No hay Mundial Qatar que valga: vuelve a caer el consumo masivo
Los registros son elocuentes: en noviembre, el consumo de productos de la canasta básica volvió a mostrar un signo negativo. La caída fue de 5,2% en comparación con noviembre del año pasado, de acuerdo al último informe de la consultora especializada Scanntech.
La merma se vincula con la contracción del poder adquisitivo de los consumidores, en medio de una inflación que este año superará el 90%.
La caída se concentra en los pequeños comercios de barrio -autoservicios y almacenes- que son los negocios a los que no llega la canasta de 2.000 productos a precios congelados. Ni existe el tope de aumentos del 4% que sí se controlan en las grandes cadenas de supermercados.
De hecho, el reporte de Scanntech revela que la inflación en los autoservicios alcanzó al 6% en noviembre, por encima del 4,9% medido por el Indec. Y más aún respecto del 3,5% de incremento promedio en el rubro de los alimentos.
Esa mayor inflación en los comercios más chicos dan cuenta de una realidad: esos negocios venden más caro que las grandes cadenas. Básicamente porque los comerciantes no tienen acceso a los mejores precios del mercado, que sí llegan a los supermercados.
Los autoservicios "chinos" y los almacenes se abastecen en los mayoristas o a través de distribuidores -en muy pocos casos lo hacen directamente con las fábricas-, con lo cual terminan pagando más caro por la misma mercadería que venden las grandes tiendas.
Donde se ve el ajuste
Otra de las particularidades que informa Scanntech refiere a que la mayor caída en las ventas se da en los comercios del AMBA (conurbano bonaerense y ciudad de Buenos Aires). En esos distritos, la caída fue del 7% (medido en volumen) en noviembre versus el mismo mes de 2021.
En el interior, la baja fue algo más leve: 4,6%, siempre noviembre contra noviembre del año pasado.
El rubro más castigado -según Scanntech- es el de los productos de "Higiene", con una caída del 8,9%. El segundo lugar del ranking fue el de "Alimentos" (-6,8%), mientras que la baja en "Limpieza" resultó del 2,6%.
En "Bebidas", la baja fue de apenas el 0,5%.
Impacto político
La clave es la aceleración inflacionaria. Un IPC que apunta este año a cerrar en torno del 100% deja afuera a una parte importante de la sociedad que no puede ni siquiera empardar semejante nivel de aumentos de precios. Dicho de otra forma: salvo algunos sindicatos con gran poder de negociación -como bancarios o camioneros-, para el resto es muy difícil -sino imposible- no perder ingresos en términos reales son semejantes subas de precios.
El escenario tiene un lógico y natural impacto sobre el humor social. No es casualidad que la imagen del Gobierno se encuentre en mínimos históricos. Aun por debajo de los años de la pandemia, cuando existía un áspero debate sobre la forma de enfrentar la circulación del coronavirus.