Que no se te rompa el parabrisas del auto o camioneta: cuánto cuestan ahora
Los imprevistos nos pueden sorprender en cualquier momento, y la rotura del parabrisas de un auto, camioneta o cualquier vehículo es uno de los accidentes que suelen ocurrir a la hora de pasar mucho tiempo en la ruta o incluso en caminos de tierra.
Si bien muchas aseguradoras contemplan el recambio de un parabrisas al año, sucede que muchas veces se repite el siniestro más de una vez o la letra chica indica que no puede se cubrir por la causa que originó el daño, y se debe pagar del bolsillo propio.
También sucede, que muchas veces el parabrisas está dañado y se sigue usando por una largo tiempo, pero por la seguridad integral del auto y de los ocupantes hay muchos casos donde siempre es mejor que no haya ningún golpe, por mínimo que sea.
Por eso, en caso de tener que cambiarlo, repasamos los precios de repuestos oficiales o de fabricantes especializados para considerar cuánto habrá que gastar en cambiar el parabrisas.
Precios del parabrisas del auto: original o genérico
Para empezar a hablar del cambio de un parabrisas de un auto, el gasto mínimo que se tendrá que contemplar es de $200.000 en adelante. Ese es el valor promedio de un parabrisas de una marca genérica. Sin embargo, si se trata de un repuesto original, el precio puede ser del doble.
La cotización tambien varía por tipo de vehículo y marca: no es lo mismo una camioneta que un auto; ni un 0km de alta gama que uno masivo.
Por ejemplo, en el caso de Peugeot-Citroën, se pueden ver los valores oficiales de los parabrisas para modelos nuevos e incluso algunos que fueron discontinuados.
Por ejemplo, un parabrisas laminado sin sensor de lluvia, para un Peugeot 308 HDi, sale $237.176, pero en el caso de uno con sensor de lluvia, para un 408 1.6, el valor es de 588.682 pesos. En ambos casos es de oficial de la marca y para el mismo año de fabricación del auto,
En Citroën, un parabrisas para un C4 2.0 naftero, fabricado entre 2009 y 2014, el valor es de $226.462; mientras que para un C3 nueva, naftero 1.6, es de 670.429 pesos.
Fiat, Jeep y RAM comercializan sus accesorios y repuestos a través de Mopar y pueden adquirirse en Mercado Libre. Un parabrisas Fiat va desde $446.000 hasta un laminado en $726.000; mientras que uno para un Jeep Cherokee tiene un valor de 1.332.000 pesos.
Otro ejemplo: tomando un modelo de Renault, un parabrisas cotizado en la tienda virtual de Mercado Libre, sale en promedio 448.000 pesos.
Para que se pueda corroborar la compatibilidad del parabrisas con el vehículo es necesario que previo a la compra se indique el número de chasis.
Cuándo hay que cambiar el parabrisas del auto
Un dato importante es saber que, el parabrisas, no solo es importante para tener una buena visual, sino que aporta hasta el 30% de la resistencia estructural de un auto, lo que lo convierte en un elemento clave para evitar que se hunda el techo del coche en caso de volcar. También, es fundamental en los Sistemas de Ayuda al Conductor (ADAS) de los vehículos que cuentan con este equipamiento. En el parabrisas se encuentran los sensores y cámaras que recolectan información para que estos sistemas actúen de forma adecuada.
Esto hace que, determinados problemas ocurridos en el mismo, sean considerados graves o no, y lleven a realizar un cambio o reparación.
Entre los motivos que indican que debemos cambiarlo, más allá de una rotura o estrellado total, son:
- Rayado: la mayoría de las veces se debe a un mal mantenimiento de las escobillas limpiaparabrisas. Si no se cambian a tiempo, producen rayas en el cristal que son muy molestas porque reducen la visión.
- Esmerilado: Son pequeños poros en la superficie del parabrisas provocados por circular por zonas con polvo y arena. Son peligrosos, porque hacen que las escobillas no limpien bien cuando llueve y también provocan una visión reducida con el sol de frente y por la noche con las luces del tráfico.
- Rajaduras: es cuando se encuentran en el campo de visión, debido a que suponen un riesgo. Además, tienden a extenderse y pueden provocar la rotura total del cristal.
- Despegado del laminado: a veces, en los bordes del parabrisas hay zonas que parecen estar empañadas, pero que, por más que las limpiemos, no desaparecen. Lo que está pasando es que se está despegando el laminado.
Qué se puede reparar y qué no
Existen diferentes métodos para reparar el daño del parabrisas y no tener que cambiarlo. Si la imperfección es muy profunda, no será posible pulir, de modo que el recurso será sustituirlo; lo mismo que si ocurre algún problema con el laminado.
Las roturas con forma de estrella o esta partido, tampoco será reparable. Además, son daños que suelen extenderse rápidamente, sobre todo si hay cambios bruscos de temperatura.
Según el CESVI, este repuesto debe adquirirse en un centro especializado de instalación de vidrios, en un concesionario oficial o en un local de repuestos. Pero, siempre debecontar con el C.H.A.S. (Certificado de Homologación de Autoparte de Seguridad), significa que la pieza ha superado los ensayos de seguridad que exigen las normativas.
La importancia de tener el parabrisas del auto limpio
Jamás se debe iniciar la marcha en un vehículo hasta que no esté completamente limpio el campo de visión. Pero el hecho de que cualquier puede hacer este proceso de limpieza, hace que muchas veces no se haga bien.
Datos para tener en cuenta son:
- Las escobillas junto con el agua y el jabón pueden arrastrar la suciedad, pero no siempre es posible hacerlo correctamente. Cuando se endurece o cuando las gomas se deterioran, la efectividad disminuye y las escobillas pueden rayar la superficie del parabrisas.
- Los rayos solares son también grandes enemigos de los limpiaparabrisas porque hacen que las gomas se endurezcan. En este sentido, el cambio de las escobillas es una maniobra sencilla que puede hacer cualquier conductor, y conviene sustituirlas al menos una vez al año para mantener la seguridad.
Estos son apenas unos detalles de las decenas de aspectos que hay que tener en cuenta a la hora de controlar los parabrisas, asegurarse que están limpios y verificar que no tengan algún daño que afecte la visibilidad o estructura del auto.