos de la encuesta realizada en el mes de enero.
No es la única causa: también tiene que ver la incipiente estabilidad del tipo de cambio, sobre todo de los dólares financieros, que en las últimas semanas quedaron por detrás de la evolución de la inflación.
Economía en recesión
La esperada desaceleración de la inflación se vincula con el hundimiento de la actividad económica. El último dato al respecto lo dio la consultora de Orlando Ferreres, en un reporte conocido ayer.
Dice el informe que "el nivel general de actividad registró una caída de 3,8% interanual en enero de 2024. Por su parte, la medición desestacionalizada registró una contracción de 0,8% respecto al mes precedente".
- La industria manufacturera cayó 4,2% interanualmente.
- La construcción se desplomó 7,6% en el inicio del año, en línea con la desaparición de la obra pública, con salvedad de los proyectos que ya se habían iniciado.
- El rubro de Agua, Electricidad y Gas reportó una merma del 7,8%.
- Peor le fue a la "intermediación financiera", con una caída del 9,2%