Home office: casi el 40% de los que emplean esta modalidad trabajan más horas que antes
En medio de la cuarentena obligatoria por la pandemia del coronavirus, y en vista a que se irá flexibilizando muy lentamente, el home office es un fenómeno que se está focalizando en los hogares de mayores ingresos y particularmente en la ciudad de Buenos Aires.
En este sentido, más de la mitad de los empleados y profesionales del segmento socioeconómico ABC1 pudo adaptar su trabajo al home office, mientras que en los hogares de la base de la pirámide (el nivel D1), el porcentaje cae al 26%, según una reciente encuesta de Quiddity.
También hay variaciones significativas entre Buenos Aires y el interior del país. Mientras que en la ciudad porteña el teletrabajo es una opción disponible para casi la mitad de los trabajadores (44%), para los que viven en el conurbano bonaerense es del 35% y solo del 29% para los habitantes del interior.
"Está claro que el impacto no es parejo en todo el país, quizás el dato más alarmante es que el 5% de los encuestados asegura haberse quedado desempleado a causa de la cuarentena y el porcentaje trepa al 10% en el interior", explicó a La Nación Verónica Rodríguez Celín, directora de Quiddity.Asimismo, un 37% de las personas que están haciendo home office asegura estar trabajando más horas que antes, contra un 27% que admite que su carga horaria se redujo.
En cuanto al apoyo de quienes de la población sobre la política oficial, llega al 81% de los encuestados.
Este respaldo incluye una percepción de que la crisis sirvió para reducir la grieta en la sociedad.
El informe también muestra que la cuarentena trajo cambios de hábitos y de comportamiento que llegaron para quedarse: una vez levantadas las medidas de aislamiento, el 45% aseguró que planea reducir las salidas a espacios cerrados, como cines, recitales, teatros o eventos deportivos y otro 35% planea bajar la cantidad de visitas a restaurantes y bares.