Sin ventas por la cuarentena, concesionarios de autos quieren rebajar los salarios hasta 60%
La venta de autos se paralizó por completo cuando el Gobierno estableció el aislamiento social y obligatorio. No es una actividad esencial, y como tal, tuvieron que cerrar las puertas.
Así, la venta de autos se contabilizó solo hasta el 20 de marzo, cerrando con menos de 20.000 unidades patentadas, una baja histórica para el sector.
En este contexto, el problema es tanto para las automotrices, que tuvieron que paralizar la producción, como para los puntos de venta, que tuvieron que cerrar sus puertas. Y en este último caso, las negociaciones para pagar menos salario ya están sobre la mesa.
En los concesionarios advierten, hace tiempo, que la rentabilidad ha caído mientras que los costos no paran de crecer, con grandes estructuras que sostener. Ahora, sin una sola venta hasta lo que va de abril, admiten que no podrán pagar los sueldos.
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Por el momento negocian una baja que rondaría el 60%, lo que afectaría muchos empleos, quienes en muchos casos también salvan el mes por las comisiones gracias a las ventas, situación que fue cortada.
Una de las soluciones que reclaman desde el sector, por el momento, sería que por lo menos se puedan abrir los talleres de postventa, así vuelve a funcionar un sector del negocio. De todos modos, si continúa el aislamiento, solo podrán ir quienes justifiquen una actividad en las calles.
Por otro lado, desde las entidades que reúnen a los concesionarios, también piden un esfuerzo compartido con el Estado, en cuanto a las herramientas que tienen que aportar para sortear la crisis. Los créditos para salarios, por mencionar un tema, están avanzando con dificultades.
De todos modos aclaran, que en este parate es imposible que los trabajadores cobren el 100% de sus salarios con las puertas cerradas. Además, después de los dichos del Presidente, sobre la extensión de la cuarentena, no creen que puedan empezar a abrir la semana próxima, con lo cual la situación se agrava aún más.