Los autos 0km, cada vez más caros: modificaron el impuestazo y se disparan los precios
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Como todos los meses, los precios de los autos 0km sufrieron en junio un nuevo ajuste por inflación, que por la alta demanda y el bajo stock en las automotrices, se fijó en los últimos tiempos en un 5% mensual, frente a la remarcación histórica que no superaba el 2 por ciento.
Pero esto no es todo, ya que en junio también se sumó un nuevo cambio en el impuesto interno, que actualiza la base mínima imponible cada tres meses.
Esta modificación del tributo, que dejó de afectar únicamente a los autos de lujo (como se pensó en su origen) y que afecta a modelos de todas las marcas masivas, impulsa también la suba de precios ya que, en muchos casos, se mantienen los vehículos "topeados" para no aplicar el gravamen, y aprovechan para subir la vara cada tres meses.
Es por eso que en junio, y hasta agosto, se tendrán nuevas escalas de referencia que servirán para evitar incrementos de precios en algunnos modelos y liberará a otros.
Cómo es la nueva escala de impuestos internos para los autos 0km
La suba en la base mínima imponible del impuesto interno se calcula a partir de un ajuste que surge del aumento de los precios mayoristas de los vehículos en el trimestre de enero, febrero y marzo, y que resultó ser de 13,8% para el nuevo trimestre.
De esta manera, con el cambio actual, el valor a partir del cual se aplicará el primer escalón del gravamen es para aquellos vehículos que superen de venta al público los $4.300.000. Hasta mayo, el límite eran 3.770.000 pesos. A partir de ese monto, se ajustan los precios un 20% que en términos reales es un 25 por ciento.
En cuanto al segundo escalón, afecta a los autos que superen los $8.000.000 de venta al público, y en este caso el gravamen es del 35% aunque llega al 50% en términos reales.
Modelos liberados
Mientras que algunos autos no tienen escapatoria y tienen que aplicar el gravamen, en otros casos se aprovecha el cambio para sacar el tope y aumentar los valores, sin quedar afectados por la medida.
Esto ya lo hicieron marcas como Chevrolet con el Cruze, fabricado en la Argentina. Hasta mayo, todas las versiones salían $3.770.000, y ahora se incrementaron.
De acuerdo a los precios publicados en la página de la marca, el valor del modelo más económico quedó en $.3858.900, mientras que las dos versiones más equipadas, las LTZ y Premier, están en 4.240.900 pesos.
Lo mismo sucede con Chevrolet Tracker, el SUV de entrada de gama, que desde ahora arranca en $3.986.900 con la versión más económica y llega hasta $4.240.900 en la LTZ, mientras que la Premier es alcanzada por el primer escalón del impuesto, con un precio de 6.236 900 pesos.
En el caso de Toyota, el Corolla también incrementó sus valores, con un sus versiones más equipadas, tanto XEI como SEG, con motor naftero o híbrido, que superan los 4.600.000 pesos.
Otros modelos que seguramente empezarán a destrabarse a partir de este mes son el Citroën C4 Cactus y Peugeot 208, que hasta mayo tenían diferentes versiones con el mismo valor.
Sobreprecios y falta de productos
Además de los cambios en los valores de los autos por el impuesto interno y la inflación, la falta de vehículos hace que haya una política de sobreprecios que no se puede detener, y el valor de estos vehículos está por arriba de los oficiales.
En términos generales, esta situación provoca que, los precios de los autos, vengan subiendo por encima de la inflación y el ajuste del dólar, y que ya no haya referencia para saber cuánto sale cada modelo, sino que depende de la oferta y la demanda.
Por el momento no hay expectativas de que el mercado vaya a regularizarse porque la falta de autos seguirá siendo una constante en el país, lo cual empuja los valores hacia arriba.
En cuanto al traslado a precios que se producirá para aprovechar el cambio en el impuesto interno, todas las marcas aseguraron que lo aprovecharán y los retoques se terminarán de definir estos días.