Arnaldo Bocco, el asesor clave para el giro discursivo de Alberto F. sobre las Leliq
El tema de las Leliq obligó a Alberto Fernández a introducir rápidos cambios en su estrategia de campaña. Luego de algunas explicaciones confusas sobre lo que el candidato piensa hacer con esas Letras de Liquidez del Banco Central, Fernández se decidió por la incorporación formal a su equipo de tres economistas especializados en temas financieros: Arnaldo Bocco, Eduardo Hecker y Miguel Pesce.
Los tres tuvieron cargos estratégicos durante los 12 años de kirchnerismo, pero no tuvieron responsabilidad en ninguna de las medidas más polémicas de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.
Es más: Hecker renunció a la presidencia de la Comisión Nacional de Valores en 2009 tras oponerse a la intervención de Guillermo Moreno. Antes de llegar a la CNV, Hecker había pasado por el sillón principal del Banco Ciudad de Buenos Aires.
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Pesce, un radical K de la primera hora, llegó a la vicepresidencia del Banco Central en 2004 por sugerencia, precisamente, de Alberto F. De origen radical, Pesce se acercó a la administración Kirchner a partir de sus vínculos políticos con el ex Jefe de Gabinete y actual candidato presidencial.
Pesce mantuvo su oficina en Reconquista 266 nada menos que hasta diciembre de 2015 secundando a los diferentes titulares del BCRA: primero a Redrado, luego a Mercedes Marcó del Pont, Fábrega y después a Vanoli.
A Bocco le encomendó directamente que salga en los medios para explicar la estrategia con las Leliq, en caso de que AF sea elegido Presidente en las próximas elecciones.
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Bocco fue director del BCRA durante la gestión de Martín Redrado. Pero antes -durante la presidencia de Néstor Kirchner- había presidido el Banco de Inversión y Comercio Exterior de Argentina (BICE). Durante aquéllos años, Néstor Kirchner solía ubicarlo en la primera fila en los actos que se organizaban en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno.
Bocco, al igual que Hecker y Pesce, mantiene un perfil político bien claro a favor de la producción y de la denominada heterodoxia económica.
Por este motivo, Alberto F. le pidió que se sume a la última parte de la campaña, rumbo a las PASO. Bocco, de hecho, viajó en las últimas horas a la provincia de Mendoza, para explicar los planes del candidato.
En diálogo con iProfesional, Bocco eludió cualquier insinuación del dólar que necesitaría la Argentina para volver a ser competitiva y crecer. Pero dejó en claro que, así como están las cosas, "el campo no liquida su producción" y no se asegura un "fuerte incremento de las exportaciones, que es lo que requiere el país para volver a expandirse".
Bocco no le teme a una baja drástica de la tasa de interés de las Leliq, que fue la promesa de Fernández de hace unas jornadas. Al contrario, sostiene que en caso de un triunfo del peronismo en octubre o noviembre, ésa será una de las primeras medidas.
"Vamos a encontrar una salida virtuosa a esta situación. Lo haremos con crecimiento económico, una expansión del mercado interno, y con la recuperación en los ingresos de la gente. Y con mayor volumen de exportaciones. No puede ser que el Banco Central destine $720.000 millones anuales a pagar los intereses de las Leliq. Los únicos que ganan son los bancos", sintetiza Bocco.
El economista no entra en detalles sobre el acuerdo (o desacuerdo) que habría que llegar con los bancos que, a diario, renuevan las Leliq que tienen en su cartera. Bocco se aferra a la idea que dejó Alberto F en medio de la campaña: que otorgaría un aumento del 20% a los haberes de los jubilados.
Y que, de esa manera, sumada a una sensible caída de la tasa de interés, impulsaría el consumo, los créditos y la inversión. Así lo argumentó en la charla con iProfesional:
- -¿Y no puede pasar lo mismo de siempre? ¿Que el salto del dólar induzca un fogonazo inflacionario que determine una crisis?
- -No porque se va a hacer en el marco de un gran acuerdo de precios y salarios, donde cada uno deberá poner su parte, para que la Argentina vuelva a crecer.
- -¿Y el FMI? ¿Dónde queda en todo este planteo?
-El Fondo ya sabe del planteo de Alberto Fernández. Se lo dijo en cada reunión. Con ellos habrá que sentarse y rediscutir en duros términos. Para pagar hace falta crecer. Y con este modelo no se sale; lo admiten las consultoras en el último REM. Con esta política se vendría otro año muy duro.