• 22/11/2024

Clave para la economía: ¿cómo evitar que la aceleración de precios sea permanente?

La disparada de los precios de los últimos meses generó una nueva crisis para el Gobierno. ¿Qué instrumentos tiene para frenar la inflación?
30/03/2022 - 19:00hs
Clave para la economía: ¿cómo evitar que la aceleración de precios sea permanente?

La preocupación por la inflación está en franco ascenso en la sociedad argentina y no por exageración: si el alza de precios roza 6% en marzo -como la mayoría de los analistas anticipa-, el primer trimestre del año va a acumular una suba de precios en torno al 15%, la más alta desde los primeros tres meses de 1991, justo antes de la instauración de la Convertibilidad.

Más aún, la inflación está corriendo a casi 5% mensual -que equivale a un 75% anual- sin una fuerte corrección de precios relativos ya que no hubo devaluación ni tarifazo, sino aceleración de productos sensibles como alimentos (por el shock productivo de la sequía y la ola de calor en febrero, además de la invasión militar rusa a ucrania en marzo) y naftas (por decisión administrativa).

"Si el alza de precios roza 6% en marzo -como la mayoría de los analistas anticipa-, el primer trimestre del año va a acumular una suba de precios en torno al 15%"

Inflación: ¿qué instrumentos tiene el Gobierno para frenar los precios?

El Ejecutivo posee pocas herramientas para contener la aceleración de los precios:

  • El margen para utilizar al tipo de cambio oficial y/o las tarifas de servicios públicos como anclas es mínimo tras el retraso acumulado a lo largo de 2021 (17% y 15%, respectivamente).
  • La suba de la tasa de interés incentiva la demanda de pesos ayudando a estabilizar el mercado cambiario, pero no tiene un impacto relevante para enfrentar un proceso inflacionario con elevada inercia.
El dólar como ancla para la inflación, una estrategia ya con poco margen.
El dólar como ancla para la inflación, una estrategia ya con poco margen.
  • Acotar las subas salariales podría morigerar la inflación a costa del deterioro del salario real, que aún se encuentra 20% debajo de los niveles de 2017.
  • Los controles de precios suelen funcionar en el cortísimo plazo pero tienden a generar problemas de abastecimiento.
  • El acuerdo con el FMI no incluye metas de inflación que guíen a los agentes económicos, por lo que "sólo" evita un escenario nominal disruptivo (corrida cambiaria).

¿Qué pasará después del shock inflacionario?

En este contexto, pareciera que la aceleración de la suba de precios en el corto plazo es inevitable, por lo que la pregunta del millón es que sucederá con la inflación meses después del shock. Una posibilidad es que el resto de las variables nominales acelere el paso para no perderle pisada a los precios y que, producto de la elevada inercia y la falta de anclas, la tasa de inflación se consolide en torno del 4% y 5% mensual. La otra alternativa es que los agentes económicos perciban que la aceleración de la inflación es transitoria y que, tras unos meses de fuertes subas de precios, los aumentos van a ir moderándose volviendo a oscilar en torno del 3% y 4% mensual.

"El margen para utilizar al tipo de cambio oficial y/o las tarifas de servicios públicos como anclas es mínimo"

La segunda opción es preferible a la primera, pero sólo un efectivo accionar de la política económica permitiría coordinar a los agentes económicos pues las expectativas de inflación no están ancladas en nuestro país. La mayoría de las economías del mundo están sufriendo una mayor suba de precios, pero esta se percibe como transitoria ya que las expectativas inflacionarias para los próximos años prácticamente no se incrementaron.

Convencer a los actores económicos que la disparada de los precios es una fenómeno transitorio, clave para enderezar la economía.
Que la disparada de precios sea percibida como transitoria, clave para ordenar la economía que vendrá.

¿Qué política/medida permitiría convencer a la mayoría de los agentes de nuestro país que estamos frente a un shock inflacionario que tenderá a diluirse dentro de un par de meses y, por ende, la suba de precios podría retornar a un ritmo del 3-4% mensual? No hay una respuesta sencilla, pero es importante que las principales discusiones paritarias que están comenzando, no tomen como referencia la suba de los últimos meses, especialmente la de alimentos, que alcanzaría 20% en el primer trimestre de 2022.

Una posibilidad es que el Ejecutivo otorgue por decreto un incremento salarial y de ingresos que cubra la mayor inflación que estamos sufriendo para evitar el deterioro del poder adquisitivo de las familias y para posponer las paritarias con el objeto de que las negociaciones se lleven a cabo en un contexto de menores subas de precios (post shock). No hay plenas garantías de que a mediados de año la inflación será menor que la actual, pero la lógica indica que lo peor (shocks productivos y subas de tarifas) habría pasado.

Esta medida no es un plan de estabilización -que requiere de credibilidad, precios relativos alineados y contratos nominales sincronizados para eliminar la indexación de cuajo- pero podría servir para transitar un contexto internacional inédito, en un país con múltiples desafíos económicos preexistentes.

Por Lorenzo Sigaut Gravina, Director de Análisis Macroeconómico de Equilibra.