El mercado inmobiliario está al borde del precipicio
El presente del mercado inmobiliario, que desde junio del año pasado viene en caída libre, está cada vez más complicado.
Durante marzo, las escrituras cayeron 55,4% respecto al mismo mes del año anterior, según los últimos datos dados a conocer por el Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires.
Pero esa caída no es la única: solo el 7% de esas operaciones se hicieron con la ayuda de financiación bancaria.
"El país está en incertidumbre, no sabemos qué va a pasar. El dólar sube cada día más. Lo cierto es que hasta el 22 de junio que no se presentan las listas el mercado va a seguir paralizado", explicó Armando Pepe, presidente del Colegio Inmobiliario de la Capital, a ámbito.com. "Hoy lo único que se mueve es el consumidor final, el que tiene dólares y quiere invertir ya", concluyó.
Con la suba del dólar, que en lo que va del año ya se incrementó un 20%, las propiedades que se valúan en moneda estadounidense se mantienen con los mismos valores.
"No hay inmuebles más económicas, lo que existe es mayor poder de contra-oferta. Hoy los precios del mercado se rigen según la necesidad de venta de los propietarios", indicó Pepe.
"Trabajamos a media máquina, hay pocos llamados y creemos que será así hasta octubre que se defina el futuro del país. La falta de créditos es lo que más perjudica al sector", señaló Jorge Toselli dueño de JT Inmobiliaria.
Proyecto de Ley de Alquileres
A esta crisis económica, se debe sumar el nuevo proyecto para la Ley de Alquileres que se presentó la semana pasada.
Entre los puntos principales del proyecto se establece que el alquiler tendrá una vigencia de dos años, con la posibilidad de extenderlo automáticamente un año más, salvo que el propietario o el inquilino desistan; que el inquilino no abonará los honorarios por la intermediación de un corredor inmobiliario, gastos de publicación, certificación de firmas y cualquier otro en el que incurriere el intermediario a efectos de "perfeccionar o renovar un contrato"; y que el inquilino tendrá varias opciones de garantías como el Seguro de Caución, Aval Bancario, entre otros.
"En febrero, nos reunimos todos los colegios inmobiliarios e hicimos un proyecto de ley que beneficia a todas las partes. Se lo entregamos a Ivan Kerr (Secretario de Vivienda de la Nación). Lo tomaron y lo guardaron en un cajón, este proyecto no tiene nada que ver con lo que nosotros propusimos", se quejó Armando Pepe. "Al extender el contrato a tres años, el inquilino se queda sin garantía y sin contrato. Además, la forma del ajuste que establecen es una locura", concluyó.
Desde el Colegio Inmobiliario creen que el proyecto de ley no avanzará en el Congreso, pero de suceder lo contrario se complicaría aún más el escenario de las inmobiliarias que hoy están al borde del precipicio.