El mal negocio de comprar un auto 0Km en Argentina: casi el 60% del precio son impuestos
La industria automotriz se puede considerar como uno de los sectores estratégicos de nuestro país, debido a todos los encadenamientos verticales que este genera en los distintos rubros que abarca desde la manufactura del auto, pasando por los distintos concesionarios, mecánicos, reparaciones y demás.
Según el Ministerio de Desarrollo Productivo, el complejo automotriz es el segundo rubro exportador en el sector industrial, representando así un 28% del total de manufactura de origen industrial, por ello es importante cuidar a este tipo de sectores, no solo pensando en la cantidad de dólares que ingresan gracias a este sino también por la cadena de valor que genera en la economía.
Las ventas de autos 0Km, de acuerdo a la Asociación de Concesionarios de Automotores (ACARA), en diciembre 2021 fue de 17.672 unidades (versus 20.647 en 2020 y 21.345 u en 2019) y si acumulamos las unidades vendidas en todo el año, éstas fueron de 383.798 unidades (versus 344.5600u en 2020 y 461.5390 en 2019). Si bien hubo una mejora con respecto al 2020, las proyecciones para el 2021 eran de 450.000; es decir, hubo una baja de casi 15% con respecto a lo pronosticado.
Las transferencias de autos en el último año, de acuerdo a la Cámara de Comercio Automotor (CCA), fueron de 1.689722 versus 2020, casi 13% más que el 2021. Ahora, si comparamos el último mes de diciembre del 2021, se transfirieron 150.741 unidades, mientras que en diciembre del 2020 hubo un 6,20% más de transferencias.
Los expertos en el sector, aseveran que esta situación tiene una relación directa con la venta de autos 0Km, debido que las concesionarias no solo tienen problemas con las restricciones de importaciones que generan globalmente escasez de vehículos para la venta, sino que el "cepo" a raíz del faltante en dólares, hace que las autopartes que se necesitan para ensamblar autos también escaseen (faltantes en semiconductores, microchips, cubiertas de baja gama, bujías, sistema de amortiguación, frenos, componentes eléctricos, entre otros).
Todas estas cuestiones, aceleran la venta de autos usados. Recordemos que para adquirir un auto 0Km se necesitan aproximadamente $2.000.000, mientras que un usado de 10 años de antigüedad se encuentra a menos de la mitad del precio.
Los Argentinos que adquirieron dólar blue a $138 entre los meses de abril y mayo de 2020 a un dólar hoy de $223 superaron ampliamente el aumento de lista de los autos 0Km que rondaron desde ese momento hasta ahora en un 50%. La devaluación del peso frente al dólar en el mercado paralelo en ese período supera el 62%. Es decir quienes hayan atesorado dólares pueden adquirir hoy un auto 0Km a un valor promocional ya que el listado de precios se ajusta por el movimiento del tipo de cambio oficial.
Por su parte, la situación de los costos de transporte, en el acumulado del año 2021, estuvo por sobre el dato de inflación, ya que terminó con un incremento de un 52,64% de acuerdo a la PAETAC. Este valor se debió a distintos aumentos, entre los principales tenemos un 4% en neumáticos, 4,89% seguros, 2,71% reparaciones, 2,71% equipamiento, 1,23% costo financiero, entre otros.
Es importante destacar el ítem de impuestos, en donde la carga fiscal de poner a andar un auto tiene que tomar en cuenta el 21% del IVA, 25% de Impuestos internos, 1.2% Impuestos a los Débitos y créditos, 7% impuesto a los ingresos brutos, 0.75% impuesto a los sellos y las distintas tasas y comisiones, que finalmente encarecen el rodado y que por supuesto estos costos son trasladados directamente al precio de venta.
Todo lo antes mencionado, hace referencia a cómo se encuentra en perspectiva el sector automotriz en relación a todas las variables del mercado que lo afecta directamente.
Si vemos la situación desde el otro lado del mostrador, si una persona con un salario promedio de $82.000 desea comprar un Fiat Cronos 0km (precio $2.117.000), y destina el 100% de su salario a los pagos, se demorara 26 meses en adquirirlo, pero si destina solo el 15% de su salario demoraría 172 meses (es decir 14 años).
En el caso de que tome un préstamo personal a 36 meses debería pagar cuotas de $126.441, es decir, necesitaría la totalidad de su salario y 35% más de ingresos extras para comprarse un auto 0Km con el pago de su cuota mensual. Quizás la situación más desmoralizante es que para tomar el préstamo en el banco deberá demostrar ingresos por un mínimo de $361.261 mensuales.
Si trasladamos la misma situación pero para la adquisición de una moto Yamaha 0Km (precio $1.750.000), con un salario promedio si destina el 100% de este lograría obtenerla en 21 meses, si solo destina el 15% demoraría 142 meses (es decir casi 12 años). Con un préstamo personal a 36 meses debería pagar cuotas de $104.521; esto significa que necesitaría ganar un 22% más de lo que recibe actualmente de su salario para comprar una moto. Para andar a dos ruedas con la adjudicación de un préstamo bancario deberá demostrar ingresos por $298.633 mensuales.
En líneas generales, se puede reconocer que en este sector aún hay varias cosas que cambiar para que no solo la industria mejore, sino que toda la cadena de valor productiva pueda generar mayor cantidad de divisas; el detalle es que si bien el gobierno está generando ciertos incentivos como la Ley de promoción de la movilidad sustentable para desarrollar la cadena de litio y la fábrica de baterías; esto continua siendo insuficiente si los verdaderos costos siguen siendo altos.
Recordemos que el precio final de un auto 0Km está compuesto por una carga fiscal impositiva aproximadamente del 56% en impuestos.
Si analizamos el costo financiero de comprar un auto con un préstamo personal será entre 75% y 120%. Es por todas estas razones que ya no es solo suficiente medidas aisladas, sino políticas de fondo que permitan hacer crecer a este sector de una vez por todas.