¿Lo peor ya pasó?: esto señala un informe oficial sobre el avance de la producción
"La reactivación económica comenzó". Contundente, el mensaje del Gobierno quedó estampada en un informe oficial.
"Mayo se caracterizó por la puesta en marcha de buena parte del aparato productivo. En todo el país, salvo en el AMBA, la industria manufacturera está plenamente habilitada para producir". "A principios de junio 15 provincias ya tienen más del 80% del empleo privado habilitado para trabajar", sostienen desde el Ministerio.
En simultáneo concluyó: "Las secuelas de la pandemia se sienten", lo que dio pie a un balance -parcial- de los enormes desequilibrios que está dejando la pandemia en la Argentina, que ya lleva 86 días de cuarentena.
El informe fue publicado por el Ministerio de Desarrollo Productivo, que conduce Matías Kulfas.
Entre los datos que alarman sobre el devenir de la crisis pandémica sobresale que "entre febrero y abril, alrededor de 15.000 empresas dejaron de presentar declaraciones juradas de seguridad social ante AFIP (el 2,8% del total)". "Si bien es prematuro catalogar esto como cierres definitivos, es un dato que ilustra el daño que ha generado el COVID-19", concluye el reporte oficial.
En uno de los capítulos del informe se hace un relevamiento sobre la asistencia estatal a las compañías y a los empleados.
Sobre la asignación de ATP (salarios complementarios), el relevamiento da cuenta de que se aprobó el pago de 2,04 millones de salarios de mayo (la mayoría ya se pagó la semana pasada) pertenecientes a 242.000 compañías. El costo fiscal de ese beneficio ascendió a $42.000 millones.
Otro de los capítulos de las asistencias refiere a los créditos a tasa cero para monotributistas y autónomos. "Hasta el momento, se aprobaron 479.000 créditos por un monto de $ 52.272 millones, de los cuales ya se otorgaron alrededor de 340.000", dice el informe.
En cuanto al IFE (Ingreso Familiar de Emergencia), el informe indica que en su primera ronda, alcanzó a 8,4 millones de personas (asalariados informales, cuentapropistas de bajos ingresos, desocupados e inactivos), y permitió llegar a hogares pobres no cubiertos por la AUH.
Semáforo de la producción
El informe destacó un "semáforo" a través del cual detalló los sectores que ya empezaron a recuperarse de los que todavía no lo hicieron. Como es esperable, la gran mayoría permanecen en "rojo".
1. Verde:
Medicamentos: De acuerdo a la consultora IQVIA, las ventas de medicamentos crecieron 1,2% interanual en abril, luego de dispararse 21,8% interanual en marzo.
Agroquímicos: creció 36,9% interanual en abril y acumuló una suba de 13,8% en el primer cuatrimestre. Influyó sobre este desempeño la mayor demanda por las buenas perspectivas para la campaña fina 2020/2021 y la base de comparación (en abril de 2020 hubo paradas de plantas).
2. Amarillo:
Alimentos: fue el sector industrial que menos cayó en abril (-1,0%) gracias a las subas en galletitas, pastas y panificados, yerba, vino, carnes y lácteos por el sostenimiento de la demanda ante la respuesta del Estado para asistir a las familias argentinas. Si el complejo alimentario cayó, ello se debió a la merma de la producción en golosinas (-35,5%) y en bebidas (-12,1%), que se tratan de productos que dependen mayormente de ventas en kioscos y, por ende, de la circulación en la calle.
3. Rojo:
Químicos: los incrementos en agroquímicos y medicamentos no lograron compensar las bajas más relacionadas a la demanda industrial -como química básica (-14,9%) y gases industriales (-31,8%)- o de la construcción –como pinturas (- 82,7%). La rama química cayó 11,1% en abril y 3,1% en el acumulado del año.
Madera, papel, edición e impresión: tuvo la segunda menor baja tras alimentos (-8,7% i.a. en el mes y -5,7% en el año). La caída moderada fue por el aumento de la producción de papel de uso doméstico, higiénico y sanitario.
Refinación de petróleo: cayó 34,4% en abril, arrastrada por la baja de 66,3% en la producción de naftas por la caída de la demanda asociada a la menor circulación de vehículos durante el aislamiento obligatorio.
Siderurgia: la baja de abril fue de 70,0% y de 23,9% en el cuatrimestre, debido a la falta de actividad de las industrias clientes ante el contexto de cuarentena. Algunas plantas producen insumos para los sectores esenciales (envases para alimentos y aerosoles, chapa para hospitales modulares, tubos para exportación, tubos para garrafas de oxígeno y alambre especial) aunque sin compensar el desempeño general.
Aluminio: acumuló una retracción de 17,3% en el primer cuatrimestre del año. En abril, la caída fue de 45,6% por la menor demanda de la construcción, el sector automotriz y el eléctrico; se mantuvo el del segmento farmacéutico.
Automotriz: con el inicio de la actividad en mayo, se fabricaron 4.802 vehículos, lo que significó volver a producir luego del freno total de abril, pero cayó 84,1% interanual. Acumula en lo que va del año una baja de 48,4%, según ADEFA.
Minerales no metálicos: la crisis sectorial se profundizó por el coronavirus y en abril el retroceso fue de 70,7%interanual, muy ligado al de la construcción (-75,6%). De acuerdo a datos anticipados, los despachos de cemento en mayo recortaron su caída 23 p.p. respecto a abril (-32,8% i.a. vs -55,2% i.a.) y el Grupo Construya también muestra una desaceleración (-34% i.a. vs -74,3% i.a.).
Maquinaria y equipo: la producción cayó 45,1% en abril y acumula un retroceso de 12,6% en 2020. Esto se debió a los aparatos de uso doméstico (-93,9%) cuya producción se vio afectada por la cuarentena, y la maquinaria de uso general (- 50,7%) por el menor dinamismo del sector automotriz y de la extracción, tratamiento y almacenaje de petróleo.
Molienda de oleaginosas: registró un retroceso de 6,6% en abril (-4,7% acumulado), que se explica por la menor producción de aceites y subproductos de girasol (-20,1%) y soja (-4,7%) ante la baja de la demanda externa.
Productos textiles: cayó 57,8% en abril con bajas en casi todos los segmentos por las restricciones productivas ante la pandemia. Se destacó el incremento de 37,7% i.a. de preparación de fibras de uso textil (derivada de la demanda para insumos médicos). De acuerdo a CAMMESA, el sector se fue reactivando en mayo.
Golosinas y bebidas: los peores resultados en este rubro los mostraron azúcar, productos de confitería y chocolate (- 35,5%) debido a la baja demanda por el cierre de escuelas y las bajas ventas de kioscos ante el contexto de pandemia; y bebidas (excl. vinos, -12,1%) por la menor demanda de formatos pequeños para bares y restaurantes.
Noches de alojamiento en hoteles: tras lograr en el primer bimestre la mejor temporada en 13 años, el sector hotelero se encuentra paralizado por el coronavirus. En marzo registró las peores bajas desde que haya registro.