Milei teme incidentes en la marcha y Bullrich solo custodiará la Casa Rosada y el Congreso

En la Casa Rosada temen incidentes violentos. El presidente Javier Milei y su mesa chica le pidieron a la ministra de Seguridad Patricia Bullrich que el Gobierno no quede involucrado en incidentes violentos, porque temen que muchos grupos convocantes provoquen destrozos. Por ese motivo, la Nación solo custodiará la Casa Rosada, el Congreso y las jurisdicciones federales como los accesos a la Ciudad de Buenos Aires.

Según pudo saber iProfesional, el gobierno porteño de Jorge Macri vigilará con el ministro de Seguridad, Waldo Wolff, las calles de la ciudad por las que circularán los manifestantes entre el Congreso y la Casa Rosada y las arterias que sirvan para la confluencia de la muchedumbre.

La convocatoria la formuló el colectivo LGTBIQ+ como consecuencia del discurso de Javier Milei en el Foro Económico Mundial de Davos, el jueves anterior, donde hizo una denuncia de la ideología de género y la cultura woke en la que asoció a la homosexualidad con la pedofilia.

El Presidente aseguró que los gays en su extremo practican violencia contra menores de edad, pedofilia y abuso sexual, al tiempo que negó la importancia de la figura del femicidio y del reconocimiento de la diversidad de género.

Su discurso fue criticado a nivel mundial y especialmente dentro del arco opositor de nuestro país. De ese modo, no solo concurrirán a la marcha los gays, lesbianas y trans del colectivo LGTBIQ+, sino partidos opositores, sindicatos y dirigentes sociales y políticos del peronismo y de izquierda.

Patricia Bullrich no aplicará el Protocolo Antipiquetes en la marcha LGBT y antifascista 

En la tarde del viernes hubo reuniones entre los dos ministerios de Seguridad, de la Nación y de la Ciudad. Los datos de inteligencia que manejaron ambos consistían en que es altamente probable que este sábado puede haber disturbios, destrozos y hechos de violencia en la calle.

La marcha "anti fascista" o "anti Milei" cobró mucha fuerza en pocas horas y la Casa Rosada tomó nota. Es por eso que se acordó, según fuentes oficiales confiaron a iProfesional, que "la calle es para la Ciudad" porque "tienen miedo de que Patricia Bullrich sea demasiado dura".

El temor no parte solo del gobierno porteño de Jorge Macri, sino también del propio Triángulo de Hierro compuesto por Milei, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el asesor presidencial Santiago Caputo. Es por ello que le pidieron que ella custodie las jurisdicciones federales con la Policía Federal, la Gendarmería y la Prefectura.

Como edificios centrales a custodiar estarán la propia Casa Rosada y el Congreso de la Nación. "Hay muchos indicios de que van a generar disturbios distintos grupos políticos, y para nosotros nos queda el Congreso y la Casa Rosada", dijo a iProfesional un funcionario de Seguridad.

"Parece que somos demasiado duros para los que mandan ahora", ironizó un funcionario cercano a Patricia Bullrich. "Los grupos más revoltosos serán desde anarquistas hasta grupos feministas, pasando por la gama de la izquierda K y la izquierda trotskista, ojalá nos equivoquemos", señaló.

"Pero esa es la hipótesis según los datos que tenemos", añadió. Por ese motivo, Patricia Bullrich no aplicará el Protocolo Antipiquetes. Un dato adicional es que en la Casa Rosada evalúan que en la marcha de este sábado se comenzará a conformar "un frente anti Milei" que podría tomar forma para las próximas elecciones legislativas.

Por primera vez, así, comenzó a notarse que la mesa chica de Milei no quiere cometer más errores no forzados y eso es una tácita admisión de que el discurso de Milei en Davos fue un desacierto innecesario del Presidente.

De ese modo, Karina Milei le pidió a Patricia Bullrich que desaloje las calles de los efectivos de las fuerzas de seguridad federales, Policía Federal, Gendarmería y Prefectura, para evitar disturbios con los manifestantes que podrían traer costos políticos.

Tampoco avanzarán los federales sobre la Plaza de Mayo ni sobre la Plaza de los Dos Congresos, donde quedará apostada la Policía de la Ciudad, a prudente distancia. De todos modos, habrá un comando unificado.

El desafío de Javier Milei: bajar el tono a su mensaje extremo

Además del colectivo LGTBIQ+ se sumarán sectores políticos y sindicales con capacidad y gimnasia de movilización, intendentes del conurbano, la gobernación bonaerense de Axel Kicillof, organizaciones sociales y piqueteras, las dos CTA y la CGT, aunque lo harán en forma individual distintos sindicatos sin mostrar banderas de la central obrera en forma institucional.

Durante este miércoles, Bullrich se reunió con Karina Milei y Santiago Caputo y con el jefe de la SIDE, Sergio Neiffert. También hubo funcionarios de ambos ministerios que coordinaron con Waldo Wolff el tamaño y las características del operativo porteño.

El jefe de gobierno de la Ciudad, Jorge Macri, había condenado el discurso de Milei en Davos. "Que hay que defender a los niños no tengo dudas, pero agarrar un caso y transformarlo es tremendamente injusto. Me gustaría ver un Presidente que abogue más por la unidad de la Argentina que por seguir instalando nuevas divisiones", señaló el jefe de gobierno en declaraciones radiales.

Por estas discrepancias de Jorge Macri la Casa Rosada no quiere pagar el costo político de posibles incidentes y prefiere trasladarlos a la Ciudad. Ahora, en el futuro inmediato, Milei tendrá el desafío de bajar el tono a su mensaje extremo y buscar imponer los proyectos de ley con los que quiere derogar la figura del femicidio y barrer con la ley de cupos y discriminación positiva.