Alberto Fernández versus La Cámpora: por qué cree que saldrá fortalecido de cara a las elecciones 2023
Alberto Fernández está convencido de que esta semana podría convertirse en la más importante desde que empezó su gestión. A punto tal que ya piensa en salir fortalecido de cara a las elecciones del 2023.
A sus colaboradores más estrechos les dijo que es un momento "bisagra" para el país. Una definición que alguna vez también deslizó en público. No es poca cosa para un jefe de Estado que viene de atravesar sucesivos shocks externos: primero la pandemia y ahora los efectos de la guerra en Ucrania.
Según Fernández, la suerte que corra el acuerdo con el FMI en el Senado definirá la suerte de la Argentina, y de su propia administración.
Paradójicamente, cerca del Presidente aseguran que el destino quedó más atado a lo que terminen por definir dentro del núcleo duro del kirchnerismo antes que en la oposición de Juntos por el Cambio.
El acuerdo con el FMI entra al Senado
En la Casa Rosada creen que la iniciativa saldrá con un respaldo determinante gracias a los gobernadores, que juegan a favor del Ejecutivo nacional. Para esos mandatarios, el acuerdo con el Fondo es el oxígeno necesario para que la economía siga funcionando. Un default, a esta altura, con pocos dólares en el Banco Central depararía una devaluación inmanejable y una crisis política y social.
"Lo de los chicos de La Cámpora es difícil de explicar. Juegan con fuego. Parecieran no entender o son demasiado egoístas", define un hombre clave de la administración, un operador de AF con los gobernadores y también con buena llegada al conurbano bonaerense, al tanto de la realidad y las necesidades de los más humildes, a quienes La Cámpora dice representar.
En el entorno del Presidente aseguran que si el acuerdo, como esperan, se convierte en ley esta semana despejará el camino para la firma final con el FMI y la refinanciación automática del vencimiento del próximo día 22.
El tratamiento en la Cámara alta se iniciará hoy mismo, con las presencias de Martín Guzmán y de Juan Manzur en la comisión de Presupuesto. La idea es que mañana martes tenga comisión y que pueda votarse en el recinto no más allá del jueves, a pesar de la obligación de esperar siete días.
La clave del optimismo presidencial hay que buscarla en un hecho lineal: Fernández está convencido de que el acuerdo con el FMI es ordenador de la economía. Y que la estabilidad cambiaria (el organismo no pidió una devaluación para el acuerdo) potenciará la dinámica económica y mejorará las expectativas.
La suba de precios preocupa al Gobierno
Cerca del jefe de Estado, eso sí, admiten que el gran inconveniente que afronta hoy es la imparable suba de los precios. Una inflación que ya corría al 50% interanual se aceleró en las últimas dos semanas, por culpa del shock de aumentos provocada por la invasión rusa a Ucrania.
Por ahora, desde la Casa Rosada desestiman la posibilidad de mayores retenciones a las exportaciones de trigo y maíz.
Sin embargo, admiten que "hay varias herramientas" en debate, siempre con la idea de que pueda morigerarse la suba de los precios de productos de la canasta básica alimentaria.
En las últimas dos semanas hubo fuertes aumentos en los farináceos: desde la harina hasta fideos, pan y galletitas. También se detectó un sensible incremento en los aceites, en especial en el aceite de girasol.
El Gobierno apuesta a la mejora de la economía
Desde el círculo chico del Presidente son optimistas: aseguran que tras el acuerdo con el Fondo, las reservas del Banco Central mostrarán una recuperación -que Guzmán estimó en unos u$s6.200 millones- y que ese hecho junto con la confirmación de la estabilidad cambiaria le dará una dosis de poder al Gobierno, que hoy no tiene.
"Buscamos acuerdos razonables con los empresarios y con las cerealeras", dicen las fuentes oficiales.
"¿Hay chances de que se impongan cupos a la exportación?", pregunta iProfesional. La respuesta es previsible, pero da una idea de lo que viene: "La caja de herramientas está abierta, pero no queremos perjudicar a los exportadores. Argentina necesita divisas. Por eso se intentará llegar a un consenso".
Al contrario de lo que aseguran algunos informes de consultoras económicas -que prevén efectos negativos sobre la economía por la guerra en Europa-, los funcionarios piden mantener la calma.
"Tesla acelera las inversiones en el norte argentino por el litio. Vaca Muerta, con los actuales precios, vuelve a ser súper apetecible para las inversiones. Argentina va a quedar muy bien posicionada a ojos de los inversores. A corto plazo tenemos un desafío muy grande con el precio de los alimentos, pero vamos a encontrar las soluciones de la mejor manera posible", reitera el funcionario consultado por iProfesional.
"Van a ver que en las próximas semanas, el escenario interno se va a aclarar", insiste la fuente oficial.
El desafío presidencial parece claro. Desde la noche misma de la derrota electoral, en noviembre del año pasado, Fernández intentó mostrarse como la mejor síntesis del peronismo. La fórmula que intentó desplegar desde diciembre de 2019, pero que la pandemia truncó.
Cerca del jefe de Estado creen que el acuerdo con el FMI da esa nueva oportunidad. Ahora, con la chance de una Cristina Kirchner presumiblemente más alejada de la toma de decisiones. "Si el acuerdo sale esta semana, quedará claro que Cristina está desactivada", razonan en la Rosada semi vacía, el viernes, mientras el Presidente estaba instalado en Santiago de Chile.
¿Será así? ¿Podrá Alberto F. volver al esquema de 2019, en un marco de racionalidad y sin tensiones con su vice?
Fue lo que intentó a comienzos de la pandemia, pero que no pudo sostener. Basta recordar las decisiones sobre Vicentín y la pelea a fondo con Horacio Rodríguez Larreta, ambas medidas a instancias de CFK.
Esta semana en el Senado podría armarse ese escenario político con el que sueñan los "albertistas" rumbo a las elecciones de 2023.