La CGT prepara una marcha masiva al Congreso contra el sector empresario por la inflación
La escalada inflacionaria reavivó la intención de la Confederación General del Trabajo (CGT) de realizar una protesta contra "los sectores concentrados" de la economía. Los principales dirigentes coinciden en que "algo hay que hacer", pero descartan un paro nacional porque "afectaría aún más al Gobierno" y explican que "provocaría un efecto contrario, que es visualizar el accionar de los formadores de precios". Si bien no hay fecha, se especula con el martes 26 de julio, a 70 años de la muerte de Eva Perón.
En el medio de la crisis político-económica, uno de los cotitular de la CGT, Carlos Acuña, informó que la semana próxima habrá una reunión del consejo directivo de la central obrera para decidir "que hacemos contra los sectores concentrados". Su par, Héctor Daer descarta de plano un cese de tareas mientras que el otro secretario General, Pablo Moyano, expresó: "Si bien al gobierno le faltó un poco de firmeza (en el control de la inflación), hacemos responsable a los grandes formadores de precios".
La idea de una movilización se viene barajando desde hace varias semanas. Se pensó en marchas hacia las sedes de la Unión Industrial Argentina (UIA), la Sociedad Rural (SR) y la Coordinadora de Productos Alimenticios (COPAL) y hasta un gran acto en el Luna Park para presentar un programa de reactivación económica y reclamos en materia laboral y salarial.
Un llamado de atención al oficialismo y la oposición
Esas iniciativas ya fueron desestimadas y comenzó a cobrar cuerpo una gran manifestación al Congreso. El secretario de Prensa de la CGT, Jorge Sola, admitió esa posibilidad. "Puede ser un buen lugar, porque coinciden el oficialismo y la oposición", indicó y remarcó: "Tenemos la necesidad de reclamar desarrollo, producción y empleo para terminar con el trabajo no registrado".
Acuña, por su parte, ratificó el respaldo del movimiento obrero a la designación de Silvina Batakis, al frente del ministerio de Economía. Indicó que "las expectativas son de esperanza, pero uno ve que no están bien las cosas" y subrayó: "Hay gente del poder económico concentrado que no quiere que la gente esté bien, porque ellos no lo necesitan".
El titular del gremio de los empleados de Estaciones de Servicio avanzó en sus críticas: "Los que generan inflación son los formadores de precios; no dejan que crezcan los salarios porque al otro día de las paritarias te aumentan todos los precios". Y apuntó: "Los formadores de precios no tienen gobierno, no tienen bandera; lo único que tienen es el signo pesos y no les importa. ¿A costa de qué? A costa de la gente".
Acuña aclaró que "en la CGT no se habló de paro, se habla de una movilización" y reiteró el respaldo al Gobierno, al manifestar que "siempre acompañamos y tenemos la prudencia que tenemos que tener".
Moyano: "Guzmán fracasó en la lucha contra la inflación"
Moyano, por su parte, cuestionó la gestión de Martín Guzmán al frente del Palacio de Hacienda. Consideró que "fracasó en la lucha contra la inflación" e insistió en que si bien el Gobierno nunca tuvo firmeza para aplicar medidas de control, "hacemos responsable a los grandes formadores de precios". Señaló que "en este momento de crisis mundial, no tuvieron un gesto de solidaridad para tratar de frenar los aumentos".
Sobre la marcha de la economía, coincidió en una mejora de la macro. "Vemos el crecimiento con las rutas y autopistas abarrotas de camiones pero lamentablemente, eso no se ve reflejado en la baja de precios".
En cuanto a la marcha de las paritarias, destacó que "se vayan negociando con las cláusulas de revisión", pero no se mostró optimista en que los salarios le ganen a la inflación. "Ojalá toda la sociedad pueda tener mejores salarios; a eso apunta la CGT y por eso acompaña al actual gobierno", dijo el también secretario Adjunto del gremio de Camioneros.
Por otra parte, advirtió que "hay un proceso de desgaste por parte de la derecha, a través de los grandes medios de comunicación, la Justicia, y personajes que quieren desestabilizar al gobierno; con acciones como el faltante de gasoil o la medida de fuerza que anunciaron los sectores del campo".
Martínez, crítico con la interna oficial y la clase política
Quien tiene una mirada más crítica a la clase política es el secretario General de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) Gerardo Martínez, quien admitió dificultades para delimitar quién gobierna en la Argentina, producto de lo que definió como "un cortocircuito" entre el Presidente Alberto Fernández y la vice, Cristina Fernández de Kirchner, advirtiendo que esa relación "pone en juego el futuro de la Argentina".
El también secretario de Relaciones Internacionales de la CGT manifestó: "Creo que nunca pasó una situación así, en el que se exponga públicamente ya sea el enojo, la ignorancia, el ninguneo. Lo que vemos es un circuito de comunicaciones que no están en orden, y puede desembocar en un cortocircuito. Está en juego el destino de la Argentina, por lo que hay que evitar ese cortocircuito".
Martínez se mostró esperanzado que a raíz del cambio de gabinete económico y de los últimos encuentros entre el Presidente y la vice se calme la interna en la alianza gobernante. "Cuando le regalé la lapicera a Alberto Fernández (en un reciente acto de la UOCRA) fue para decirle que no nos detengamos, pero puedo observar que necesitamos estabilidad política para llegar a 2023. Nos angustia cuando hay dirigente que hablan de 2023"
Indicó que "tanto dentro del oficialismo como en la oposición es una discusión de palacete. En una discusión a ver quién se queda con tal oficina, con tal micrófono. Quién es el que hace el primer Twitter, el que tiene más presencia en las redes. Vemos como que no hay un mensaje claro y suficiente que dé una luz de esperanza y de previsibilidad a la sociedad en su conjunto".