Uno de los líderes de la CGT se desmarcó y acordó el pago del aguinaldo en cuotas en su actividad

Uno de los líderes de la CGT fue el primero en acordar el pago del aguinaldo en cuotas. Se trata de Carlos Acuña, el cotitular de la central obrera y el secretario general del sindicato de obreros y empleados de estaciones de servicio (SOESGyPE). Al menos así lo aseguran las cámaras del sector, que dieron a conocer un convenio con el sindicalista para abonar el sueldo anual complementario (SAC) de junio en julio y agosto.

"Llegamos a un acuerdo con el sindicato para pagar la mitad del aguinaldo en julio y la otra en agosto, todos los que quieran pueden sumarse", confirmó a iProfesional el titular de la Federación de Expendedores de Combustibles (FEC), Julio Alonso. Desde el gremio, en tanto, no desmintieron la versión difundida por las entidades privadas de la actividad.

El entendimiento fue acordado de palabra el viernes pasado por zoom y todavía no fue firmado ni enviado al Ministerio de Trabajo. El titular de la cartera, Claudio Moroni, había dicho semanas atrás que no pensaban desdoblar el SAC en el sector privado, pero dijo que "hay que ver" en caso de que las empresas lleguen a un acuerdo con los sindicatos. El gran interrogante es si las autoridades los homologarán.

El cotitular de la CGT, Carlos Acuña (izquierda), avaló el pago del aguinaldo en cuotas. Su par, Héctor Daer (derecha), en cambio, lo rechazó.

Con esa decisión, Acuña se convirtió en el primer sindicalista en avalar el diferimiento del aguinaldo. Incluso, a contramano de sus pares de la CGT. El otro cotitular de la central obrera, Héctor Daer, rechazó semanas atrás esa modalidad de pago que el Gobierno aplicará sobre más de 200.000 empleados estatales con sueldos brutos superiores a $80.000. También se pronunció en contra el titular del gremio de la construcción (Uocra), Gerardo Martínez, y el de los estatales (UPCN), Andrés Rodríguez.

En tanto, la Federación de Expendedores de Combustible de la República Argentina (FECRA) aseguró haber llegado a un acercamiento informal con el dirigente de Azopardo. "Oficial no hay nada, pero aparentemente el sindicato nos manifestó que cada uno puede arreglar el pago en dos o tres cuotas con sus empleados", dijeron a este medio fuentes de la entidad. Desde las cámaras destacaron la actitud conciliadora del sindicato. "El gremio es muy cumplidor", coincidieron.

A principios de junio, Acuña prorrogó por otros 60 días el acuerdo de suspensiones con el pagó del 100% del salario neto. "Es la única posibilidad ante el mantenimiento del aislamiento social, preventivo y obligatorio y la merma en la actividad para preservar los salarios y, en especial, los puestos de trabajo", dijo en referencia al convenio alcanzado con la Mesa de Expendedores Unidos, integrada por FECRA, CECHA, AES, CEGNC y AOYPF.

Luego de recibir en abril y mayo los beneicios del programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP) para enfrentar el pago del 50% de los salarios, los empresarios de la actividad solicitaron al Gobierno su extensión para afrontar los sueldos de junio y julio y el medio aguinaldo. Pero las autoridades iniciaron la semana pasada la reducción de los subsidios y anunció que no se hará cargo del SAC en el sector privado.

El ministro de Trabajo, Claudio Moroni, se mostró abierto a evaluar acuerdos entre empresas y gremios para fraccionar el aguinaldo.

Por estas horas, las cámaras empresarias de comercio y el rubro gastrómico mantienen negociaciones con los gremios de su actividad, encabezados por Armando Cavalieri y Luis Barrionuevo, respectivamente. La UIA, por otra parte, le pidió al Gobierno un decreto o resolución que los habilite a fraccionar el aguinaldo y evitar así eventuales multas y juicios de sus empleados, tal como adelantó este lunes iProfesional.

En efecto, la Ley de Contrato de Trabajo establece que el aguinaldo se paga en dos tramos (junio y diciembre) y que representa el 50% del mejor sueldo del semestre previo. Mientras que la Ley Pyme permite escolonar el pago en tres períodos en un año, pero solo en los convenios que contemplan esa posibilidad para las pymes. Sin una normativa que lo autorice, las empresas comenzaron a explorar acuerdos informales.