Esta localidad bonaerense se convirtió en el nuevo imán para los negocios inmobiliarios
Con una ocupación que se sostuvo toda la temporada por encima del 90%, Pinamar y sus empresarios no ocultan un cierto dejo de esperanza para encarar este año, incluso cuando la decisión del gobierno porteño de iniciar las clases el 17 de febrero truncaron ese mes a la mitad.
Al analizar la temporada, Gerardo Gioiello, socio Gerente de GYG Brokers, señala que el resultado de la temporada fue bueno.
"Creo que en pandemia fue mayor la calidad de las operaciones que la cantidad, y durante el verano esta tendencia se mantuvo, aunque subieron las consultas con respecto a otros años", dijo.
A esto se suma que la movida de migrar a destinos que permitan estar más en contacto con la naturaleza la posicionó como un nuevo polo del Real Estate. Así lo estima Jorge Kacef, gerente de Pinamar SA: "podemos decir que en 20/21 se registró un aumento de la actividad inmobiliaria, registrándose muchas transacciones de venta de lotes. También aumentó la cantidad de construcciones y el interés por la venta de desarrollos en pozo".
¿A qué se debe esto? "Factores como el valor de los terrenos o el costo de construcción parecen haber generado algunas oportunidades para quienes eligieron invertir en Pinamar", explica Kacef.
El empresario agrega que "se trató de un verano atípico, lleno de interrogantes y expectativas. Al buen nivel de ocupación que hubo producto de la situación especial, en la que muchos argentinos también redescubrieron nuestra ciudad balnearia, se sumó la gente que migró hacia nuestra ciudad y que generó un movimiento distinto. Esto se reflejó, sobre todo, en las ventas de lotes, casas y departamentos y empezará a notarse ahora también en los alquileres de largo plazo".
Fernando Marzullo, titular de Constructora del Mar, se muestra optimista al ver "mucho interés de pequeños inversores que quieren empezar a posicionarse en Pinamar, ya sea solo como una modalidad de ahorro o con la idea de tener una segunda vivienda cercana a la playa. Los lugares más solicitados hoy, son los desarrollos en curso que la empresa tiene en la zona de Pinamar Norte".
Financiación
Contrario a lo que viene sucediendo en las grandes ciudades, sobre todo en Buenos Aires donde los precios de las propiedades para la venta siguen cayendo, en esta localidad costera se mantienen e incluso se recuperan.
"Los precios no sufrieron cambios y se mantuvieron. Esto se da gracias a que hay muchos productos atractivos con buena financiación, y cuando es así no se negocia", dice Gioiello.
Kacef, por su lado, cree que "a partir de julio de 2020 aumentó mucho la liquidez, los precios se recuperaron y están en sus máximos históricos. No hay un solo precio, los distintos segmentos se comportan diferente, los que manejamos están prácticamente todos en sus máximos históricos, muchos, sobre todo los productos más escasos, creciendo fuertemente".
Hoy es posible conseguir lotes unifamiliares de entre 50 y 100 mil dólares en muy buenas zonas.
Para el gerente de Pinamar SA, "las búsquedas que más se destacan son los lotes unifamiliares. Esta oportunidad también se traslada a los lotes multifamiliares y comerciales, para construir edificios y galerías comerciales tanto en el centro, en la zona conocida como Náyades que se está consolidando, como en la zona de Pinamar Norte que es hacia donde crece la ciudad".
En la zona norte de esta ciudad está Costa Esmeralda, donde ya se pueden conseguir lotes unifamiliares y el costo de construcción ronda los 700 dólares, casi la mitad que un año atrás.
"Actualmente demandan viviendas aquí son familias que buscan un lugar cercano para vacacionar en cualquier época del año y que, además, les brinde tranquilidad cuando están en la propiedad o cuando dejan la misma para ir a la playa o regresar a la ciudad. Además, los alquileres están 2.500 y 3.000 dólares la quincena", concluye Damián Ristuccia, socio gerente de DAHEDA,