A un mes del cambio de gobierno, algunos de los principales sectores de la economía, como el polo agroexportador y la industria automotriz, parecen haber apretado el freno a la espera de mayores definiciones de parte del candidato que se imponga en las próximas elecciones presidenciales.
Las evidencias están a la vista. La semana pasada los productores de granos efectuaron la menor liquidación de divisas del año -u$s131,9 millones- que además quedó un 79,4% por debajo de lo ingresado en la misma semana de 2014
Si se descuenta la merma de operaciones del viernes por el feriado bancario, fueron u$s33 millones por día, según informó la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara-CEC)
Además, la cifra de la primera semana de noviembre representa menos de un tercio de los u$s420 millones que lleva vendidos el Banco Central en concepto de dólar ahorro en lo que va del mes, apuntó el diario El Cronista.
En este marco, la liquidación de las cerealeras alcanzó u$s17.537 millones entre enero y octubre, u$s3583 millones menos que hace un año.
Sucede que en la medida en la que los candidatos que medirán fuerzas en el balotaje presidencial el 22 de noviembre -Mauricio Macri y Daniel Scioli- prometen reducir retenciones a las exportaciones del campo y un valor del dólar oficial cercano al que ofrece el contado con liquidación, los productores decidieron esperar mejores condiciones de venta.
"La baja de precios internacionales y la expectativa de unificación cambiaria que potencialmente podría implementar un nuevo gobierno y el nivel de incertidumbre político-electoral" contribuyeron a esa merma en la liquidación, según la Fundación Mediterránea.
Un escenario parecido vive la industria automotriz, donde los empresarios también esperan mejores condiciones para desarrollar su actividad. De acuerdo al matutino, el complejo automotor restringe la producción por el parate de la demanda de Brasil y las restricciones a las importadores.
Es por eso que las concesionarias demoran la entrega de los vehículos 0 kilómetros 90 días, a la espera de definiciones sobre el impuesto a los autos de mediana y alta gama, y al nuevo valor del tipo de cambio.
Desde fines de octubre, el Banco Central restringió a la mitad la disponibilidad de dólares de las empresas para comprar piezas, insumos y bienes terminados. "Van a entregar los últimos dólares que quedan para ahorro y turismo. Hay menos dólares para importar y en algunos ramos ya se siente la restricción de materias primas, como el automotor, el químico y la industria del papel", enumeró un asesor del sector industrial consultado por El Cronista.