La guerra tecnológica: los celulares que cambian de color con el frío se fabricarán en la Argentina
El gigante tecnológico chino Realme, que ya ha superado los 200 millones de usuarios a nivel global, llega a la Argentina con el objetivo de desafiar a Samsung y Motorola, que controlan el 75% del mercado de smartphones en el país.
Luego de un año de negociaciones la marca se ha asociado con Telecomunicaciones Fueguinas, que se encargará de ensamblar sus dispositivos en la planta de Río Grande, Tierra del Fuego, además de su distribución en el territorio nacional. En un principio habrá una fase de importación de celulares, para luego darle lugar a la etapa de ensamblaje local.
La estrategia de Realme se centra en atraer a un público joven, un segmento clave en el mercado, ofreciendo dispositivos innovadores y competitivos en precio. Esta apuesta refleja su ambición de consolidarse como una alternativa fuerte en un mercado dominado por gigantes tecnológicos.
Cómo son los celulares Realme
La marca china anuncia smartphones con tecnológica de vanguardia: desde procesadores potentes y cámaras de última generación, a baterías de larga duración. También se enfocan en el concepto de la Internet de las Cosas (IOT, del inglés Internet of Things), que permite la comunicación inmediata entre distintos dispositivos.
Además, la nueva serie de smartphones Realme 14 Pro tendrá un diseño de carcasa que cambia de color con el frío, pasando de un color perla a tonos azules vibrantes. Cuando la temperatura ambiente se ubica por debajo de los 16 grados, la carcasa pasa de un blanco perla a un azul vibrante. Y cuando está por encima de los 16 grados, el celular vuelve a mostrar el color blanco.
Según destaca Realme, esta innovación, única en el mercado, se inspira en las criaturas marinas que cambian de color en las profundidades del océano, como es el caso de las medusas o los moluscos.
El modelo cuenta con una triple cámara de 50 MP acompañada por un sistema de triple flash MagicGlow. Este sistema de flash restaura automáticamente los tonos de la piel del usuario en condiciones de poca iluminación.