Biden recaudó u$s145 millones en "dinero oscuro" de donantes anónimos
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, recibió una suma récord de u$s145 millones en calidad de "dinero oscuro", un tipo de recaudación de fondos que proviene de donantes anónimos y que los propios demócratas criticaron durante años, señala Bloomberg.
Esa cantidad casi quintuplica los u$s28,4 millones de "dinero oscuro" recaudados en nombre de su rival, el expresidente Donald Trump, y supera el récord de u$s113 millones en donaciones anónimas registrado en 2012 por el candidato presidencial republicano Mitt Romney.
Biden recaudó u$s145 millones en "dinero oscuro"
En general, los 1.500 millones que recaudó Biden para su campaña representan en sí mismos un récord para un candidato que se enfrenta en las urnas a un presidente en ejercicio.
Los demócratas están a la vanguardia de un movimiento que aboga por prohibir el dinero oscuro en política, pues consideran que los partidarios pueden así "respaldar silenciosamente" a un candidato sin someterse al escrutinio público.
"El público nunca tendrá una explicación completa de quién lo ayudó a ganar la Casa Blanca", enfatiza la agencia de noticias, que explica que los donantes anónimos "tendrán el mismo acceso a quienes toman decisiones que aquellos cuyos nombres fueron revelados, pero sin conciencia pública de quiénes son o qué influencia podrían ejercer".
"El objetivo del dinero oscuro es evitar la divulgación pública mientras se obtiene crédito privado", señala Meredith McGehee, directora ejecutiva del grupo Issue One para la defensa de la reforma de la financiación de campañas.
Biden y el botón de la Coca Cola de Trump
Pasaron apenas unos días desde que Donald Trump dejó su mandato y salió de la Casa Blanca. Pero la llegada de su ahora inquilino, Joe Biden, el nuevo presidente de Estados Unidos, vino acompañada de grandes cambios.
Con el objetivo de dejar atrás la polémica etapa de Trump en el poder, Biden mantuvo parte del decorado del despacho oval pero eliminó un elemento particular que había pasado desapercibido durante todos estos años. Donald Trump tenía en su escritorio -el mítico Resolute, utilizado por los presidentes de Estados Unidos desde 1880 y en el que se tomaron miles de decisiones que tuvieron repercusiones a nivel mundial -, un botón de emergencia por donde el actual ex presidente llamaba a su mayordomo para pedirle que le sirviera Coca-Cola.
El empresario, director ejecutivo, inversor en bienes raíces, con una personalidad televisiva y político estadounidense que ejerció como el 45.º presidente de la nación, paso 4 años en el despacho oval dando pruebas más que suficientes que nos permiten decir que el suyo fue un mandato más bien extravagante. Además, según a quién le preguntes, muchas personas consideraban que su tiempo en el poder había sido incluso terrorífico.
Fue una periodista del New York Times quien se dio cuenta del extraño botón rojo en el escritorio del mandatario, y quien hizo correr la voz sobre semejante hallazgo. Pero el detalle podría haber pasado desapercibido si no era por el ojo afilado de otro periodista, Tom Newton Duun, que llamó la atención sobre el dispositivo a través de Twitter en una publicación que ya es viral.
President Biden has removed the Diet Coke button. When @ShippersUnbound and I interviewed Donald Trump in 2019, we became fascinated by what the little red button did. Eventually Trump pressed it, and a butler swiftly brought in a Diet Coke on a silver platter. It's gone now. pic.twitter.com/rFzhPaHYjk — Tom Newton Dunn (@tnewtondunn) January 21, 2021
Más allá de que Joe Biden haya eliminado el polémico botón, eso no significa que no le gustan las gaseosas de la línea Coca-Cola. No al nivel de Trump, del que corría el rumor que era capaz de beber hasta 12 latas de Coca-Cola al día, pero sí para tomarse uno de vez en cuando, en versión Zero.
En cuanto a los asuntos políticos realmente duros, en sus primeras horas como presidente de Estados Unidos, Joe Biden apuntará al corazón del legado político de Donald Trump, con la firma de varios decretos para revertir los de su antecesor en materia de inmigración, clima y gestión del coronavirus.
Qué pasará con el coronavirus en la era Biden
Un hito en esta vuelta de página es que el inmunólogo Anthony Fauci va a intervenir en nombre de Estados Unidos en una reunión del Consejo Ejecutivo de la OMS el jueves, dijo Jeff Zients, encargado de la respuesta a la pandemia del nuevo Gobierno.
Para limitar la propagación de un virus que ya dejó más de 400.000 muertos en el país más afectado por la pandemia, Biden firmará un decreto para que sea obligatorio el uso de mascarillas en los edificios federales y para los empleados del gobierno central.
Para paliar los efectos de la crisis inducida por la pandemia, Biden prevé una moratoria contra los desalojos y un congelamiento de los préstamos estudiantiles federales, agregó Zients en declaraciones a periodistas, informó la agencia de noticias AFP.
Para el demócrata, la lucha contra el calentamiento climático es otra prioridad de su mandato.
Recién llegado a su despacho, va a enviar un correo a la ONU para que Estados Unidos pueda volver en un mes al Acuerdo de París contra el calentamiento global, dijo, por su parte, Gina McCarthy, responsable de este asunto en el nuevo gabinete.
Biden también quiere revertir una serie de medidas de desregulación ambiental tomadas por el gobierno republicano. Entre ellas va a revocar la autorización para el controvertido oleoducto de Keystone XL, que une Estados Unidos y Canadá.
Medidas sobre política inmigratoria
En materia de política migratoria, el demócrata busca nadar en contra de la ola de decretos que conformaron la doctrina de Trump, que buscó que la lucha contra la inmigración irregular fuera un sello de su gobierno.
Biden anunció que va a anular un decreto migratorio muy controvertido que prohíbe la entrada en Estados Unidos de ciudadanos de países mayoritariamente musulmanes.
Además va a suspender los trabajos de construcción del muro antiinmigrantes en la frontera con México, financiado con presupuesto del Pentágono, lo que generó agrias pugnas que agitaron la presidencia de Trump.
En el ámbito legislativo, Biden planea presentar un proyecto al Congreso.
Uno de los principales puntos es que va a dar a cerca de 700.000 jóvenes llegados como indocumentados en la infancia acompañando a sus padres, el colectivo conocido como los "soñadores", una vía para su naturalización.
Los migrantes beneficiados por el Estatuto de Protección Temporal (TPS) -una protección que Trump intentó derribar, al igual que la que beneficiaba a los "soñadores"- también están incluidos en un plan de varias etapas que puede culminar con su nacionalización.
El proyecto también incluye fondos adicionales para aumentar la vigilancia y los controles fronterizos y un plan de asistencia para El Salvador, Guatemala y Honduras, el país de origen de la mayoría de esos migrantes.
Esa iniciativa irá a debate en un Congreso que estará dominado por los demócratas en ambas Cámaras.