El Gobierno está dispuesto a tomar medidas adicionales de ser necesario para lograr objetivos macroeconómicos y financieros en el marco del programa de préstamo stand-by de u$s50.000 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Así lo manifestó en la carta de intención firmada por el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne y el presidente del banco central Federico Sturzenegger. El organismo informó el miércoles que recibió la misiva y memorándum de políticas económicas.
El comunicado argentino se produce una semana después de alcanzar el acuerdo preliminar con el FMI para obtener una línea de crédito tras recientes turbulencias financieras, a cambio de que acelere el ritmo de recorte de su déficit primario.
En la carta al organismo internacional, Argentina dijo que, si bien considera adecuadas las políticas trazadas para alcanzar las metas macroeconómicas y financieras del convenio, "tomaremos medidas adicionales para alcanzar estos objetivos si fuera necesario".
Como parte del acuerdo, el Gobierno detalló las iniciativas para lograr sus metas:
- Prevé un crecimiento económico del 0,4% para el 2018 y del 2% para el 2019.
- Acelerará la reducción de su déficit primario, que deberá ser del 1,3% del producto bruto interno (PBI) el año próximo -frente al 2,2% previsto anteriormente- para alcanzar el equilibrio fiscal en 2020.
- Con el esquema fiscal elegido, la deuda pública bruta caería a partir de este año hasta alcanzar el 55,8% PBI hacia fines del 2021.
- Las proyecciones de ingresos públicos en el presupuesto que presentará al Congreso en los próximos meses "apropiadamente conservadoras" y que se incluirán "reservas de gasto que serán usadas únicamente en el caso de que ocurran imprevistos".
- Enviará al Congreso un proyecto de ley para modificar la Carta Orgánica y aumentar la autonomía del Banco Central
- El BCRA publicará a fines de septiembre de 2018 una regulación que introduzca un mecanismo de subasta de divisas para intervenir en los mercados de contado y de futuros", agregó.
- Congelará las contrataciones por dos años en el Estado y que se compromete a reducir y eventualmente eliminar impuestos distorsivos para alcanzar las metas fiscales.
Hoja de ruta
El acuerdo con el FMI tranquiliza a un Gobierno que en mayo tuvo que lidiar con una corrida cambiaria que llevó a una fuerte devaluación del peso y a una importante alza de tasas, lo que alimentó la ya elevada inflación y golpea el crecimiento.
Macri le solicitó a la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, que del monto inicial de desembolso de u$s15.000 millones, la mitad pueda ser utilizada para apoyo presupuestario a través de un programa de venta de divisas con subastas que realizará el Banco Central a solicitud del Tesoro.
Tras esta instancia formal, el Directorio del FMI otorgará la aprobación final al acuerdo en la reunión prevista para el próximo miércoles, tras lo cual se efectivizará el primer desembolso equivalente a un tercio del monto total previsto.
"El gobierno del presidente (Mauricio) Macri hoy (por el miércoles) nos proporcionó los detalles de su plan económico y su solicitud formal de apoyo del FMI para este esfuerzo fuerte y ambicioso a través de su Carta de Intención y Memorándum de Políticas Económicas", señaló ayer Lagarde a través de un comunicado de prensa.
En ese sentido, planteó que "instituye objetivos fiscales ambiciosos a mediano plazo para el gobierno federal y establece metas de inflación realistas que regirán la conducción de la política monetaria".
En lo que respecta a las metas de inflación, el Gobierno se comprometió a cerrar el año próximo en torno al 17%, del 13 % en el 2020 y del 9% en el 2021, mientras que para 2018 el gobierno decidió "no tener metas" sobre la evolución de los precios dado el desvío en el primer tramo del año.
Demanda de dólares
El Ministerio de Finanzas anunció que se venderán u$s7.500 millones, provenientes del acuerdo con el Fondo para apoyo presupuestario a través de un mecanismo de subastas realizadas por el Banco Central.
La operatoria, indicó, "consistirá en ventas diarias, preanunciadas, que se ejecutarán a través de un mecanismo de subastas realizadas por el Banco Central a solicitud del Tesoro".
A los u$s50.000 millones que se descarta aprobará el Directorio del Fondo, se les agregarán otros u$s5.600 millones que serán aportados por el Banco Mundial, la Corporación Andina de Fomento (CAF) y el Banco Interamericano de Desarrollo.
En ese sentido, Lagarde también expresó que estos objetivos "ayudarán a reforzar la confianza del mercado y abordar una gama de vulnerabilidades de larga data. Además, el plan también incluye nuevos pasos para reforzar el marco institucional de Argentina".
"Por ejemplo, tiene medidas para mejorar el proceso presupuestario a mediano plazo y garantizar la independencia del Banco Central", dijo la directiva del organismo.
La directora del FMI manifestó su respaldo al "énfasis puesto por el equipo económico del presidente Macri en apoyar a los más vulnerables de la sociedad", lo que se logra con "compromisos concretos para preservar el nivel actual de gasto social y mayores recursos para los programas de asistencia".
En el mismo sentido, el secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Steven Mnuchin, destacó la importancia del acuerdo en una conversación telefónica con el ministro Dujovne, en la que valoró el camino elegido por el gobierno argentino para lograr la convergencia fiscal.
Según la cartera económica, Dujovne agradeció el apoyo recibido por parte de las autoridades estadounidenses por la exitosa y rápida conclusión del acuerdo entre Argentina y el FMI y reconoció el importante apoyo internacional que recibió el gobierno.