Luces amarillas en el Gobierno: los supermercados sufren un derrumbe de ventas récord
Los primeros datos de la economía real en este comienzo del año son impactantes, incluso, para los propios protagonistas. En el caso de las ventas de los grandes supermercados, la caída de las ventas ante la aceleración inflacionaria provoca preocupación a fabricantes y también a los comerciantes.
Los primeros registros del año lucen desconcertantes, no por la tendencia, sino por la magnitud del ajuste en las ventas.
Histórica caída de ventas en la primera semana del año
En la primera semana del año hubo un retroceso del 19% en el volumen de ventas en las grandes cadenas de supermercados, respecto de la primera semana de enero del año pasado.
Los datos surgen del último relevamiento de Scentia, una consultora especializada en consumo masivo que tiene acuerdos con todas las cadenas de supermercados para hacer el monitoreo de las ventas.
Todavía no hay registros de los movimientos en los pequeños autoservicios y almacenes de barrio -allí la muestra se toma mensualmente-, y será clave verificar si allí también se percibe una caída tan fuerte de las ventas.
Lo que sí parece claro es que la actividad económica se está clavando, producto de la aceleración de los precios. Se nota en algunos rubros en particular: desde las ventas de combustibles hasta las de materiales para la construcción.
El impacto de la inflación en las ventas de alimentos
Después del 25,5% de inflación de diciembre -y del casi 30% en los alimentos y bebidas-, este mes comenzó con alzas en los precios en las góndolas. Las principales consultoras que vigilan la evolución de los valores coinciden en que las subas son más módicas, pero que igual enero cerrará con una inflación promedio apenas más baja que la del mes pasado.
Un golpe imposible de asimilar para la mayoría de los bolsillos de los argentinos. No queda otra alternativa que hacer el ajuste en las compras.
Osvaldo Del Río, director de Scentia, ya tiene las primeras proyecciones para lo que viene: "Este año podría mostrar una retracción de las ventas de consumo masivo del 7%. Esto te dejaría seis puntos por debajo de 2019, año en el que cayó 7,3%", confía en diálogo con iProfesional.
La caída del 19% en el volumen de ventas de las cadenas de súper e hipermercados de todo el país en la primera semana de enero, con relación a la misma semana del año pasado, apunta a convertirse en uno de los peores comienzos de año de la historia reciente.
En la cámara que agrupa a los autoservicios barriales, también observan un comienzo de año complicado. Aunque todavía no hay un registro confiable para estimar cómo viene el mes.
Los más chicos se agrupan para paliar la crisis
Algunos integrantes de la cámara que agrupa a los autoservicios de barrio decidieron agruparse para confrontar con algunas de las fábricas líderes.
"La Serenísima avisó que pasará un incremento en sus listas del 15% la próxima semana. La segunda en los últimos 20 días. Así es imposible", se queja el dueño de tres autoservicios en la zona sur del conurbano, que se juntó con colegas suyos para decidir en conjunto distintas estrategias.
Una de las cuestiones fue suspender las compras de productos Arcor, que también envió listas con ajustes muy poderosos entre finales de 2023 y comienzos de este año, tanto en golosinas como en productos de la canasta básica.
Otra de las iniciativas de los pequeños comercios pasa por ofrecer una pequeña canasta, de no más de 20 productos, con rebajas de 20% en los precios. Una pequeña ventisca en medio del vendaval.
Golpe sobre la actividad
La caída de la economía, en este contexto, donde claramente los precios corren bien por delante de los ingresos de la población luce inevitable.
En todo caso, la pregunta refiere a la magnitud del derrape de la actividad. Lo que está sucediendo en las grandes cadenas de supermercados puede ser un buen indicio del golpe.
Hay más ejemplos en este comienzo de año.
Desde las estaciones de servicio, también advierten un golpe tras los sucesivos incrementos en los precios de los combustibles. Desde CECHA, la cámara que agrupa al sector ya advirtieron de una merma del 20% en los volúmenes expendidos durante diciembre pasado. También prevén un fuerte ajuste para este comienzo de año.
También, en el sector de la construcción se nota una merma relevante, según advierten las principales compañías que venden materiales para la construcción. Las ventas sufrieron un fuerte desplome. Se agravó lo que ya se venía observado desde mediados de año.
En diciembre, la caída fue del 17,4% en relación al mismo mes de 2022. La baja respecto de noviembre fue de 14,8%. Un retroceso histórico y que impacta en uno de los sectores más pujantes de la economía.