Prepará el bolsillo para el incremento de la luz: 5 electrodomésticos que consumen más energía
Con vistas a marzo, el Gobierno está dando los pasos en dirección hacia el descongelamiento de las tarifas de electricidad e implementará una "adecuación transitoria" hasta alcanzar un acuerdo definitivo de valores con las principales distribuidoras.
La hoja de ruta de incrementos que impulsa el oficialismo contempla subas contundentes justamente para mediados del tercer mes del año.
Aunque el Gobierno se ha mostrado renuente a la hora de indicar de cuánto será el aumento, en el ámbito energético hay coincidencias en que las subas que se vienen rondarán el 35 por ciento. No faltan quienes mencionan a ese porcentaje como un piso.
En noviembre del año pasado, el secretario de Energía, Darío Martínez, confirmó que las subas de la luz y el gas se aplicarían entre marzo y abril de 2021. Pero aclaró que sería con un esquema diferenciado según los ingresos de cada usuario.
En este contexto, los electrodomésticos suponen prácticamente la mitad de la energía que se utiliza en el hogar: nada menos que 44% de la factura de la luz se va en su uso.
Tal y como señalan los últimos datos de la startup Gana Energía, la heladera se sitúa como el electrodoméstico que más energía consume debido a que requiere de 24 horas de electricidad; pero también hay otros que elevan la factura considerablemente.
Estos son los cinco electrodomésticos que más consumen energía en el hogar:
1. Heladera
Del consumo total de los electrodomésticos, representa aproximadamente 18%, no porque consuma en exceso ─algo más de 1.000 kWh entre la heladera y el freezer─, sino precisamente porque no se puede apagar.
En este sentido, es el electrodoméstico en el que, sin duda, merece la pena gastar un poco más para conseguir eficiencia: que disponga de potencia regulable es importante, pero más aún que sea de bajo consumo, normalmente algo más caros.
2. Lavarropas
Aunque lavar la ropa fuera de casa se haya puesto de moda en los últimos tiempos, el lavarropas sigue siendo un elemento central de cualquier hogar.
Su gran consumo, de entre 1,200 y 1,500 kWh en la mayoría de los casos, convierte a la lavadora en uno de los electrodomésticos que más consumen en la casa. Por suerte, y a diferencia del refrigerador, no necesita estar encendida las 24 horas del día.
En total, el consumo medio de la lavadora representa en torno a 12% de todos los electrodomésticos. Un porcentaje que siempre puede ser menor si se utiliza adecuadamente: lavar en frío, esperar a que esté completamente llena o escoger un programa que se adapte a las necesidades concretas.
3. El secarropas
Es otro de los electrodomésticos que empiezan a tener presencia en los hogares. En términos absolutos, es el que más consume.
En aquellos hogares en los que se utiliza, el secarropas supone un gasto de entre 4.000 y 5.000 kw/h, lo que supone aproximadamente cuatro veces más que una heladera o un lavarropas.
No obstante, su baja presencia, así como su uso esporádico hacen que, en global, consuma menos que, por ejemplo, la heladera.
4. El televisor
Si hay un electrodoméstico que representa el epicentro de cualquier hogar contemporáneo, ese es el televisor. Es cierto que en la actualidad el consumo es más bajo que cuando había que poner en marcha el tubo de rayos catódicos, pero también lo es que, pasamos cuatro horas al día frente a la pantalla.
En términos absolutos, el televisor es de los electrodomésticos que menos energía consumen: tan sólo 100 kWh. Sin embargo, su prolongado uso ─de en torno a 21 horas semanales─ hace que suponga un gasto equiparable al de la vitrocerámica en ese periodo.
Uno de los errores más comunes es el de pensar que un televisor no consume cuando está en modo stand by, por lo que una buena opción para reducir el gasto ─de en torno al 12% del total de los electrodomésticos─ es apagarlo del todo. O, directamente, evitar la tentación siendo el rarito que vive sin televisor en casa.
5. El horno eléctrico
A pesar de la amenaza del microondas desde que irrumpiera en los hogares durante los años 80, hoy en día el horno sigue siendo un elemento imprescindible en la cocina.
Tanto es así que representa en torno al 9% del consumo total. Con un consumo media de entre 800 y 900 kWh, su uso se ha ido reduciendo cada vez más, en parte precisamente porque con el microondas se pueden calentar productos más rápidamente, aunque normalmente con una menor calidad.
Uno de los trucos que más se usan para ahorrar con el horno es aprovechar el calor que acumula para los últimos minutos de cocción de un plato, apagando el aparato completamente aunque aún le falten cinco minutos.