Alquileres: expertos advierten que la reforma de la ley es el único camino para mejorar las condiciones a inquilinos y propietarios
Casi un 60% de las propiedades que estaban en alquiler salieron del mercado, más del 70% de aumento en los valores mensuales de la renta y todas las partes disconformes. Estos fueron los resultados de la ley de alquileres que se sancionó en 2020. Por eso, recientemente desarrolladores y representantes del sector inmobiliario reclamaron la urgente modificación de la misma.
Uno de los actores que más protagonismo está teniendo en la lucha por dar de baja esta ley es el Colegio Profesional Inmobiliario de CABA (CPI), quien participó en la comisión de legislación general en la Cámara de Diputados del Congreso de la Nación.
Allí, Marta Liotto, presidente del CPI, propuso modificar dos artículos: el referido a la duración, para reducir los contratos a dos años como era anteriormente, y la actualización, para que se haga según el acuerdo entre las partes.
"Los corredores inmobiliarios somos conocedores de la situación que está atravesando el mercado locativo de viviendas, pero si modificamos los dos puntos mencionados puede mejorar la oferta de inmuebles", expresó Liotto.
Un mercado sin inmuebles para alquilar
Por otra parte, Liotto describió el difícil momento que está viviendo el sector inmobiliario: "Si no seducimos a los propietarios, no hay mercado. Por eso es necesario convencerlos para que ofrezcan sus inmuebles y podamos revertir esta situación".
Desde su mirada, el bróker Oscar Puebla no esconde su disconformidad con la actual ley. "Es un cachivache. Tuvo y tiene una escasa utilidad, encima las partes ya le conceden poco valor. Esta es la definición perfecta para nombrar los parches y remendones que tiene la actual ley de alquileres".
"Esperamos dejen todo sin efecto y finalmente encuentren la forma en la que tanto el inquilino como el propietario puedan sentarse para acordar cómo llevarse bien durante tres años ,como un joven matrimonio dispuesto enfrentarse los vaivenes del gobierno de turno. Y, por favor, no se olviden de la guerra contra la inflación", reclama Puebla.
Con una nueva ley, se reactivaría el mercado de alquileres
Para Daniel Zampone, de Zampone Propiedades, de reformarse la ley, seguramente se reactive el mercado, porque es lo que "todos estamos esperando", dice.
"El mercado inmobiliario es un árbol que se está secando hace varios años, y la ley de alquileres son las ramas. Por eso no solo queremos que cuiden a las ramas, sino también que ataquen el problema de la raíz, que es la falta de crédito, de motivación para invertir, inflación y no contar con seguridad jurídica", enumera este referente.
Y agrega: "Solucionando estos puntos la ley de alquileres empieza a fluir sola. Ojalá que este debate que se está dando sea una puerta que se abra para debatir verdaderamente la raíz de todo el problema que venimos padeciendo".
"Es necesario que la ley establezca un equilibrio entre oferentes y demandantes, es decir, propietarios e inquilinos. La intención de topes de ajustes y nuevos gravámenes no es positiva. El problema pasa por estabilizar toda la estructura de precios de la economía, no hay solución para un solo sector, pues hay que pensar que los precios de la economía funcionan en una matriz donde se exponen interrelaciones permanentes", opina Martín Calveira, investigador del IAE Business School.
Y añade: "La gestión debe estar dominada por estabilizar la dinámica inflacionaria. Las restricciones y regulaciones de contratos privados no son efectivas al menos en el impacto real sobre los precios. A esto se suma que se agregarían nuevos impuestos como el que gravaría los inmuebles vacíos. Si la inflación se sostiene, la ley muy probablemente no tendrá el éxito esperado, más aún sobre los inquilinos".
Con este nivel de presión, más los números del sector que se vuelven más asfixiantes cada mes, el gGobierno tiene por delante un problema de urgente resolución al que ya no puede ignorar.