Fabricantes argentinos piden protección ante importaciones "desleales" de juguetes chinos
El mercado juguetes nacionales está sufriendo un fuerte retroceso debido a la recesión que está atravesando la economía y al exceso de productos importados, alertó la Cámara de la Industria del Juguete a través de un comunicado, desde donde señalaron que la situación del sector "es crítica" y que está en estado de "jaque".
Desde la entidad advirtieron que se encuentran en el mercado productos importados desde Asia a precios de dumping en los cuales la industria nacional tiene oferta competitiva y de calidad, tales como arbolitos de navidad, lanza aguas, globos para agua, juguetes didácticos para primera infancia, juegos de playa y camiones de plástico que se fabrican en Argentina "a precios competitivos".
Esto "evidencia una falta de lectura por parte de algunos importadores que traen del exterior los mismos productos saturando el mercado. Esto en la práctica, no promueve una mayor diversificación de la oferta ni reduce los precios como se podría llegar a esperar de acuerdo a algunas visiones económicas", alertaron.
Emmanuel Poletto, presidente de la CAIJ, señaló: "No nos oponemos a la importación de juguetes que complementan nuestra producción, pero en los productos en que Argentina es competitiva debe darse prioridad a la producción nacional".
Lo que busca la entidad es volver a alcanzar el 50% del mercado interno con juguetes nacionales.
"Hasta 2016 el sector tenía un acuerdo con las grandes superficies y las cadenas de jugueterías, por el cual se comprometían a no importar productos que sustituyeran a los de fabricación nacional, lo cual era monitoreado por Secretaría de Comercio y permitía un surtido equilibrado en las góndolas, sin dañar a la producción nacional".
Cabe destacar que las importaciones de juguetes del período enero-octubre totalizaron 11,6 millones kilos netos y u$s79,2 millones, "prácticamente los mismos niveles de 2017 y casi duplicando los valores de 2015", advirtieron desde la cámara.
Este aumento, argumentaron desde la CAIJ, se evidenció en la duplicación de empresas que se incorporaron al negocio de la importación: hoy hay 548 importadores de juguetes en un mercado recesivo, generando sobreoferta y acumulación de stocks, según la entidad.
"Se sigue desarrollando un fenómeno inédito: los importadores se están canibalizando entre sí rematando los excedentes y con este dólar, siguen importando por la mayor espalda para financiarse y por tener menor estructura que las industrias, que es generadora de empleos de calidad pero por el poco espacio que hoy tiene en góndolas no se ve beneficiada por el mayor consumo interno", plantearon.
Además, señalaron que otro grave problema es el contrabando, que explica el 30% del mercado y ante las restricciones presupuestarias los consumidores muchas veces recurren a la compra en la vía pública, lo que pone en riesgo la salud de los niños y niñas.
Poletto señaló que a partir de acciones como "La Noche de las Jugueterías" y otros incentivos se está comenzando a recuperar el consumo en la previa de Navidad, pero "por la gran cantidad de juguetes ingresados de contrabando ó con importaciones desleales, la industria nacional juguetera se encuentra en jaque".
"La nueva ley de solidaridad social y reactivación productiva en el marco de la emergencia económica atiende diferentes prioridades pero es difícil que vaya a solucionar en corto plazo los problemas vinculados a la producción. Es necesario contar con una estrategia de desarrollo industrial, profundizar las herramientas para estimular la producción nacional y el consumo, como el Programa Ahora 12 con menores tasas para los productos de fabricación nacional", concluyeron desde la cámara.