De fiesta, sin riesgos: ¿qué es la "tolerancia 0 al volante" y en qué provincias rige esta ley?
Cerveza, vino, tragos y el clásico brindis con sidra o espumante: en las reuniones de fin de año, como la Navidad o el Año Nuevo, suelen estar presentes estas bebidas prácticamente infaltables. Sin embargo, conducir después de consumir alcohol no solo representa un grave riesgo, sino que también puede implicar severas multas si el conductor es detectado en los controles de alcoholemia, los cuales se intensifican en estas fechas.
Además, superar el nivel permitido de alcohol en sangre no solo conlleva sanciones económicas. Las consecuencias pueden incluir la inhabilitación para conducir por períodos que varían según la gravedad del caso e, incluso, el arresto.
Qué es la "tolerancia cero" de alcohol al manejar
Desde el 3 de mayo de 2023, está en vigencia la Ley 27714 de Alcohol Cero al volante en todo el país. Esta normativa prohíbe conducir cualquier vehículo con una alcoholemia superior a 0 miligramos por litro de sangre en rutas nacionales.
Su principal objetivo es disminuir la cantidad de víctimas fatales y heridos en siniestros viales relacionados con el consumo de alcohol. Incluso, en niveles bajos, el alcohol afecta la percepción y los tiempos de reacción, aumentando el riesgo de accidentes.
En realidad, es una modificación a la Ley 24.449, que reduce a cero el límite vigente de 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre para conductores de vehículos particulares.
En qué provincias rige la Ley de Alcohol 0
En la actualidad, 18 provincias tienen una tolerancia cero de alcohol en sangre para conducir en sus rutas provinciales. Por orden alfabético, estas son: Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Chubut, Córdoba, Entre Ríos, Formosa, Jujuy, Neuquén, La Pampa, La Rioja, San Luis, Santa Cruz, Santiago del Estero, Río Negro, Salta, Tierra del Fuego y Tucumán.
En adición, más de 60 localidades han adoptado la política de alcohol cero para conducir en sus calles y avenidas. En estas, los controles han mostrado resultados positivos, con una notable reducción en la cantidad de conductores que circulan con alcohol en sangre.
Qué pasa cuando bebés alcohol y conducís
- Visión afectada: el alcohol reduce tu visión periférica y puede causar visión doble, lo que dificulta percibir lo que sucede a tu alrededor y calcular distancias con precisión.
- Falsa euforia y confianza: genera una sensación de seguridad exagerada y desprecio por el peligro, lo que puede llevarte a ignorar normas básicas como usar el cinturón de seguridad o el casco.
- Menor coordinación y atención: disminuye tu capacidad para reaccionar rápidamente, aumentando el tiempo que tardás en tomar decisiones ante imprevistos.
Según detalla el Gobierno nacional en su web oficial, el consumo de alcohol produce una mayor cantidad de siniestros para las fiestas de fin de año.
Los datos alarmantes indican que "el 15,2% de la población de 18 años o más manejó una moto, auto o bicicleta habiendo bebido alcohol al menos una vez en los últimos 30 días" y que "el 25,1% de los conductores siniestrados declararon consumir alcohol en las horas previas al accidente".
Por su parte, "la cara, el tórax y el cráneo, son las zonas del cuerpo que más lesiones sufren". Y las personas siniestradas que tomaron alcohol "generaron lesiones de mayor gravedad que quienes no lo hicieron".
En estas fiestas de Navidad y Año Nuevo, es fundamental recordar que el consumo de alcohol no debe influir en nuestra capacidad para conducir. A pesar de que las bebidas como cerveza, vino o sidra suelen ser parte de las celebraciones, manejar bajo los efectos del alcohol no solo pone en riesgo nuestra vida, sino que también puede resultar en severas multas y sanciones legales. La ley de "tolerancia cero" al alcohol al volante está en vigencia, y su incumplimiento puede llevar a consecuencias graves, como la inhabilitación para conducir o incluso el arresto. Por eso, brindemos con responsabilidad, sin perder de vista la seguridad de todos.