Empresas tendrán que conseguir sus dólares para importar
Preocupado por las fuertes caídas de las reservas internacionales, y sabiendo que las importaciones son una fuente constante de demanda de dólares, el Gobierno dejará de ofrecer la divisa a través del Banco Central de la República Argentina (BCRA) a las compañías que más facturan en la Argentina para pagar las importaciones que realizan.
Este régimen de restricciones al acceso de la moneda extranjera para la adquisición de bienes del exterior rige desde este lunes y se extenderá al menos por 90 días.
El esquema consiste en que sean las propias compañías las que se consigan los dólares para pagar sus importaciones.
Para eso, tendrán que financiarse desde sus casas matrices o colocar deuda en el exterior.
El régimen será sólo para grandes empresas, especialmente las que no produzcan en el país o tengan un desbalance importante entre lo que importan y lo que exportan. Por ahora, las automotrices quedarán afuera y esperarán a que el sector haga un balance desde abril. Tampoco serán alcanzadas por estas restricciones las Pyme, las firmas culturales (cine, libros), medicamentos e insumos considerados críticos.
En mayo nuevamente se analizará la situación y, dependiendo de la soja liquidada y el aumento en las reservas, el sistema se revisará, señalaron fuentes del Palacio de Hacienda a Ámbito Financiero.
Como contrapunto, la cartera que conduce Axel Kicillof prometió a las empresas que apliquen el nuevo régimen liberarles inmediatamente las importaciones agilizando las declaraciones juradas correspondientes.
Por otro lado, las firmas que demuestren capitalizaciones e inversiones en dólares podrán tener la posibilidad de comprar bienes y contratar servicios, por la misma cantidad de divisas.
La medida fue tomando forma desde fines de enero, cuando el ministro de Economía, Axel Kicillof, y la ministra de Industria, Débora Giorgi, solicitaron a unas 50 empresas que analicen posibilidades de financiar las importaciones, alargar los plazos de pagos de las mismas y buscar que bancos del exterior financien importaciones argentinas en dólares.
Kicillof citó el caso de las empresas cerealeras que decidieron cerrar líneas de créditos con el exterior y le privaron al Gobierno contar con unos u$s3.500 millones de reservas adicionales. Además, los funcionarios pidieron a los empresarios que presenten un plan novedoso que en caso de ser aprobado podría generar un trato preferencial en lo que hace a subsidios de energía o de créditos a tasa subsidiada.