Tras el shock de aumentos, expectativa en el Gobierno por una baja en el precio de la carne
No se trata, esta vez, de una medida del Gobierno. Ni de un pedido especial en medio de la campaña. Más bien, lo que está sucediendo en el mercado de la carne es que los precios caen, se acomodan a la baja, luego del shock de aumentos a lo largo de agosto.
Por ahora, esa baja sucede en el mercado mayorista (Cañuelas), y la expectativa tanto en el sector privado como en el equipo económico es que la contracción de los precios se traslade a las carnicerías y a las heladeras de los supermercados esta misma semana.
En las dos primeras semanas de septiembre, la caída del novillo en pie fue de 7,6%. Ya acumula un 15% de rebaja desde los máximos de la post devaluación.
Este descenso no se nota aún en los comercios de barrio, ni en los supermercados. De acuerdo a la estimación del consultor Andrés Costamagna, la baja debería ser de $500 por kilo en los mostradores, muy posiblemente a partir de esta misma semana.
Carne: las claves de la baja
¿A qué se debe esta tendencia bajista? El mercado interno no acompañó la suba de los precios. Y las ventas en los comercios minoristas derraparon entre 30% y 35% según los distintos cortes. Esta es la clave de la baja en los precios en Cañuelas.
Este mes, esos precios se vienen manteniendo en las carnicerías. Al menos en las primeras dos semanas del mes.
El argumento de los carniceros es atendible: alegan que sus costos fijos no bajan. Desde los alquileres, hasta los salarios y las tarifas muestran un alza sostenido mes a mes; y por eso resisten la baja en los precios.
Los denominados "cortes populares" registraron alzas de hasta 39% el mes pasado, que dispararon el índice hasta el 15,6% en el caso de los alimentos. A su vez, la canasta alimentaria, que mide la línea de la indigencia, registró un alza del 17% en agosto. El IPC, como se sabe, trepó al 12,4%.
Expectativa por la inflación de septiembre
Según Eco Go, la inflación de septiembre se mantendrá en los dos dígitos. En el caso de los alimentos, prevé un alza promedio del 12,8%. Y un IPC del 11%. Es decir, otra vez, indicadores que no se veían desde hace más de 30 años.
La inflación de este mes se divulgará a diez días de las elecciones de octubre. Por ahora, las consultoras económicas prevén un IPC también de dos dígitos para septiembre.
En el equipo económico dicen, por el contrario, que la inflación de este mes podría ubicarse por debajo del 10%. Quieren que la suba de los precios sea de un solo dígito. Parece difícil que este deseo se concrete en la realidad.