Guzmán se rodea de un asesor "reperfilador" del Banco Mundial y un coach político del PJ

El ministro de Economía, Martín Guzmán, avanzó en la conformación de su gabinete con la designación formal este viernes en el Boletín Oficial de los asesores Guillermo Hang y Pablo Javier Salinas, uno especializado en macroeconomía, proyectos de inversión y deuda, y otro en la formación de cuadros políticos. Los dos ya se encuentran trabajando junto al titular de la cartera en lo cotidiano, según confirmaron a iProfesional fuentes de la cartera.

Hang es un economista de la Universidad Nacional de la Plata (UNLP) con experiencia en organismos internacionales y miembro del Centro de Estudios Scalabrini Ortíz (CESO), un think tank kirchnerista dirigido por el economista Andrés Asiain. Su principal tarea es asesorar a Guzmán en temas económicos, entre ellos el de la deuda, en momentos que el ministro avanza en la refinanciación de la deuda en pesos (Lecap y Lecer) y la postergación de pagos de letras del Tesoro (Letes) en dólares.

Ya en septiembre, el asesor hizo un balance positivo del reperfilamiento acordado por Uruguay en 2003, con suspensión de pagos de capital pero sin interrupción de los intereses. "Cuando se observa en retrospectiva, la performance macroeconómica fue buena. Entre 2003 y 2018 la tasa de crecimiento de Uruguay fue del 4,2% promedio, mientras la Argentina fue 3,6%. La tasa de inflación uruguaya ha sido estable y de un dígito", señaló en una columna de El Economista. 

Pero también destacó la importancia de los precios de las materias primas a nivel internacional. "Estos resultados no implican que el acuerdo haya sido bien diseñado y que estuviera condenado al éxito. Posterior al reperfilamiento, los precios de los commodities agrícolas mostraron una tendencia creciente y sus principales socios crecían a tasas muy elevadas. Esto fue un impulso fundamental para el éxito uruguayo", precisó.  

En el caso de Argentina, explicó que las alternativas de nuevo financiamiento podían provenir del FMI, el mercado (en condiciones inciertas), China y/o el BCRA, cada una con sus "pro y contras". Y a continuación advirtió que el desembolso de los últimos u$s13.000 millones del acuerdo stand-by vigente "aseguraría la injerencia del FMI en las decisiones económicas argentinas por largo tiempo".

Escéptico de esa alternativa, señaló que "el reperfilamiento es una apuesta a destrabar rápido la situación financiera para movilizar el sector productivo", principalmente a través de Vaca Muerta y el agro. Pero también señaló que esa opción "depende en buena medida de los precios de exportación y, si resulta equivocada, el costo a pagar es obedecer al Fondo", sentenció Hang.

El economista es de los que apuestan a un rápido repunte de la economía que genere dólares mientras se renegocia la deuda. "La única solución consistente es que el país crezca y crezcan las exportaciones, cualquier otro arreglo de tipo financiero que impliquen patear los pagos o modificar las condiciones pero sin ninguna transofrmacion productiva es un poco humo, acá hay que asesurar que la economía empiece a moverse", dijo en una entrevista en reciente al programa Abrir el Juego por Radio Cooperativa.

El técnico participó la semana pasada de la presentación de la subasta para refinanciar el vencimiento de un cupón en pesos por $24.500 millones, junto al secretario de Finanzas, Diego Bastourre; y el subsecretario de Financiamiento, Ramiro Tosi. Fue luego de la decisión del Gobierno de postergar los pagos de las letras del Tesoro en dólares por u$s9.000 millones hasta agosto.

En su legajo figura que Hang fue consultor del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Naciones Unidas (ONU) y el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), vinculado al Banco Mundial. Desde allí asesoró al Ministerio del Interior entre julio de 2016 y diciembre de 2017 en el Plan Belgrano Agua, destinado a la construcción de infraestructura hídrica en el norte argentino.

El economista también fue asesor de la secretaría de Política Económica del Ministerio de Economía durante la gestión kirchnerista entre febrero de 2008 y marzo de 2016, y recibió una mención a la excelencia académica del Banco Central de Bolivia. Por otra parte, es socio fundador de la consultora EcoAr y fue investigador del instituto de finanzas Cefidar, financiado en su momento por el Banco Nación, Provincia y el Bice hasta que la gestión de Mauricio Macri lo cerró en enero de 2016.

Salinas, en tanto, es el secretario privado que lleva la agenda de Guzmán y es un politólogo que proviene del instituto Gestar creado en 2010 por el Consejo Nacional del PJ, encabezado por Néstor Kirchner; su actual titular, José Luis Gioja; y Diego Bossio. En ese espacio por donde transitó el propio Guzmán, el funcionario designado fue coordinador del área de formación política y estuvo a cargo de la capacitación de dirigentes, siguiendo el modelo de la Escuela Superior Peronista fundada por Juan Domingo Perón.