Las claves del plan quinquenal y la reforma impositiva para empresas que anunció Massa

En el Gobierno empezaron a sentir un leve optimismo político de cara a 2023 y el ministro de Economía, Sergio Massa, intenta reflejarlo ante el empresariado con el planteo de iniciar una suerte de "plan quinquenal" que se mantenga al margen de la puja electoral y enviar al Congreso una propuesta de cambios en el régimen impositivo de las pymes.

Massa dejó esos dos conceptos centrales al participar de la Conferencia Industrial 28° de la Unión Industrial Argentina (UIA) que se realizó bajo la consigna "Producir Transforma". Ante un auditorio netamente empresarial, el ministro ratificó el objetivo de "terminar de estabilizar" las principales variables e inciar el 2023 en otra sintonía.

"Me parece que hay que plantearse el 2023 como el inicio de un programa de cinco años, tratar de correr la batalla política de esa discusión, estableciendo cuáles son los vectores de competitividad global", indicó el ministro y tercer socio del Frente de Todos.

Ese plan apuntaría no solo a la necesidad de consolidar las exportaciones de sectores clave para la economía argentina sino también a la industria local para el consumo interno. En ese marco, la idea del ministro es avanzar con una reforma impositiva para las pequeñas y medianas empresas a la cual quiere darle forma de para marzo.

La idea que Massa la transmitió a la UIA forma parte de su gestión económica pero no está al margen de la situación política que vive el Gobierno, donde en los últimos días observaron encuestas que le sirvieron para renovar en cierta medida la esperanza. En esos estudios vieron una leve recuperación de las expectativas económicas.

Massa y un nuevo "plan quinquenal": ¿cuáles son los ejes que adelantó el ministro?

"El proceso de estabilización no terminó", advirtió Massa, al tiempo que insistió en el objetivo de "fortalecer el programa de acumulación de reservas". En efecto, tras el boom por el "dólar soja", este mes las reservas del Banco Central perdieron poco más de u$s700 millones.

Massa entiende que, junto con la necesidad de avanzar con medidas "que garanticen orden fiscal" en las cuentas públicas, el fortalecimiento de las reservas es clave para su gestión y por ello puso de relieve la "decisión de ir promoviendo sectores" con capacidad exportadora y mejorar todo aquello que tiene que ver con el "valor agregado".

Según adelanto el ministro, las medidas de promoción de esos sectores serían clave para poder darle forma al programa de cinco años con el que quiere iniciar 2023, dado que el objetivo sería consolidar a los sectores que pueden ser competitivos globalmente. La mira está en los que siempre menciona: hidrocarburos, proteínas y economía del conocimiento.

Pero además, en ese programa Massa quiere dejar establecido "cuáles son los mecanismos de fortalecimiento de industria local sobre la base de un mercado interno que todavía es central a la hora de mirar el Producto Bruto Interno (PBI)" de la Argentina.

En pleno año electoral, el ministro buscará así medidas que recuperen el consumo en el mercado interno y, en ese contexto, domar la inflación central. Entre las dudas que sobrevuelan los sondeos de mercado privados, Massa confía en poder mostrar una baja al orden del 3 ó 4% para abril. La semana pasada se lo prometió a los senadores que responden a la vicepresidenta Cristina Kirchner, según supo iProfesional.

Reforma impositiva para empresas: ¿habrá proyecto para el Congreso?

En esa apuesta por el consumo interno se inscribe también la segunda definición central que dejó Massa en el congreso de la UIA de cara a 2023.

"Otro gran desafío para el año que viene es sentarnos en enero y febrero, porque en marzo arrancan las sesiones, y plantear en el mensaje (al Congreso que brindará el presidente Alberto Fernández) un cambio en el régimen impositivo para pequeñas y medianas empresas", anunció el ministro.

Según explicó la idea es "ir al régimen de amortización acelerada de inversiones para las pymes para que tengamos la capacidad de multiplicar la inversión, entendiendo que en las tres turbinas de la economía argentina hay una que depende del poder de compra de la gente, el consumo, pero que las otras dos que son inversión y exportaciones".

Sin entrar en demasiados detalles, tanto en el planteo sobre un programa de cinco años como en el anuncio de esa eventual reforma impositiva que quiere tener lista como proyecto de ley para marzo, Massa dejó pistas de que su plan sigue teniendo como eje político la búsqueda de acuerdos con la oposición en el Congreso.

El ministro apuesta a lograr consensos similares al que obutvo para la aprobación del Presupuesto 2023 en la Cámara de Diputados, donde negoció tanto con opositores como con oficialistas.

De hecho, durante su exposición en la UIA dijo que valora "enormemente la actitud del radicalismo de acompañar el Presupuesto porque parte del problema de 2022 está asociado a no tener Presupuesto". Un guiño al presidente de la UCR, Gerardo Morales, que participó del evento poco antes.

¿Hay un nuevo optimismo en el Gobierno?

Los anuncios con los que Massa sorprendió en encuentro se dan en medio de una semana donde el trío que conforma junto a Fernández y Cristina Kirchner vio una luz de esperanza sobre su futuro político a pesar de la fuerte interna por el armado electoral entre el Presidente y la vicepresidenta.

Algunos sondeos difundidos en los últimos días mostraron que el Frente de Todos puede tener un margen de crecimiento de cara a las elecciones que, si bien no le garantizaría una victoria, al menos podría evitarle una derrota tan dura como la que hasta el momento pronosticaban tanto en el oficialismo como en la oposición.

Uno de ellos, de la consultora Analogías, exhibió una leve recuperación en las expectativas económicas, con un "optimismo" en el orden del 28%. Eso representó una mejora respecto del segundo trimestre del año, cuando la política económica del entonces ministro Martín Guzmán eran bombardeada por Cristina Kirchner.

De ser así, Massa estaría cumpliendo un rol central para la alianza oficialista. Cerca del ministro de Economía ratifican lo mismo que afirma en público: que no está pensando en ser candidato presidencial. Otras fuentes deslizan que lo definirá entre marzo y abril y que estará relacionado a los resultados que logre en materia de inflación.

Massa tiene puentes con el sector industrial

En ese contexto, el ministro intenta trasladar optimismo al empresariado. Ante la UIA resaltó que en lo que refiere a los créditos para producción con el "seguro de tasa" implementado con bacos públicos y privados, pretende que lleguen a "$1 billón para el primer trimestre del año que viene", desde los $500 mil millones proyectados de aquí a fin de año.

También defendió el sistema con el que intenta hacer un seguimiento de la compra de dólares para importaciones, en el marco del plan para "cuidar las reservas" del Banco Central y que los recursos no usen para que "algunos vivos cambien el avión dos veces por año".

"Esto no es un régimen de castigo a los sectores productivos sino un mecanismo de defensa de los dólares para los sectores productivos, frente a aquellos que pretenden construir rulos o timbas desde el sector financiero sobre las reservas del Banco Central", afirmó Massa.

En esa línea, aseguro que "están" los dólares pero solo para ser destinados al "trabajo y la producción".