Un día en la clínica de manejo de Ford: la experiencia cómo cliente y todo lo que se puede aprender

Ford despliega, como todos los años, un gran stand en el acceso a La Frontera, en Pinamar. En ese espacio concentra todas las novedades de producto que se sumaron en el último tiempo, con un foco especial en camionetas y SUV. Además, cada temporada, agrega un exponente como anticipo del próximo lanzamiento, que en 2025 es Everest.

Sin embargo, el stand no es solamente una vidrieda, sino que la marca convoca en ese espacio a participar de test drive y, una de las acciones con mucha demanda, que son las clínicas de manejo. A través de la web, los propietarios de Ranger 4X4, Ranger Raptor, F-150 y F-150 Raptor, pueden participar de una jornada con pilotos expertos que enseñan cómo sacar provecho de las bondades de cada producto para el uso off road.

En una de estas actividades participamos como clientes para vivir la experiencia desde adentro y conocer, una vez realizada la acción, la conclusión de los usuarios de la marca sobre la propuesta.

Desde las 10.30 hasta las 12.30, un grupo que, previamente se había anotado por la web, participó de la clínica que tiene una parte teórica y una práctica, con agasajos y mucho un regalo como cierre.

Cómo es la Clínica de Ford

La convocatoria a la clínica de manejo se realiza en el stand de La Frontera. A medida que van llegando los inscriptos, arranca un desayuno con una propuesta de Café San Juan, la cual está desplegada con un puesto exclusivo en el lugar.

Un desayuno a cargo de Café San Juan recibe a los clientes.

Fotos a los vehículos exhibidos, charlas entre clientes, consultas de unos a otros caracterizan a este momento. Se nota además el gran entusiasmo y fanatismo de los usuarios de la marca por aprender más de los vehículos que tienen. Fue entonces cuando le pregunté a Santiago, uno de los inscriptos, cuánto hace que participa de este evento.

"Hace años que me anoto en las clínicas de verano. No me pierdo una. Vivo en Tierra del Fuego y vengo los veranos a Pinamar a probar todas las marcas, pero el año pasado me compré una Ranger 2.0 biturbo de la nueva generación y quiero aprender algunas cosas más. A la noche vuelvo, porque me anoté para hacer un test y probar la nueva Ranger Raptor, porque esa es la próxima que me quiero comprar", comentó el cliente, de 45 años, acompañado por su amigo Ramiro.

Una charla técnica abre la clínica de Manejo de Ford.

Después del desayuno, uno de los pilotos más experimentados de la marca, comenzó con su charla técnica. Preguntó que modelos había, si eran V6 o 2.0 (la mayoría de la nueva generación); con caja manual o automática. También consultó para quienes era la primera vez en una clínica de manejo y en la arena, donde varios usuarios levantaron la mano. Luego arrancaron las instrucciones con muchos detalles: bajar los neumáticos (lo hicieron en el lugar); poner la 4x4 baja; mantener la aceleración constante, no ir pegados unos a otro; no parar en subidas porque cuesta más salir; no insistir en caso de quedar encajados en la arena; etcétera. Hubo algunas preguntas específicas y cada uno sacó sus dudas, para salir más seguros a la travesía.

Finalizado el paso teórico, la caravana, con más pilotos especializados que fueron ocupando puestos intermedios (a modo de control) salieron rumbo al bosque para hacer el recorrido de más de una hora.

Subidas, bajadas, terrenos inclinados, algunos con más arena suelta y complicados y otros más fáciles de atravesar, completaron los 60 minutos promedio que se hacen día tras día. Lo más importante: respetar el orden, no sobrepasar y tampoco apurar al que está adelante, para evitar errores.

Paso por lugares más complicados, con espacio entre clientes.

La clínica y los pasos finales

Ya casi finalizado el recorrido, los clientes reciben un regalo, bebidas frías y snacks. En ese impasse hubo varios comentarios recolectados a quienes iban terminando el recorrido.

Parada al final del recorrido para recibir regalos, refrescos y snack.

"Es la primera vez que participo de esta clínica y la verdad me sirvió mucho para terminar de aprender algunos detalles que no conocía de la camioneta", dijo uno de los conductores de una Ranger Limited que estuvo solo en la experiencia.

"Me encantó. Fue bárbaro", comentó Juan, con una gran sonrisa, en su Ranger XLT 4x4 con motor bi-turbo. Era la segunda vez en dos semanas que se sumaba a la clínica, porque quería volver a realizar el recorrido después de haber aprendido muchas cosas en la primera charla. Acompañado de su esposa, se mostró más que feliz.

Llegados al stand, en La Frontera, los clientes se acercaron a inflar los neumáticos. Sin bajar de las camionetas, fueron pasando por el puesto de servicio y salieron con sus vehículos al día.

Seguimos con las consultas y la conclusión de varios participantes era la misma: "Excelente la clínica, aprendí mucho".

De regreso al stand, los asistentes de Ford inflan los neumáticos a los clientes.

Hugo y Franco, padre e hijo, dieron una cátedra: "Me pareció lo mejor que viví. Tengo una Ranger Limited, la segunda que compro, y ahora ya me saqué todas las dudas que me quedaban para usarla en la arena", dijo el padre. Su hijo agregó: "Me gustó acompañarlo, y manejó muy bien. A mi me encanta la Ranger, es moderna, tecnológica, y la nueva versión muestra una gran evolución en el diseño". Así Franco, prácticamente, hizo un mini test del nuevo modelo.

Concluído el evento, cada cliente se retiró con su regalo, los nuevos conocimientos adquiridos y muchas ganas de volver para probar más modelos de la marca. Son fieles usuarios de Ford y la experiencia terminó de completar la elección de sus productos.

Culminó el día vivido como clientes, con muchos aprendizajes y las respuestas al por qué la Ranger es la camioneta más moderna y completa del mercado, dicho por los mismos usuarios.