Stellantis: comenzó a funcionar el nuevo gigante de la industria automotiz que enfenta grandes retos
Stellantis, el nuevo grupo global de automoción producto de la fusión de PSA y FCA, comienza a rodar este sábado en un momento de situación incierta para el sector y con muchos retos para lograr una auténtica integración industrial y comercial de sus componentes.
Un breve comunicado anunció que la fusión es ya efectiva y que la nueva compañía comenzará a cotizar el lunes en las bolsas de París y Milán y el martes en la de Nueva York.
La nueva compañía conjuga ventajas y complementariedades, pero también afronta importantes desafíos, como la debilidad del mercado europeo o la poca presencia en el China, según explican a Efe analistas del sector de los tres países donde más está implantada la compañía.
El puzle de Stellantis es complejo, porque reúne a 14 marcas. En PSA destacan las francesas Peugeot y Citroën y la alemana Opel, mientras que FCA engloba a Fiat y varias enseñas míticas (Alfa Romeo, Ferrari o Maserati) junto con la estadounidense Chrysler (donde a su vez hay varias marcas, entre las que destaca Jeep).
En total, un gigante que en 2019 habría sido el cuarto fabricante mundial, con una producción conjunta de 7,48 millones de vehículos.
Las ventajas del tamaño
La principal ventaja de la fusión es "claramente el aumento de tamaño" de la compañía, algo "esencial" para las inversiones necesarias en movilidad eléctrica, los desafíos de digitalización, conectividad y conducción autónoma, señala Vittoria Ferraris, responsable de automóvil en Europa de S&P Global Ratings, en París.
En esto coincide Andrea Giuricin, responsable de TRA Consulting (Milán): "la electrificación requiere miles de millones de euros en inversiones y con tecnologías compartidas se pueden desarrollar economías de escala".
"PSA está claramente por delante de FCA en el desarrollo de automóviles eléctricos e híbridos", lo que ayudará a Fiat y Chrysler, destaca Maria Teresa Bianchi, profesora y especialista de economía empresarial en la Universidad de la Sapienza (Roma).
El gigante Stellantis
En octubre de 2019, ambos grupos habían anunciado su voluntad de fusionarse, lo que generaría la combinación de ventas estimadas de 8,7 millones de unidades (el 9,5 % del total global).
Stellantis englobará las marcas Peugeot, Citroën, DS, Opel, Fiat, Alfa Romeo, Maserati, Jeep, Chrysler, RAM, y Dodge.
Quien estará al mando del gigante automotriz es John Elkann, sobrino de Cristiano Ratazzi, referente de Fiat Argentina; mientras que Robert Peugeot y será vicepresidente y Carlos Tavares, consejero delegado.
Recientemente, el consejero delegado de Fiat Chrysler (FCA), Mike Manley, fue designado para estar al mando de las operaciones del nuevo Grupo para el continente americano.
La nueva entidad contaría con más de 400.000 empleados y una facturación de 167.000 millones de euros (203.240 millones de dólares) sobre la base de cifras de 2019, solamente superada por Toyota y la alemana Volkswagen.
PSA y Fiat calculan que su unión les permitirá ahorrar unos 5.000 millones de euros al año.
Con un diseño sobrio, "el logo simboliza la rica herencia de las empresas fundadoras de Stellantis y la fuerza del elenco de 14 marcas de automóviles históricas del nuevo grupo. Asimismo, pone de manifiesto la riqueza de la diversidad de perfiles profesionales de los empleados que trabajan en todas las regiones del mundo", explicaron ambos fabricantes en su comunicado conjunto.
El nombre de Stellantis, el cual se anunció en julio, nace de la raíz latina "stello", que significa "brillo de estrellas", y "encarna la representación visual del espíritu de optimismo, energía y renovación de una empresa diversificada e innovadora, determinada en convertirse en uno de los nuevos líderes de la próxima era de movilidad sostenible", aseguró la compañía.