Alerta jubilados: ven "fallas" en la fórmula y piden cambios para evitar recorte en los haberes
La inminente aprobación de la nueva fórmula de movilidad jubilatoria encendió el alerta entre la oposición e incluso en sectores del oficialismo, donde encontraron "fallas" en el proyecto del Gobierno que podrían provocar un recorte en los haberes de más de 18 millones de jubilados, pensionados y titulares de prestaciones sociales.
Las dudas en torno a la iniciativa oficial con media sanción del Senado surgieron este lunes durante la sesión de las comisiones de Previsión y Seguridad social y Presupuesto y Hacienda en la Cámara de Diputados, donde expusieron el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, y la directora ejecutiva de ANSES, Fernanda Raverta.
Durante la reunión, el Gobierno ratificó su intención de sancionar el martes de la semana próxima el cálculo de las jubilaciones, ajustadas en iguales mitades por salarios (RIPTE) y recaudación con un tope en función de los recursos tributarios. "La fórmula se vincula a que la economía crezca, lo que se va a notar en recaudación y los salarios", aseguró Moroni.
Por otra parte, Raverta destacó que este año los jubilados recibieron una suba anual del 35,3% por los ajustes otorgados por decreto y afirmó que la nueva movilidad servirá para "otorgar, certeza y previsibilidad". Mientras el secretario general de ANSES, Santiago Fraschina, destacó que se "va hacia la sustentabilidad".
En ese marco, varios diputados plantearon sus reparos sobre tres puntos del proyecto, relacionados con el eventual impacto negativo de la inflación, el período que servirá de base de cálculo para estimar el aumento de los haberes y el porcentaje que percibirán las jubilaciones en marzo, el primero de los cuatro incrementos previstos en 2021.
1) Cláusula antinflacionaria
A diferencia de la movilidad suspendida en diciembre de 2019, el esquema en debate no tendrá en cuenta la variación de la inflación. Por ello, la oposición solicitó la incorporación de una garantía o cláusula de actualización en función de los precios, una variante que en su momento contempló uno de los proyectos oficiales que dio a conocer iProfesional y que finalmente fue abandonado.
"¿Qué garantía han pensado o dispositivo en el proyecto para que las jubilaciones no pierdan si la inflación no es como la que anticipan?", preguntó el diputado Alejando Cacace (UCR), vicepresidente de la comisión de previsión y seguridad social. Mientras Nicolás del Caño (Frente de Izquierda) propuso un mecanismo para "cuidar los haberes" con "una cláusula deactualización automática" cuando los haberes queden por debajo del Índice de Precios.
El diputado Luis Pastori (UCR), en tanto, propuso modificar el artículo 1 del proyecto, que establee que el índice no podrá producir la "disminución del haber". "Si realmente se pretende mejorar poder adquisitivo, con solo agregar la palabra "disminución real" del haber sería una garantia que no va a haber disminucion frente a IPC", sostuvo.
Lo novedoso fue la intervención de la diputada Gisela Marziotta (Frente de Todos), quien también propuso un mecanismo para equiparar las jubilaciones con los precios: "¿No hay posibilidad que en caso de desfasaje incorporar una variable en este proyecto, no dentro de la formula sino en una situación extraordinaria que estaría perjudicando a jubilados, una compensación por inflación?".
Pero Moroni descartó esa posibilidad al señalar que lo que se busca es "desindexar la economía para que la economía crezca".
2) ¿Se comieron un trimestre?
El otro punto que generó polémica es la base de cálculo de la movilidad. De acuerdo con el proyecto, el índice se ajustarán con un rezago de hasta seis meses, ya que se tomarán los salarios y la recaudación del cuarto trimestre de 2020. Pero la oposición y algunos especialistas advierten que se estaría dejando afuera entre tres y seis meses.
"Siempre cuando la fórmula va a recomponer las jubilaciones, encuentran una mejor después de haber perdido los haberes casi 20 puntos", dijo Del Caño. "La suspensión de la movilidad macrista implicó un recorte de $100.000 millones", sostuvo, y agregó: "No se va a computar el tercer trimestre, es una confiscación como ocurrió con el empalme del gobierno de Macri".
Para la oposición, la suba por decreto otorgada en marzo de 2020 corresponde al tercer trimestre de 2019; la de junio, al cuatro trimestre de 2019; la de septiembre, al primer trimestre de 2020; y la de diciembre pasado, al segundo trimestre de este año. Siguiendo ese razonamiento, el aumento de marzo próximo debería corresponder al tercer trimestre y no al cuarto de 2020.
Algunos especialistas, en cambio, creen que el nuevo empalme tendrá efectos aún más perjudiciales sobre las jubilaciones, ya que las subas de este año en rigor no respondieron a ningún cálculo de movilidad sino que fueron aumentos discrecionales. En ese sentido, lo que habría que compensar -aseguran- es el segundo semestre completo del 2019.
Para el Gobierno, por el contrario, el acople de la nueva fórmula con los ajustes otorgados por decreto en 2020 no se salteará ningún período a la hora de realizar el cálculo de actualización. "No se está comiendo ningun trimestre, se garantiza que todos los trimestres tengan sus aumentos", aseguró Fraschina, sin dar más precisiones.
3) ¿De cuánto será el aumento en marzo?
Por último, también hay cuestionamientos a la falta de previsibilidad con respecto a los próximos aumentos. Según un cálculo presentado por Raverta en el Senado, la fórmula semestral previa daría un aumento del 11,9% en marzo. Después, el oficialismo lo modificó en Diputados para que el incremento de diciembre fuera "a cuenta" de marzo, pero finalmente dio marcha atrás y optó por subas trimestrales.
Para Cacace, la iniciativa en debate ahora en el Congreso implicará un aumento del 6,1% tomando las mismas variables utilizadas por Raverta, pero aplicadas al último trimestre de 2020. "Con el pago de diciembre que se dio marcha atrás se calculaba un 11,9% de aumento en marzo, ¿cuánto es lo que estiman ahora?", preguntó el diputado. Y desde la ANSES respondieron que solo tienen los datos disponibles de octubre de 2020 -un solo mes del último trimestre-, por lo que no pueden pronosticar la suba de marzo.
La falta de datos sobre la fórmula, por otra parte, fue otro blanco de críticas. "En la anterior suspendida, cualquiera podía calcular un 70% por inflación y un 30% por salarios", dijo Pastori. "Esta fórmula el único que puede hacerlo el Gobierno, es tan oscura y tan difícil para alguien que no tenga los datos oficiales que es un grave problema la falta de transparencia", advirtió el legislador.