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Atender la crisis financiera de las empresas, primer objetivo del Banco Central de Alberto

El equipo de Pesce trabaja en medidas urgentes que alivien la carga financiera de las empresas. Detalles del plan que incluyen tasas bajas y más créditos
06/12/2019 - 06:25hs
Atender la crisis financiera de las empresas, primer objetivo del Banco Central de Alberto

El desembarco de Miguel Ángel Pesce en el Banco Central será casi como un regreso a casa para el economista mendocino, después de estar cuatro años exactos sin pisar los pasillos de Reconquista 266. Sus 11 años como vicepresidente de la entidad le aportan el récord de ser la persona que más tiempo duró en ese cargo, un dato que puede ser anecdótico pero que grafica la experiencia que tiene sobre el funcionamiento diario del organismo.

Ese manejo de los engranajes del Central será clave para poner en marcha el plan que coordinó con Alberto Fernández y que tiene como objetivo fundamental ponerle un freno a la ola de defaults corporativos y al cierre de empresas. La baja de tasas y una línea de préstamos para capital de trabajo son las primeras medidas que ya tienen en mente para ese plan, que aún están terminando de delinear.

"Si no se hace algo va a haber quiebres y concurso masivo de empresas. Seguramente se va a resolver algo de entrada", dicen en el entorno de Pesce, donde saben que la delicada situación económica no da margen de tiempo.

El caso de Vicentin y el default de Celulosa Argentina son solo una muestra del deterioro de la cadena de pagos y su impacto directo tanto en pequeñas como en las grandes compañías.

En concreto, apenas asuma Alberto Fernández, el nuevo gobierno apunta a lanzar un set de medidas destinadas a aliviar la situación financiera de las empresas, sobre todo de las Pymes endeudadas con bancos y con la AFIP.

Por eso, el presidente electo puso a un equipo de economistas a trabajar en un paquete que, exclusivamente, sirva para mejorar el perfil crediticio de las compañías. Los asesores (algunos de ellos seguramente funcionarios del equipo económico a partir del martes 10) seguirán puliendo el paquete de iniciativas durante el fin de semana.

Alberto F. busca que haya un trabajo coordinado entre el Central, el Banco Nación y también la AFIP. Es más: el próximo jefe de Estado ya le comentó a su equipo que quiere respaldarse en esas tres instituciones para "dar vuelta a la economía".

El directorio y un puesto clave

Si algo dejó en claro Alberto a sus colaboradores es que tendrá plena injerencia en la conformación del próximo directorio del BCRA y también del Nación. Se trata de una estrategia a imagen y semejanza a la que en su momento implementó Néstor Kirchner, quien había avalado, uno por uno, a los directores de la autoridad monetaria.

Un puesto clave en la estructura del BCRA es el de Superintendente de Entidades Financieras, cargo que hoy ocupa Horacio Zampone. En las entidades creen que será Arnaldo Bocco el que vaya a la "Super", aunque en los pasillos de Reconquista 266 suena fuerte el nombre de Jorge Rodríguez, el histórico del BCRA que echó Federico Sturzenegger y que después del cepo tuvo que "repatriar" Guido Sandleris.

Las medidas serán tomadas "de entrada", confía uno de los economistas que trabaja contratiempo para llegar al 10 de diciembre. Irán desde una baja sensible en las tasas de interés a las que se financian las Pymes hasta una reprogramación de vencimientos de las deudas de esas compañías.

La idea es dar una oferta de crédito muy fuerte a costos que no superarían el 40% anual. También se mencionará la necesidad de imprimirle "un nuevo rol" al sistema financiero, con bancos públicos que funcionen como referentes del resto de las entidades. 

En paralelo, una de las primeras medidas que tiene en mente Pesce es aplicar una baja de encajes, con la idea de liberar fondos de los bancos y reducir así su costo de fondeo. 

Se sabe: dentro de este marco, habrá un relanzamiento de los denominados "créditos productivos", con un costo bajo para las inversiones. En concreto, cerca de Pesce sostienen que hoy la industria no necesita préstamos para inversión productiva sino para capital de trabajo, algo clave para darle aire a las Pymes y mejorar la cadena de pagos.

Así, el organismo monetario dispondrá que los bancos tengan que destinar un determinado porcentaje de sus depósitos a este tipo de créditos, a una baja tasa de interés.

Esta medida ya está descontada por los banqueros, que imaginan que el diagrama será similar al que existió durante los últimos años del gobierno de Cristina Kirchner, cuando estaban obligados a destinar una parte de sus activos a financiar a las inversiones en la economía "real".

Tasas más bajas

Desde el equipo del presidente descartan que se imponga un límite a las tasas de interés que puedan cobrar los bancos. Al menos por ahora. La intención es que las medidas salgan con el máximo nivel de consenso, sin pujas con las entidades financieras.

En ese sentido, también descartan poner un tope a los aumentos de comisiones, una estrategia que en los últimos meses se volvió cada vez más habitual entre los bancos privados.

Asimismo, la intención de Alberto F. es que la baja de las tasas de interés también alcance a las personas. Una cuestión clave para relanzar el consumo, que viene con sucesivas caídas desde que explotó la crisis, en abril 2018.

Desde el equipo "albertista" afirman que si bien hay "consumo postergado" por parte de las familias, "hoy el problema es el sobreendeudamiento". Destacan el alza en los niveles de morosidad. Y que el foco estará puesto en la continuidad de los Planes Ahora 12 y Ahora 18.

Se descuenta que la nueva cúpula del BCRA va a dar marcha atrás con la meta de crecimiento cero de Base Monetaria que aplicó Sandleris.

Durante sus años en el Central, supo cultivar un buen vínculo con los banqueros, que lo ven como alguien que conciliador y que conoce el paño financiero. "Es un hombre con el que se puede hablar", comenta el dueño de una de las entidades locales.

El presidente de otro banco destaca el bajo perfil de Pesce como una cualidad necesaria para ese puesto. "Él siempre demostró que no es un hombre que busca protagonismo. Cuando la gente no conoce al presidente del Central quiere decir que las cosas van bien", explica.

En sus 11 años como vicepresidente sólo ocupó la presidencia de manera interina entre el 7 de enero y el 22 de enero de 2010, después de que Martín Redrado fuera alejado del cargo por negarse a usar las reservas para el Fondo del Bicentenario y hasta la llegada de Mercedes Marcó del Pont al organismo.

También fue vicepresidente de Juan Carlos Fábrega y de Alejandro Vanoli, hasta la llegada de Sturzenegger, cuando se fue a Ushuaia, como titular del Banco de Tierra del Fuego. Su salida acordada con la cúpula de Cambiemos no lo excluyó de estar procesado en la causa dólar futuro, algo que no le impide asumir el nuevo cargo.

Dólar paralelo y brecha cambiaria

Pesce es de los que creen que el precio del dólar paralelo no suele ser de referencia para la economía local, en la medida que el importador pueda acceder al dólar oficial, como ocurre con el cepo actual.

En charlas con amigos acude a la teoría que sostenían Alfonso Prat Gay y Sturzenegger para graficar esta idea y recuerda que decían que el mercado ya tenía asumida una devaluación en base al dólar blue y cuando liberaron el cepo la realidad mostró otra cosa.

Para Pesce, la brecha cambiaria no es un problema ‘per se’ y no cree que siempre termine presionando al tipo de cambio oficial hacia una devaluación.

La clave, según su visión, es que el tipo de cambio oficial no esté atrasado, como pasó en la devaluación de enero de 2014, cuando pese a la vigencia del cepo, no se pudo evitar la corrección cambiaria.

Dentro del equipo económico es uno de los que conoce hace más cantidad de años a Alberto. Fue en 2001, cuando fue secretario de Hacienda y Finanzas del gobierno de Aníbal Ibarra cuando Fernández era legislador de la Ciudad, un vínculo que se fue afianzando en 2003 cuando fue representante del ministerio de Economía en el Banco Central.

En estos días, Pesce está preparando su regreso al segundo piso del BCRA, aunque a una oficina mucho más amplia que la ocupó entre 2004 y 2015, donde nunca faltó la imagen del equipo de Boca.

El martes 5 de diciembre se despidió de sus compañeros del Banco de Tierra del Fuego, al presidir la última reunión de directorio en la sede de Ushuaia. No quiso dar pistas de su futuro en el Gabinete económico, aunque dijo que estaba trabajando en el equipo que coordina la transición y dio a entender que algún cargo ocuparía.

Dijo que no se veía en algunos puesto, como la CVN o el FGS, como circulaba por esos días, y cuando le preguntaron por la posibilidad de ir el BCRA sólo respondió con una sola palabra: "Ojalá".

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