El "Ajustador de Metas": la idea de Sergio Massa para modificar el acuerdo con el FMI
Los daños provocados por la sequía, fuertemente agravados ahora por la reciente helada que afectó la zona núcleo y la nueva ola de calor dieron lugar a nuevas proyecciones hacia abajo de la campaña 2022/23 que impactarían en la economía real.
Las estimaciones proyectaban una pérdida de unos 10.000 millones de dólares de exportaciones mientras que la última estimación de CREA anticipa perdidas por 20.000 millones de dólares.
Esa sequía, la tercera que sufre la Argentina desde el 2018, es la excusa del equipo económico liderado por el ministro Sergio Massa para negociar nuevas metas cuantitativas con el FMI.
Entre estas se destacan la acumulación de reservas internacionales netas, una disminución del déficit fiscal primario y una reducción de la emisión monetaria del BCRA.
Las nuevas metas se anunciarían el próximo lunes junto con la aprobación del FMI de las metas del último trimestre del año pasado que le permitiría a la Argentina recibir un desembolso de unos 5.400 millones de dólares que se incorporarían a las reservas internacionales que en la actualidad suman unos 38.700 millones de dólares.
Una de las posibilidades que se evalúan es establecer una especie de "ajustador de metas" para abajo o para arriba de acuerdo al ritmo de crecimiento de las exportaciones que permita la sequía, porque creen que el clima podría mejorar en el segundo semestre del año.
Otra de las novedades de acuerdo a el rumor que circuló en el mercado finaciero local y en Wall Street la semana pasada es que se buscará avanzar también con un pedido de los técnicos del FMI, que es comenzar a analizar la evasión impositiva en dos impuestos clave como el Impuesto a las Ganancias y el Impuesto al Valor (IVA) tanto de empresas como de individuos ya que hoy la AFIP no tiene una estimación certera de ese número.
Los números de la recaudación impositiva de febrero conocidos el miércoles pasado muestran que esos impuestos siguen figurando entre los que más recaudan, pero más allá que desde la AFIP se busque reducir la evasión impositiva para mejorar la eficiencia de la recaudación.
Las escasas reservas internacionales del BCRA junto a un aumento en el déficit de las cuentas fiscales al que se suma una de la peores sequías de la historia y un contexto inflacionario similar al de los primeros meses de 1990 generan una gran preocupación en los analistas finacieros locales y de Wall Street.
Una de las peores combinaciones en un mercado cambiario es una mayor demanda de dólares de los importadores frente una menor oferta de dólares de los exportadores y eso lo que sufre hoy el mercado argentino.
Qué pasará con las reservas del BCRA
En febrero la oferta de dólares de los exportadores al BCRA fue la menor de todos los febrero desde el del 2003 y la demanda de dólares fue la mayor de todos los febrero desde el del 2006.
Con respecto a la acumulación de reservas internacionales netas (RIN) del BCRA, el acuerdo vigente con el FMI fija que las mismas deberán llegar a los 5.500 millones de dólares al cierre de este primer trimestre, a 8.600 millones de dólares en el segundo trimestre para llegar a 8.700 millones en el tercer trimestre y finalizar en 9.800 millones en diciembre de 2023.
En febrero el BCRA tuvo ventas récord por 880 millones de dólares debido a las menores liquidaciones del sector industrial agroexportador que liquidó solo 500 millones de dólares.
El dato positivo para el BCRA es que la semana qué pasó fue la primera desde el 9 al 13 de enero donde compró 220 millones de dólares que la autoridad monetaria tuvo compras netas positivas pero sólo por 18 millones de dólares .
Otro dato a favor es que el viernes el valor del dólar paralelo llegó a los 375 pesos que es el valor más bajo desde el 6 de febrero pasado, pero en lo que va del año registra una suba del 8 % frente a una inflación acumulada del 12%.
En tanto que el dólar mayorista llegó a los 198 pesos por lo tanto la brecha cambiaria llegó al 90% y registra el menor valor desde un máximo de 110 % registrado en enero pasado.
Con respecto a la proyección del tipo de cambio el REM del BCRA de febrero muestra una proyección del tipo de cambio nominal promedio de $202,67 por dólar para marzo de 2023 con un 5,6% de variación mensual esperada.
El analista Salvador Di Stefano manifestó a Iprofesional que considerando los números de ventas de dólares de enero y febrero pasado las metas de reservas internacionales netas no se cumplirán ni en este primer trimestre ni el resto del año, porque por la sequía las exportaciones del complejo agroexportador industrial caerán unos 15.000 millones de dólares este año y agrega que "la situación de la soja es peor de lo que la calculan a ojo desde la Capital Federal y no pisan el campo".
Cómo irá la producción de soja y de maíz
Según los datos de Di Stefano la cosecha de soja de este año estará por debajo de las 30 millones de toneladas y la de maíz por debajo de las 40 millones de toneladas y señala que en este escenario el valor del dólar depende de quién gane las PASO presidenciales de agosto próximo.
En relación al impacto negativo de la sequía en la economia un informe técnico reciente elaborado por el equipo técnico del Área de Consorcios Regionales de Experimentación de CREA, señala que a la problemática que arrastra el campo con la falta de lluvias, se suman las heladas tempranas del pasado 18 de febrero que afectaron a 1,9 millones de hectáreas de las cuales un 37 % fueron seriamente afectadas.
El número más impactante y preocupante es el que se relaciona con las exportaciones del complejo agroindustrial exportador donde se estima que el país perderá unos 20.400 millones de dólares de exportaciones como producto de la sequía y las heladas que registran una reducción del 35% anual.
El último informe de la consultora Portfolio Personal Invesment destaca que en base a los últimos datos de la Bolsa de Cereales de Bs. As. la oferta del agro en el mercado de cambios podría caer entre 14.000 y 18.000 millones de dólares pasando de unos 44.200 millones en 2022 a una cifra de entre 25.900 a 30.200 millones de dólares.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires en su su Panorama Agrícola Semanal (PAS) bajó sus estimaciones de producción de soja de 38 a 33,5 millones de toneladas y para el maíz de 44.5 a 41 millones de toneladas.
En el caso de la soja, representa una caída de 9,8 millones de toneladas con respecto a al campaña anterior y queda a solo 2,5 millones de toneladas de la campaña de la sequía 2009, y por debajo de la de la sequía del 2018.
Mientras que para el maíz la baja significa la de menor producción desde la campaña 2015/2016 unos 39,8 millones de toneladas y queda también por debajo de los valores del 2018.
"Ante semejante colapso de la oferta en el mercado de cambios, cabe preguntarse cuál será la reacción del BCRA. En cualquier país con flujo de capitales libres, semejante shock de oferta redundaría en una suba del tipo de cambio para reequilibrarla con la demanda" expresa el informe. Y agrega que "no obstante, en el enfoque de control de cambios adoptado por Argentina desde 2019, es esperable que una caída en la oferta sea compensada con una retracción forzada semejante de la demanda, como ya sucedió incontables veces en este segundo cepo cambiario".
Es muy factible entonces que el BCRA reprima la demanda en una cuantía similar.
"El problema es que una mayor restricción a las importaciones sobre las reforzadas con la implementación del sistema SIRA desde mediados de octubre podría afectar seriamente el nivel de actividad económica" describe el informe.
En cuanto al valor de las exportaciones (FOB), los datos del REM del BCRA de febrero proyectan para 2023 u$s80.138 millones frente a losu$s 88.900 millones registrados el año pasado. Las proyecciones del REM de febrero contemplan, para el año 2023, una caída de 9,4% en el valor de las exportaciones y de 7,9% para las importaciones
En el segundo relevamiento del año el REM del BCRA que se elabora con las estimaciones de las principales consultoras y bancos dio una inflación mensual de 6,2% para febrero, y una inflación todo el año del 99,9% anual mientras que estimaron para febrero de 2024 una inflación anual del 102,9%.
Con estos números, el escenario de una sequía que no afloja y los malos pronósticos para la próxima cosecha, el futuro se presenta bastante complicado. Por otra parte los participantes del REM estimaron un nivel del Producto Interno Bruto (PIB) real para 2023 que será similar al de 2022 con una caída del 0,6%. En tanto que algunas estimaciones de consultoras privadas proyectan, en un escenario positivo, una caída de por lo menos un 3%
Lo preocupante es que el acuerdo que Argentina firmó con el FMI, que se anunció el 3 de marzo del año pasado, es considerado por los principales analistas finacieros locales como uno de los más benévolos de los otorgados por el FMI y sin embargo el gobierno no lo puede cumplir y la sequía sigue siendo un gran problema que se suma a los desequilibrios macroeconómicos que este gobierno no ha podido resolver.