• 22/11/2024

¿Las restricciones de Alberto al dólar son más duras que en épocas de Cristina?: esto opina Diana Mondino

La economista de la Universidad del CEMA y ex directora regional de Standard & Poor´s analizó a iProfesional la polémica normativa aprobada en el Congreso
27/12/2019 - 01:02hs
¿Las restricciones de Alberto al dólar son más duras que en épocas de Cristina?: esto opina Diana Mondino

En el marco de la polémica sanción realizada días atrás de la Ley de Solidaridad Social, se abre el abanico de causas y consecuencias para la economía argentina.

Por su calificación académica para analizar este paquete de medidas, iProfesional entrevistó a Diana Mondino, economista de la Universidad del CEMA y ex directora regional para Latinoamérica de Standard & Poor´s.

Entre sus consideraciones, a nivel general opina que el paquete de medidas del Gobierno lleva a una mejor situación fiscal pero no a una mejora productiva.

-¿Cómo ve la economía en medio de tantas medidas?

-La economía dependerá muchísimo de lo que ocurra con este paquete económico, que en realidad es mucho más que eso porque incluye otros temas. Hoy está en un impasse, como en una nube, paralizada, porque nadie se anima a tomar decisiones porque hay un enorme nivel de incertidumbre. En la medida que se vaya conociendo qué pasa con esta normativa, habrá mucha gente que la considere positiva y mucha otra que no resulte para nada favorecida. Tengamos en cuenta que se declaran múltiples emergencias y esto le da la suma del poder público en esos temas, pero no en todos, al Poder Ejecutivo.

-¿Qué le genera más ruido?

-Los temas impositivos son de vital importancia, los costos para las Pymes no parece que se estén reduciendo porque hay aumentos de las cargas sociales. No hay nada que indique que las tasas de interés vayan a bajar pronto, entre otras indefiniciones.

-¿Cuál es su opinión respecto al impuesto del 30% sobre las compras en dólares?

-Me parece que son rémoras del pasado, medidas que nunca tuvieron efectividad, no veo por qué la tendrían ahora. De hecho, son bastantes más exigentes de lo que era el cepo cambiario durante el kirchnerismo, entonces generan una restricción muy grande en la economía, desmoralizan. Sobre todo no consideran a los diversos sectores, porque "marketineramente" le han puesto el nombre que es un impuesto al turismo o a Netflix, pero en realidad abarca a una enorme cantidad de actividades, desde comprar un repuesto para una máquina hasta los jóvenes profesionales que trabajan para el exterior. Creo que va a causar muchísimo daño porque hará subir al dólar y generará inflación, es decir, todos efectos que son contraproducentes. De nuevo, creo que es una medida que fue pensada para hace unos 8 años, cuando se introdujo el cepo, pero en aquél momento no fue oportuna y ahora tampoco lo va a ser, sobre todo por el cambio de la estructura económica argentina.

-¿De qué manera cree que impactará en los precios el incremento del dólar generado por las nuevas medidas?

-Desconozco completamente porque eso depende de la escasa demanda de dinero y, por otra parte, hay un elevado nivel de recesión. No creo que los precios puedan subir muchísimo porque la gente no tiene capacidad de compra. Entonces hay un equilibrio entre el empresario que busca protegerse manteniendo los stocks de alguna manera y la gente que no va a comprar la mercadería. La verdad es difícil decir cuál de los dos efectos (recesión o inflación) va a primar. Básicamente, este paquete aprobado lleva a tener una mejor situación fiscal pero no una mejor situación productiva.

-El Presidente había anunciado que pretendía impulsar la producción para que la economía salga a flote. ¿Las medidas aprobadas no van en contra de esa dirección?

-Alberto Fernández lleva pocos días en el gobierno, es difícil encontrar mágicamente algo que impulse la productividad. Si estas medidas conllevan alguna desregulación adicional,  como por ejemplo lo que estaba previsto de tomar los organismos estatales, entre otras cosas, puede ayudar. Pero si es solamente un aumento de impuestos, no va a ayudar. En resumen, es todavía una medida parcial, los primeros indicadores muestran que, por lo menos, hay conciencia que no se puede mantener un déficit fiscal, eso me parece extremadamente positivo. Aunque el mecanismo por el que lo están buscando no me parece tan atractivo todavía, y el crecimiento es algo que vendrá con la suma de múltiples elementos que brinden confianza. Sin esto último, la verdad que va a resultar muy difícil. Igual, todavía hoy es todo prematuro.

-En medio de este contexto tan complejo, ¿qué margen de acción tiene el Gobierno?

-Creo que hay que dar una serie de señales con respecto a la reducción de la burocracia, que eventualmente terminará en la reducción de gastos. Hay que dar también una serie de señales, como si se va a renegociar la deuda rápido o despacio, y en otros elementos importantes, como la estructura del sector productivo, ya que se está afectando al sector exportador que es dinámico. Además, hay que ver para qué y qué se va a hacer con esos recursos. Acá lo que se necesita es dinamizar las exportaciones, no ponerles impuestos adicionales. Las retenciones tienen un impacto muy grande que debiéramos considerar, porque no afectan sólo al productor, sino también a todo el ámbito en el que está él porque no va a poder comprar zapatillas para sus hijos o no va a poder cambiar las ruedas del auto. Tengamos en cuenta eso.