Bagley adelanta vacaciones a sus empleados y temen por despidos
Por la crisis, la empresa de galletitas Bagley adelantó vacaciones a sus trabajadores en Córdoba y el sindicato de la Alimentación teme por despidos.
Son 160 empleados los afectados por la decisión de la compañía que tiene como objetivo reducir el nivel de sobrestock que posee por la caída del consumo.
Uno de los delegados de los trabajadores, Carlos García, fue quien alertó por la situación. En declaraciones a la prensa local, manifestó que la decisión de otorgar vacaciones "forzadas" a los empleados había generado un "clima de incertidumbre y malestar" por las posibles consecuencias de la medida.
Ello, a pesar que Bagley ya había comunicado a sus empleados que debido a la "crisis en el país, la baja en las ventas, la disminución de la demanda y la acumulación de la producción", debía parar la planta al menos dos semanas en octubre.
Pero el secretario gremial del STIA, Gustavo Sosa, trató de llevar calma y dijo que la medida de adelantar vacaciones preludie el cierre de la planta alimenticia.
La preocupación se da en momentos en que se conoció que la popular marca de galletitas Toddy dejó de fabricarse en la planta de Pepsico de Mar del Plata, lo que genera incertidumbre en los 800 trabajadores que allí se desempeñan, que temen por sus puestos laborales.
Además, semanas atrás, cientos de trabajadores fueron forzados a tomarse vacaciones en la planta de San Luis debido al sobrestock y la imposibilidad de colocar la producción en el mercado.
Héctor Morcillo, titular del gremio de trabajadores de Industrias Alimentiacias, dijo "se está transfiriendo el ajuste a los trabajadores porque una de las herramientas que encontraron las empresas es el fraccionamiento o adelanto de las vacaciones".
"En Tucumán las empresas fraccionaron vacaciones dos semanas, en la molienda de maíz ya había ocurrido en Arroyito y en Bagley Córdoba y Totoral también se han fraccionado vacaciones en el mes de julio y de octubre", amplió.
"La finalidad de la empresa es bajar stock, pilotear esta baja de demanda y caída del consumo hasta que se vean indicadores que vayan reactivando el consumo", lamentó.
El miércoles, el INDEC difundió los dramáticos índices de consumo que mostraron una abrupta caída de ventas en los supermecados del 7,3% en agosto último, lo que representa un derrumbe acumulado de 14 meses.