Auxilio millonario del gobierno para que las empresas paguen los aguinaldos: qué sectores serán los más beneficiados
Además de tener que seguir asistiendo financieramente a la mayoría de los sectores industriales, comerciales y de servicios fuertemente golpeados por las medidas para combatir el coronavirus, el Gobierno analiza también mecanismos para que las empresas puedan pagar el medio aguinaldo de julio.
Si se toman los últimos datos sobre el denominado Salario Anual Complementario (SAC), de diciembre pasado, se trata de alrededor de $400.000 millones que se deberán repartir entre los 12,1 millones de empleados que conforman el sector público y privado, y que tienen, según datos del Ministerio de Trabajo, un sueldo promedio de bolsillo cercano a $40.000 por mes.
Estos fondos se suman a los casi $200.000 millones que, desde que comenzó la cuarentena obligatoria en marzo pasado, el Gobierno nacional ya distribuyó entre 10 millones de trabajadores registrados, informales, desempleados, monotributistas, jubilados, pensionados, empresas, beneficiarios de AUH, AUE y otros planes sociales.
Y se deberían repartir en medio de uno de los peores escenarios por los que atraviesa la industria local en toda su historia, con un derrumbe de su actividad del 25,6% interanual en abril, según el Índice de Producción Industrial (IPI) de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL).
De acuerdo con fuentes oficiales consultadas por iProfesional, el pago del medio aguinaldo de julio "es un tema que preocupa y que nos va a ocupar, al igual que el de los sueldos de mayo y de los meses siguientes mientras duren las restricciones para combatir la pandemia".
En este sentido, los funcionarios aseguran que el aguinaldo es un tema prioritario de análisis en la comisión oficial que comanda la Jefatura de Gabinete, que también incluye a los ministros de Trabajo; Desarrollo Productivo y Economía, y que fue creada por el presidente Alberto Fernández para analizar los diferentes mecanismos oficiales de asistencia al sector privado.
Se trata del Gabinete Económico que monitorea los diferentes programas de asistencia al trabajo como el programa ATP para el pago de la mitad del salario; las líneas de ayuda para pymes y empresas de todo tamaño; y, también, estudia formas para continuar con la ayuda estatal en la emergencia por la pandemia.
En el caso del medio aguinaldo, las posibilidades van desde que el Estado pague la totalidad del medio aguinaldo, pasando porque lo haga de manera parcial a que no tenga que destinar fondos.
También serán vitales las negociaciones que cada organización empresarial, industrial o de comercio lleven a cabo con los sindicatos, del estilo de las que se encararon para permitir el pago de hasta el 75% de los sueldos de los trabajadores suspendidos.
Cada variante, además, tendrá que ver con la situación particular de las empresas o comercios y también de cada sector. Por ejemplo, rubros considerados esenciales, que se encuentran operando normalmente y estarían en condiciones de hacerse cargo del pago total de esta ayuda laboral de mitad de año. Otros que, si bien mantienen sus actividades, lo hacen con niveles tan bajos que no alcanzan a cubrir todos sus gastos. Y luego están todas las empresas que siguen cerradas y sin ninguna clase de ingresos.
Sectores en problemas
En este sentido, el relevamiento de FIEL detectó casos de fuertes caídas en los niveles de actividad fundamentalmente vinculadas a la nula producción de automóviles y electrodomésticos, sumado a una muy baja demanda de acero y a la crisis en el sector de la construcción, que arrastró al consumo de cemento.
Hubo sectores como el automotriz que no fabricó ningún auto durante abril pasado y que recién retoma este mes sus actividades a una capacidad mínima. También empresas vinculadas a las áreas de minerales no metálicos; siderurgia; cigarrillos; papel y celulosa y metalmecánica que también sufren las consecuencias del coronavirus.
Por el contrario, las únicas dos industrias que crecieron en los primeros cuatro meses del año fueron las de alimentos y bebidas y la de insumos químicos y plásticos, con incrementos del 0,7% y del 4,7%, respectivamente.
En cuanto al tipo de bienes, las peores pérdidas se observaron en la producción de bienes de capital (-31,9%) y en la de bienes de consumo durables (-11,7%).
Respecto de las perspectivas a futuro, en FIEL prevén que, aún con la reapertura en locaciones específicas y con menos turnos y dotaciones de personal, la caída interanual de la producción resultaría profunda y por ahora no hay motivos para alimentar esperanzas de una recuperación a corto o mediano plazo.
A la luz de estas cifras está claro que la mayoría de las empresas buscará la asistencia parcial o total del Gobierno para cumplir con el pago del medio aguinaldo, en especial en el sector de las pymes o entre las relacionadas al comercio y a los servicios que hasta ahora no han podido trabajar o producir normalmente.
En los últimos días se conocieron opiniones y reclamos al respecto de parte de algunos referentes del comercio y los servicios como el caso de Mario Grinman, secretario general de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), quien ya anticipó que este sector no tiene ninguna posibilidad de pagar el medio aguinaldo de julio, "salvo que aparezca algún tipo de ayuda del Gobierno".
El comercio venía golpeado ya por la recesión de la economía antes de la aparición del coronavirus y los pocos locales que lograron abrir se encuentran con un nivel de ventas del 25% con respecto a los meses anteriores a la cuarentena que eran también bajos.
Por eso desde la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME), admiten estar preocupados por el pago del sueldo anual complementario de julio.
El presidente de esta entidad, Gerardo Díaz Beltrán, también reclamó la ayuda estatal para "lograr con una política de sostenimiento financiero a tasa cero para las pymes", teniendo en cuenta el gran endeudamiento que acumulan estas empresas con proveedores, AFIP, o por el pago de alquileres, expensas y bancos.
Reclamo de asistencia oficial
En tanto, Daniel Rosato, presidente de IPA, Industriales Pymes Argentinos, reconoció que ya vienen tomando contacto con las empresas que operan en diferentes actividades para analizar en qué situación se encuentran ante el pago del medio aguinaldo.
Según el dirigente industrial, hay empresas de sectores esenciales que producen alimentos o de servicios vinculados a la energía que se encuentran en situación de pagar el aguinaldo sin problemas. Otras también dentro de las esenciales pero que están con problemas como los fabricantes de snacks, los de limpieza o los de productos químicos y limpieza.
El resto se encuentra totalmente paralizado, recibiendo la ayuda del plan ATP para sueldos y que no pueden afrontar el aguinaldo como las pymes industriales de sectores como el de muebles; textiles; calzado; bienes de capital; petróleo y gas.
"Con este panorama, la minoría de las pymes podrá pagar, otros no lo podrán hacer sin ayuda oficial, y algunas lo abonarán en cuotas", asegura Rosato.
Desde el sector de las jugueterías anticipan un escenario similar, más que nada porque el medio aguinaldo se abona cada 30 de junio y coincide normalmente con la temporada alta para este sector por la cercanía con el Día del Niño.
Pero este año, las empresas anticipan que les será difícil pagarlo en tiempo y forma, ya que muchas fábricas recién están pudiendo abrir y las jugueterías minoristas siguen cerradas en gran parte del país, con la cadena de pagos totalmente cortada.
Al respecto, Emmanuel Poletto, presidente de la Cámara Argentina del Juguete, asegura que la situación de su sector es compleja, con una gran cantidad de fábricas cerradas y algunas solamente habilitadas para exportar.
"Muchas están atrasadas con los sueldos más allá de la asistencia del Estado y los están pagando en cuotas o con los descuentos pactados con los sindicatos, con lo cual veo muy difícil que se pueda cumplir con el aguinaldo en este contexto", destaca el empresario.
Advierte entonces que será necesaria la ayuda del Estado porque la voluntad de pago de las empresas existe pero se hace imposible cumplir por el actual momento complejo por el que atraviesan las empresas. "Tendremos que apelar a la ayuda estatal y a negociaciones con los sindicatos para intentar algún mecanismo que facilite el pago", agrega Poletto.
En el sector de salud describen un panorama parecido, a pesar de que se trata del momento de mayor actividad para la salud privada, prepagas, clínicas y sanatorios abocados al combate contra el Covid-19.
Fuentes de este rubro consultadas por iProfesional revelan graves problemas para pagar salarios a pesar de la ayuda oficial por lo cual admiten que deberán volver a recurrir a la asistencia oficial para cumplir con el aguinaldo.
Un reclamo que también parte de la industria textil si se tienen en cuenta las palabras de Jorge Sorabilla, vicepresidente de la Fundacion Pro Tejer para quien si se mantienen las restricciones de comercialización, y la demanda sigue en picada, se deberá prorrogar el ATP para junio además de la parte proporcional del SAC. "No hay chances de que se pueda hacer frente a dichos compromisos", anrticipa el empresario.
En este sector, el 80% de las empresas se encuentra financieramente comprometida, con la cadena pagos interrumpida y algunos pocos sectores que lograron reconvertirse para producir insumos sanitarios usados para combatir el virus.
"El 80% de las empresas tiene ingresos cero y un 20% que está zafando produciendo algún insumo sanitario pero que solamente trabaja al 15% de su capacidad", agregan empresarios textiles para quienes queda claro que no pueden cubrir los costos y que el Estado deberá mantener la ayuda no sólo para el aguinaldo sino para el pago los salarios de mayo y de los próximos meses.
También en el negocio inmobiliario hay preocupación por lo que vendrá. Así lo asegura Alejandro Ginevra, presidente de CAMESI, la cámara que nuclea a inmobiliarias y desarrolladores de real estate. "Con respecto al aguinaldo creemos que todavía falta para eso, pero que habrá que seguir el diálogo como en cada uno de los temas" asegura.
Agrega que desde CAMESI "sin dudas entendemos que el sector necesita el acompañamiento del Estado para atravesar esta situación, que las inmobiliarias precisan moratorias para hacer frente a las deudas en Nación, Provincia, CABA y Municipios y que la actividad quede exenta de Ingresos Brutos por un año y no pagar Sellos hasta que se recupere en parte el mercado".
Desde la industria aclaran que la mayoría de las empresas no ganan dinero actualmente sino que pierden en forma exponencial y aseguran que a los trabajadores no les alcanza el dinero.
"Nosotros lo sabemos, pero no podemos pagar lo que no tenemos y se nos acumulan deudas de salarios, de servicios, abonos, tasas que no se suspendieron, o impuestos que se difieren pero que habrá que pagar, o los aportes de las obras sociales, a las ART y las cuotas sindicales" detallan desde la UIA.