La inflación acelera y el Gobierno no le encuentra la vuelta: ¿el dólar es la última bala de plata?
El equipo económico ya tomó nota del "nuevo" fenómeno en la dinámica inflacionaria: ya se había visto que los precios de los alimentos que no se encuentran bajo el radar de los controles oficiales venían subiendo con fuerza en los últimos meses.
Lo novedoso -ahora- es que empezaron a despegar aquellos precios de los productos que sí se mantienen bajo la órbita de "Precios Máximos".
La tendencia quedó a la luz en los relevamientos que hacen semanalmente las consultoras privadas. Y acaba de confirmarlo el Indec.
Los números son indesmentibles: de acuerdo al Indec, las siguientes fueron algunas de las subas de precios de alimentos que se encuentran bajo el paraguas de "Precios Máximos".
- Leche en sachet: 12,0%
- Aceite de girasol: 5,3%
- Galletitas de agua: 4,6%
- Pan de mesa: 4,1%
- Arroz: 3,4%
¿Qué es lo que sucede? ¿Las empresas no cumplen con el programa de Precios Máximos? Hay dos cuestiones que detectaron los especialistas, y que forma parte del diagnóstico de los funcionarios:
1. Los aumentos, aun de los productos incluidos en los controles, se dan mayoritariamente en los autoservicios y comercios minoristas de barrio. No así en los supermercados, que se encuentran siempre bajo la lupa. En las grandes cadenas se notan faltantes de productos; pero no aumentos que no están autorizados por Comercio Interior.
2. La otra cuestión refiere al comportamiento de las empresas. Artilugios para eludir los controles de precios. Verdaderos engaños ocultos en el packaging de los productos. Aparecen rótulos distintos (aunque el producto dentro del envase sea el mismo, incluso con el mismo gramaje), que les permiten a las empresas burlar el congelamiento.
Conclusión: cuando los inspectores del Indec pasan por los supermercados y por los autoservicios miden esas variaciones, que luego quedan a la vista en los informes oficiales.
A este "nuevo" fenómeno se le suma otro que ya viene quitándole el sueño a los funcionarios -y a los consumidores- desde hace ya varios meses: el constante aumento de los precios de los productos frescos: carnes, frutas y verduras, que están por fuera de las regulaciones.
Los incrementos detectados por el Indec durante marzo fueron, otra vez, muy fuertes:
- Lácteos: del 8% al 15,8%
- Carnes: 5,5% al 8,9%
- Verduras: 6,3%
- Filet de merluza: 6,0%
- Pollo: 3,9%
El precio de la carne se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para los consumidores. Y para el Gobierno, que no logra atemperar los constantes incrementos; ni siquiera con las últimas medidas oficiales, que prometían al menos enfriar el escenario.
Desde octubre, el precio del kilo vivo acumula un alza del 65%, que se trasladó en gran parte a las góndolas de los supermercados y a las carnicerías de barrio.
Un informe de la consultora Melconian & Santángelo es revelador de la dinámica de los precios de los alimentos que están excluidos de las regulaciones.
Ese grupo de alimentos registró una suba promedio del 4,9% en marzo, y acumula un incremento del 72,6% en los últimos 12 meses. Nada menos que 30 puntos por encima de la inflación promedio para el período marzo 2020-marzo 2021.
El ranking de mayores aumentos de los últimos 12 meses lo encabeza el rubro "frutas", con un alza de 90,4%.
Por detrás viene el rubro "carne", con un incremento promedio del 71,4%. Y apenas después, en tercer lugar, las "verduras", con el 67,4%.
Ese informe de Melconian & Santangelo revela que el grupo de alimentos con "Precios Máximos" se incrementó 4,3% durante marzo, marcando una aceleración respecto de los meses precedentes.
En los últimos 12 meses, los precios de esos alimentos bajo el programa oficial aumentaron 32% (10 puntos menos que la inflación promedio y 40 puntos por debajo de los precios "libres").
Aun así, ese 4,3% de incremento de marzo da cuenta de que los alimentos se van liberando de "Precios Máximos". Un dato clave a tomar en cuenta: desde que arrancó ese programa oficial, en marzo del año pasado, hace ya 13 meses, el Gobierno sólo habilitó alzas del 11%. No del 32% como fue el incremento real en las góndolas.
Otras consultoras que miden la evolución de los precios en las góndolas también ratificaron la aceleración inflacionaria en lo que va de abril.
En la segunda semana, la consultora LCG -fundada por Martín Lousteau- midió un alza promedio en alimentos del 1,1%. Apenas dos décimas menos que en la semana previa. Para las últimas cuatro semanas, LCG midió una inflación en ese rubro del 4,6%.
A su vez, la consultora Eco Go -dirigida por la economista Marina Dal Poggetto- verificó una inflación del 0,5% en la segunda semana, tras una suba del 2,1% en la primera. ¿Desaceleración? Tomando en cuenta las segundas semanas de los últimos meses se observa que en la segunda de marzo también fue del 0,5%, y ese mes terminó con una marca del 4,8%.
El control del dólar, ¿la bala de plata?
Para este mes, Eco Go proyecta una inflación de entre 3,5% y 4%. En principio, lejos de la aspiración de Martín Guzmán, de tener un índice que no avance mucho más que el 2% a 2,5% mensual.
"La inflación de marzo va a ser la más alta del año pero esperamos una reducción a partir de abril", prometió el ministro desde Europa, horas antes de que el Indec difundiera el 4,8% correspondiente a marzo. "Hay circunstancias coyunturales que han estado afectando a los precios, incluyendo la inflación en alimentos, que es un problema en el mundo y en particular, en esta pandemia", se explayó vía zoom.
En las últimas dos semanas se tomaron varias medidas de control sobre los principales fabricantes de alimentos básicos. Ayer mismo se anunció una batería de medidas -sobre todo enfocadas en el rubro carne-, con el objetivo de enfriar el proceso inflacionario.
Algunas de esas iniciativas -como el troceo de cortes- recién están pensadas para el mediano plazo. Otras, como la vigencia de Precios Cuidados para ocho cortes populares, se mantienen como una opción -limitada- para acercar la carne a los sectores más populares de la población.
¿Logrará Guzmán bajar el envión de la dinámica inflacionaria? Lo más contundente de las últimas decisiones refieren al ancla cambiaria.
El principal ancla es la estabilidad del tipo de cambio. Los últimos números resultan elocuentes:
- En diciembre de 2020, con una inflación del 4%, la cotización del dólar subió 3,5%.
- En enero, con una inflación del 4%, el dólar se elevó 3,75%.
- En febrero, los precios subieron 3,6% pero el dólar lo hizo un 2,9%.
- El mes pasado, contra una inflación del 4,8%, la cotización del dólar subió apenas el 2,4% Exactamente la mitad.
- En lo que va de este mes, transcurrida una quincena, la cotización del dólar mayorista se elevó tan sólo 0,8%.