Tasas de interés, bajo presión: expectativa por cumbre en el BCRA justo antes de oficializarse el dato de inflación
La inflación se ha convertido en un problema crítico para el Gobierno. El dato de inflación de marzo que se conocerá este miércoles 13 de abril a las 16 que, según adelantó el ministro de Economía Martín Guzmán superará el 6%, pone más presión al directorio del Banco Central (BCRA) que se reúne esta tarde y evaluará los pasos a seguir sobre la política de tasa de interés. En el mercado esperan que la tasa de política monetaria sea ajustada por cuarta vez en lo que va del año.
Y es que los analistas plantean ante la aceleración inflacionaria de marzo y las estimaciones preliminares de algunas consultoras privadas de que el costo de vida en abril podría ubicarse entre 4,5 y 5% sería "una mala señal en relación al acuerdo con el FMI" que la entidad monetaria no suba la tasa.
En el acuerdo con el FMI, el BCRA se comprometió a mantener una tasa de política monetaria efectiva positiva en términos reales, o sea en relación a la inflación. Esto es clave para hacer más atractivos los instrumentos de inversión en pesos, comenzando por el plazo fijo.
Pero además los economistas advierten que ante la velocidad que tomó en lo que va de abril el crawling peg si la entidad monetaria no aumenta la tasa podría generar problemas en el mercado cambiario.
En ese sentido, la luz amarilla se enciende porque por primera vez en lo que va del año la tasa anual de devaluación oficial supera a la tasa Badlar en pesos (la que pagan los bancos para grandes depósitos a plazo fijo), con lo cual los analistas consideran que esa situación no es sostenible porque podría desincentivar la liquidación de divisas de la cosecha gruesa.
Suba de tasa de interés: por qué el mercado la pide
Natalia Motyl, economista de la Fundación Libertad y Progreso señaló a iProfesional que "más allá de que este gobierno no es tendiente a incrementar la tasa de interés por el impacto negativo sobre la actividad, lo cierto es que si quiere acercarse al cumplimiento de las metas con el FMI debe mostrar una política monetaria más prudente".
En ese marco, Motyl sostuvo que "como el gobierno debe financiar tres cuartas partes del déficit fiscal con deuda local, según lo acordado con el FMI, deberá subir las tasas de interés para volver más atractivos los instrumentos en pesos".
A eso, dijo, se suma que el hecho de que el BCRA "incrementó el ritmo de devaluación que ha alcanzado el 4% mensual en los primeros meses del año y supera la tasa de interés en pesos".
Al respecto, la consultora FMyA advirtió que este ritmo de devaluación del dólar oficial del 4% mensual "es mayor a la tasa Badlar (la de los depósitos) de 3,5% mensual (42%Tasa Nominal Anual) y mucho menor a la inflación estimada de marzo".
"Esta situación donde el dólar oficial corre más rápido que la tasa de interés no es sostenible, ya que puede desequilibrar el mercado cambiario (exportador retrasa e importador acelera). Esta dinámica podría cambiar si el BCRA sube la tasa de interés para empatar el nivel devaluación del dólar oficial", alertó.
En sintonía, Martin Vauthier, director de la consultora Anker, argumentó que si el BCRA "no sube la tasa con estos niveles de inflación la hace más negativa en términos reales y es una mala señal en relación al acuerdo con el FMI".
En ese contexto, el analista estimó que "lo más probable es que haya algún retoque de tasa aunque ex post contra la inflación siga siendo negativa".
También coincidió en que "es importante que haya un ajuste porque un crawling peg que corre por encima de la tasa de interés arriesga generar un problema en el mercado de cambios porque desalienta la liquidación de exportaciones y alienta la demanda de cobertura vía importaciones".
Asimismo, Juan Manuel Franco, economista jefe del grupo SBS remarcó "que es importante que la tasa efectiva mensual del costo del endeudamiento en pesos se ubique por encima de la tasa de devaluación, dado que de lo contrario, habría incentivos a no liquidar los dólares de la cosecha, dificultando el cumplimiento de la meta (de reservas) del segundo trimestre del FMI".
¿Una señal de que el BCRA subirá la tasa?
Lucas Yatche, jefe de estrategia de Liebre Capital, señaló que en la licitación de deuda en pesos que realizó el Tesoro este martes 12 de abril en la previa a la reunión de directorio del BCRA "nuevamente observamos subas de tasas, con las LEDES a septiembre alcanzando el 51% Tasa Nominal Anual (TNA) por lo que esperamos una nueva suba de tasas del BCRA en el cortísimo plazo". ".
A su vez, Yatche resaltó: "Tasa de interés Badlar con TEA 51%, y TEA de Leliq en 55% que viene corriendo por debajo del nuevo ritmo devaluatorio del BCRA con un crawling peg que se consolida en nivles del 60/65% TEA no es consistente, dado que los exportadores pierden incentivos a liquidar".
El analista Gustavo Ber también cree "la aceleración del crawling-peg sería la antesala de nueva suba en la tasa" por parte del BCRA en busca "de poder mantener el clima de calma cambiaria y el mayor apetito por colocaciones en pesos, lo cual resulta crucial frente a las necesidades de financiamiento local".
Con la misma mirada, Emiliano Anselmi, analista de PPI alegó que "la tasa en pesos Badlar, que es la que miran los grandes depositantes, el sojero, está en 42% anual por lo que por primera vez queda por debajo de la evolución del tipo de cambio oficial".
Por su parte, Franco subrayó que "el acuerdo con el FMI contempla que Argentina iría hacia un sendero de tasas reales cada vez más altas desde los niveles negativos actuales, hasta alcanzar terreno positivo, esto ya lo ha venido haciendo el gobierno vía licitaciones de títulos del Tesoro".
"Consideramos que luego del dato de inflación el BCRA podría disponer de una suba de tasas, aunque no sería muy elevada", juzgó.
¿Cuánto espera el mercado que suba la tasa de interés?
Tras la confirmación de Guzmán de que la inflación de marzo superará el 6%, algunos analistas estiman que el nuevo reajuste que haría el BCRA en la tasa de política monetaria podría ser más agresivo que las tres subas anteriores que implementó la entidad monetaria en lo que va del año.
La última suba fue el 22 de marzo cuando dispuso elevar en 200 puntos básicos la tasa de interés nominal anual de las Letras de Liquidez (Leliq) a 28 días, pasando de 42,5% a 44,5%
.A su vez, la entidad subió el rendimiento mínimo garantizado de los plazos fijos y lo fijó en 43,5% anual para las colocaciones a 30 días lo que representa un rendimiento de 53,3% de tasa efectiva anual (TEA) para incentivar el ahorro en pesos.
Diego Martínez Burzaco, jefe de estrategia de Inviú, estimó que "seguramente el BCRA va a ir hacia un esquema más agresivo de tasa de interés al menos de corto plazo".
"Estamos esperando un aumento en torno a 300 o 400 puntos básicos. El BCRA debería actuar con mayor firmeza para no generar esa sensación de que la estamos corriendo de atrás", fundamentó.
Con igual óptica, Anselmi manifestó que "no vemos sostenible que el BCRA mantenga el diferencial negativo del tipo de cambio subiendo a un mayor ritmo que la tasa en pesos".
En ese marco, el analista dijo que "creemos que el BCRA va a a subir la tasa 300 puntos básicos para al menos volver a la neutralidad, y que ese diferencial sea cero".
En sintonía, Adrián Yarde Buller, economista jefe de Facimex Valores, dijo que "hemos revisado al alza nuestra proyección de inflación a 5,5%" para marzo y "esperamos una nueva suba de tasas de 300 puntos básicos por parte del BCRA"
De concretarse un ajuste en la tasa de esa magnitud sería el más alto del año luego de uno de 200 puntos en enero, 250 puntos en febrero y 200 puntos en marzo.
Sintonía fina entre tasa y dólar
Otros analistas desestiman esa posibilidad y prevén una actualización de las tasas de una magnitud similar a las anteriores porque a la hora de la definición el BCRA tiene en cuenta los costos de la medida dado que repercute en su déficit cuasifiscal al aumentar el pago de intereses por Leliqs y puede resentir a la actividad económica al encarecer el crédito. En ese marco, Motyl cree que la entidad monetaria ajustaría la tasa 200 puntos.
En ese sentido, Vauthier recalcó que "en lo que tiene que ver con la tasa y el tipo de cambio oficial el BCRA no tiene opciones buenas con estos niveles de inflación" dado que "si desacelera el crawling se come el colchón cambiario, y si lo acelera le pone un piso más alto a la inflación hacia adelante".
A su vez, el economista afirmó que "la dinámica de los pasivos remunerados por los intereses endógenos de las Leliqs y los pases le pone un limite al BCRA a la hora de subir la tasa".
Según su visión, "mientras no haya un programa económico que sea creíble para el mercado que esté respaldado por la política y que permita revertir expectativas el BCRA no tiene demasiado para hacer para intentar anestesiar la inflación y debe ir haciendo sintonía fina entre el crawling y la tasa, pero es difícil que las dos variables puedan acercarse a la inflación en estos niveles".
"Hoy la tasa de política monetaria en términos mensuales está en la zona de 3,7% y el tipo de cambio se está moviendo al 4% con lo cual el movimiento mínimo de la tasa debería alcanzar ese 4% mensual para no generarse un ruido innecesario en el mercado de cambios", opinó.