Cuáles son los autos y SUV que subirán de precio en septiembre por los cambios al impuesto interno
Los precios de los autos y SUV 0km podrán sufrir otro fuerte aumento en septiembre, ya que no solo se ajustarán por inflación, como todos los meses, sino que también cambiará la base del impuesto interno, la cual se actualiza de forma trimestral.
De acuerdo a los cálculos que se realizan teniendo en cuenta la base del índice mayorista del sector (SIPM), que se aplica al valor de los 0km antes del IVA y el margen de comisión de la concesionaria, la primera escala para que los autos y SUV paguen el impuesto interno pasará de $4.300.000 de precio de venta en concesionarios a $5.050.000 promedio. Esto quiere decir que cualquier vehículo que supere ese valor, sufrirá automáticamente un incremento de 20% en su precio debido a que tendrá que pagar el impuesto.
Lo que provocó esta medida es que, al ir alcanzando a más modelos debido a la suba de precios de todos los 0km, diferentes versiones de un mismo auto tienen hoy el mismo valor, ya que esperan los ajustes trimestrales para diferenciarse por nivel de equipamiento.
En este escenario, repasamos las lista de precios de algunas marcas y anticipamos qué autos pueden aumentar teniendo en cuenta que actualmente están "topeados".
Autos chicos al borde del impuesto interno
Entre los modelos que se encuentran hoy al borde del impuesto hay propuestas de casi todas las marcas masivas, ya que lejos quedó la teoría de que afectaría solo a modelos de alta gama.
En el caso de Renault, son tres productos los que tienen todas sus versiones con los mismos precios: salen $4.240.300. Se trata del SUV Duster, el SUV Captur y la versión para pasajeros de Kangoo, que se fabrica en Santa Isabel, Córdoba.
En el caso del Duster, eligiendo la versión base con caja manual, una opción con caja automática, con 4x2 o con tracción 4x4, tienen todas el mismo valor. Lo mismo pasa en el caso de Captur, donde una de las diferencias más notables tiene que ver con la caja manual o automática, pero se pagan el mismo precio; y en Kangoo, donde cambia el motor pero igual se cotizan al mismo valor.
En Volkswagen también hay varias versiones dentro del mismo modelo que tienen el precio freezados. Un caso es el Nivus 170 TSI manual, que llegó al mercado para ubicarse como la opción más económica. Ahora, sale lo mismo que el Nivus Comfortline 200 TSI automático. Los dos están a 4.292.750 pesos.
El mismo precio de $4.292.750 tiene el Virtus en su versión Comfortline y Highline; y lo mismo pasa con el T-Cross MSI 1.6 con caja manual y el 170 TSI.
Otros modelos que podrían aumentar son de Nissan, donde las dos versiones más equipadas de su auto más barato, que es el Versa, salen lo mismo: $4.147.200. Se trata de las opciones Advance y Exclusive.
Dos modelos nacionales al borde del impuesto
En Chevrolet, el caso más emblemático de un auto que esquiva el impuesto es el Cruze, que en todas sus versiones sale $4.240.900. Este modelo se produce en la Argentina, en la planta de Alvear, y por eso siempre se mantuvo por debajo de la medida. En este caso, hasta las versiones especiales RS y Midnight salen lo mismo.
Lo mismo pasa en Peugeot, donde hace tiempo que ya mantienen varios modelos al mismo valor en el caso del 208, que se fabrica en El Palomar, provincia de Buenos Aires. El mismo cuenta con 9 versiones, de las cuales cuatro están en 4.146.000 pesos.
Al margen de los nacionales hay más modelos de las marcas mencionadas involucrados. Otro que mantiene una corta diferencia en todas las versiones es el Chevrolet Onix, importado de Brasil, el cual compite en el segmento chico y por eso no se le aplica el impuesto. Desde la versión LT, hasta la LTZ, Premier y RS, la diferencia es de solo $100.000, cuando debería ser mucho mayor por el equipamiento. El precio máximo es de $4.240.900, como el Cruze. En el caso de Tracker, tres versiones salen $4.240.900, mientras que solo una supera los $7 millones.
También el Peugeot 2008, un SUV chico, tiene dos de sus tres versiones por debajo de los $4.300.000 que impone el impuesto.