La Iglesia reitera su reclamo por alimentos para comedores populares: "La pobreza sigue creciendo"
La Iglesia Católica insistió en su pedido por el envío de alimentos a comedores populares y se mostró en contra de la eliminación de los movimientos sociales como intermediarios que propone el Gobierno.
"Hoy nadie puede asumir la cantidad y complejidad del trabajo social de manera individual, y es por eso que insistimos en integrar a todos aquellos que con enorme sensibilidad atienden a los más pobres y en que también se les dé la ayuda necesaria para que puedan seguir haciéndolo", señaló la Comisión Episcopal de Cáritas a través de un comunicado.
Días atrás, la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, firmó convenios de asistencia alimentaria con entidades religiosas, una movida que fue interpretada por muchos como un intento de diluir el poder de las organizaciones sociales, en medio de su puja con los piqueteros y provocó malestar en Cáritas.
"Se ha malinterpretado dicho compromiso entendiéndolo como un acuerdo exclusivo entre la Iglesia y el Estado para ser los interlocutores únicos o principales validados en la ayuda a los sectores más vulnerables", afirmaron.
Fuerte reclamo de la Iglesia: "La pobreza sigue creciendo y no admite miradas sesgadas"
Sin embargo, desde la Comisión Episcopal recalcaron que "hoy nadie puede asumir la cantidad y complejidad del trabajo social de manera individual, y es por eso que insistimos en integrar a todos aquellos que con enorme sensibilidad atienden a los más pobres y en que también se les dé la ayuda necesaria para que puedan seguir haciéndolo".
En el transcurso de los últimos años y a medida que los niveles de pobreza han crecido en la Argentina, hemos aprendido a trabajar con un gran número de movimientos, asociaciones, centros vecinales, sindicatos", sostuvieron en un comunicado que lleva la firma de los obispos Calos Tissera (Quilmes), Gustavo Carrara (CABA) y Roberto Álvarez (Rawson).
"En un país cuya pobreza sigue creciendo y que no admite miradas sesgadas, prejuicios ideológicos y peleas sectoriales, somos testigos de que muchos hermanos viven la angustia de no saber con qué alimentarán mañana a sus hijos. No es difícil sortear las dificultades y desacuerdos presentes volviendo a poner en el centro lo que siempre ha debido seguir allí: las personas y familias que viven en la pobreza o la indigencia, especialmente los niños y los ancianos. Lo demás, está demás", concluyeron.
La firma de los convenios con entidades religiosas, entre ellas la Cooperadora de la Nutrición Infantil de Abel Albino o la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la Argentina (Aciera) ocurrió en medio de los reclamos de organizaciones sociales y comunitarias, que hicieron filas de 20 cuadras durante más de cuatro horas en pedido de ayuda alimentaria frente al Ministerio de Capital Humano, después de que la titular del organismo les planteara la semana pasada a manifestantes que recibiría "a la gente que tiene hambre, no a los referentes".
La ministra de Capital Humano aclaró: "Yo no cité a la gente para que esté bajo el sol, los convocaron los dirigentes. El otro día, al verlos en la puerta del Ministerio, bajé para atenderlos por una situación puntual. Pero esta vez no los voy a recibir porque yo no los convoqué. Fueron los dirigentes que usan a la gente y la hacen hacer cola bajo el sol", según información oficial del Ministerio. A su vez, el vocero presidencial, Manuel Adorni, confirmó en conferencia de prensa en Casa Rosada que Pettovello no iba a recibir a los piqueteros.
Días atrás, la Iglesia Católica, a través de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), ya le había pedido al Gobierno que no interrumpa la ayuda a los centros asistenciales, al advertir que "cientos de miles de familias" en el país tienen problemas para "alimentarse bien". Y plantearon: "La comida no puede ser una variable de ajuste".