Tras millonaria inversión de YPF, la exploración de Vaca Muerta se expande hacia Mendoza
El comienzo de las operaciones ilusiona al sector hidrocarburífero mendocino que atraviesa una continuada caída de la producción convencional, que alcanzó una baja del 30% en los últimos 10 años.
El proyecto exploratorio que ya está en marcha, comenzó la semana pasada y permitirá determinar el potencial del sector tras la perforación de dos pozos de 2.500 metros de profundidad y más de 2.000 de rama horizontal.
¿Cuánto invirtió YPF para extender Vaca Muerta hacia Mendoza?
El lugar de las operaciones no poseía hasta ahora ningún registro de actividad, por lo cual implica un gran desafío logístico para YPF, que asumirá el riesgo de inversión (que contempla el desembolso de 17 millones de dólares) en esta prueba piloto que incluirá la toma de muestras del suelo y de los sedimentos para entender las características de la formación rocosa en esa zona.
Si bien los dos pozos se encuentran en bloques diferentes, no están distantes uno del otro. En ambos casos, luego de los análisis del suelo se podrá comenzar con las fracturas y ponerlos en producción para conocer la calidad del crudo. En caso de arrojar resultados positivos, YPF espera poder perforar más de 190 pozos en los dos bloques.
"Esto ya es una realidad, ya está funcionando. Se comenzó a explorar lo que en definitiva nos hará saber con certeza qué tenemos acá en Mendoza", afirmó el gobernador mendocino, Rodolfo Suárez, durante una recorrida por las instalaciones.
"Hace tiempo venimos hablando de este gran proyecto", agregó el mandatario en relación a los convenios con YPF. "Vaca Muerta es un hito para la provincia que generará riqueza, empleo y progreso para todos los mendocinos", afirmó.
Suárez se refería así a los trabajos que comenzaron hace más de tres años con la exploración de la lengua norte de Vaca Muerta, donde se espera hallar características similares de la formación geológica a las que existen en Neuquén.
En agosto del año pasado se culminaron los procedimientos de Evaluación de Impacto Ambiental, que incluyeron a diversos sectores como el municipio de Malargüe, la Universidad Nacional de Cuyo, Recursos Naturales Renovables y el Departamento General de Irrigación.
Vaca Muerta se extiende principalmente sobre la provincia neuquina -en donde YPF posee actualmente más de 1.100 pozos no convencionales activos- aunque también abarca parte de Mendoza, La Pampa y Río Negro. De esta forma, el caso mendocino sería el primer desarrollo no convencional fuera de Neuquén.
El gobierno de Mendoza busca salvataje de Vaca Muerta para paliar la crisis productiva
Enrique Vaquié, ministro de Economía y Energía de la provincia, aseguró que, luego de frenar la caída en la que se encontraba la actividad hidrocarburífera, "ahora el desafío inmediato más importante es este, porque si tenemos Vaca Muerta en Mendoza, la actividad que generará el lugar puede posicionar a la provincia, y a Malargüe en particular, como zona petrolera".
Por su parte, el intendente de Malargüe, Juan Manuel Ojeda, también destacó que estos trabajos "le van a cambiar, sin dudas, la composición en materia petrolera a la provincia de Mendoza" y recordó que esta "es la primera vez que YPF decide explorar la formación de Vaca Muerta fuera de la provincia de Neuquén".
El jefe comunal se ilusionó con que la prueba piloto arroje buenos resultados y así mejore los ingresos provinciales y municipales. "No solo estamos hablando desarrollo económico que se genera alrededor de esta gran industria sino también de las arcas provinciales en el futuro. El petróleo seguirá siendo por varios años más la energía prioritaria", dijo.
Al mismo tiempo se refirió a las fuentes laborales que el proyecto genera: "Hay que seguir generando servicios para esta zona, lo cual se traduce en más empleo. También debemos acompañar el polo industrial en Pata Mora para concretar la expropiación de ese parque industrial", sostuvo al detallar que "Mendoza será clave para el desarrollo futuro si esta exploración arroja los resultados que esperamos".
La provincia de Mendoza se extiende sobre dos cuencas petroleras: la Cuyana -que comparte con San Juan- y la Neuquina. La primera abarca 40 mil kilómetros cuadrados y es en la que Mendoza centró su actividad petrolera durante los últimos años. Sin embargo, se trata de una cuenca madura cuya producción viene en caída
En el caso del petróleo en 2012, la provincia tuvo una producción anual de 5 millones de metros cúbicos, lo que representan unos 86 mil barriles por día. En 2022, en cambio, cayó a cerca de 3 millones de metros cúbicos, totalizando unos 56 mil barriles día.