La "vaca loca" golpea a las exportaciones de carne de Brasil: ¿oportunidad para la Argentina?
A principio de la semana pasada, Brasil informó que había detectado en el estado de Pará un posible caso de "vaca loca" (nombre común de la Encefalopatía Espongiforme Bovina o EEB) y que suspendía temporalmente sus exportaciones de carne a China, como establece el protocolo entre ambos países.
De inmediato, se envió una muestra a un laboratorio en Canadá referente de la Organización Mundial de Salud Animal, para que precisara si se trataba de un caso típico (como los que se dieron en los ’90, presumiblemente causados por el alimento de los animales, que causaron gran daño a la industria) o atípico (que aparecen espontánea y muy esporádicamente en algunos animales viejos).
Para Brasil fue un golpe durísimo, ya que China es, por lejos, su principal comprador de carne vacuna, al que envía alrededor del 60% de sus exportaciones. Esto contribuyó a que el mes pasado las exportaciones brasileñas de carne cayeran 20% respecto de febrero de 2022, la primera baja interanual en 14 meses, de acuerdo con la publicación Valor Carne. A su vez, el precio de la hacienda brasileña se desplomó.
Argentina, ¿con nuevas expectativas para la carne?
Aunque sin festejar, porque las desgracias sanitarias tienden a sembrar mantos de dudas generalizados, los frigoríficos exportadores en la Argentina y Uruguay se ilusionaron un poco: es que la carne brasileña es la mitad de toda la que importa China, y su falta, imposible de sustituir por completo.
Así, debería provocar un fuerte repunte en los precios, como ocurrió en un episodio semejante en septiembre de 2021, en el que Brasil detectó dos vacas viejas con este mal y China le dejó de comprar por más tres meses, aún a costa de reducir una cuarta parte sus importaciones.
Sin embargo, por ahora esto no sucedió, y hay grandes dudas sobre si ocurrirá. En gran parte depende de cuánto tiempo quede Brasil fuera del mercado chino. Pero esta vez informó rápido y no habría motivos para que la suspensión sea tan drástica, opinan distintas fuentes del sector.
Importadores chinos, reacios a pagar más
"La primera reacción de los importadores chinos sobre el autoembargo que resolvió Brasil fue ponerle ‘paños fríos’, con el argumento, y la expectativa, de que el retorno de los exportadores brasileños se dará en un corto plazo", indicó la publicación especializada uruguaya Faxcarne.
La misma idea e intención tiene Brasil, que desde el primer momento se puso a negociar y logró que China permitiera ingresar a su territorio toda la carne producida antes del 22 de febrero, cuando se halló el animal enfermo en Pará. Ayer, el laboratorio canadiense confirmó que se trataba de un caso atípico de "vaca loca", lo que abona las perspectivas de una pronta reapertura.
Gerrard Liu, analista de la consultora china Meat International Group, dijo por otra parte que "la demanda en China sigue sin ser buena, por lo que el mercado no aceptará precios mucho más altos", y señaló que muchos importadores se quejan porque tienen stocks abultados de carne que compraron a altos precios el año pasado. "China se está moviendo, pero no veo un mercado superdemandado y con precios al alza", señaló a Faxcarne.
En la Argentina, varias plantas frigoríficas dicen que aumentaron bastante las consultas desde China, pero no así los precios. Desde uno de los principales frigoríficos exportadores locales le dijeron a iProfesional que el impacto inicial en algunos precios fue de u$s200/300 (alrededor de 5%), pero esta semana, al volver a ofrecer a ese precio, incluso antes de que se confirmara que se trató de un caso atípico de EEB, los importadores chinos ya no convalidaban y contraofertaban los valores anteriores a la salida de Brasil.
Los precios de la carne en China no mejoran
Otro indicador de que los precios de la carne no levantan es el retroceso de la cotización de las vacas de conserva y manufactura (tipificadas con las categorías D y E), conocidas aquí como "vacas chinas" porque el país asiático las paga a un valor que no habían conocido. Se trata de los animales que se destinan a chacinados y eran la materia prima del corned beef y la viandada, productos que cayeron en desuso. De hecho, estas vacas junto con los toros viejos, son los únicos animales que se pueden exportar completamente, sin la restricción de los siete cortes que el Gobierno prohíbe exportar en las demás categorías.
Estas vacas D y E venían acompañando el fuerte aumento general de precios de la hacienda que se dio este año, tras un largo retraso que habían acumulado. Sin embargo, según fuentes del Centro de Consignatarios Directos de Hacienda, la semana pasada cayeron unos 30 pesos por kilo en gancho, y esta semana volvieron a hacerlo, en parte por la sobreoferta que está generando la sequía al expulsar a los animales de los campos.
Para la Argentina (así como para Brasil y Uruguay), China se convirtió en un el principal destino de su carne vacuna. De las 630.000 toneladas de carnes bovinas por unos 3.400 millones de dólares que a Argentina exportó en 2022, cerca del 77% del volumen y del 66% del valor se debieron a las compras de China.