¿Bajarán las hipotecas variables en 2025?

En el contexto tanto europeo como argentino, se anticipa que las hipotecas variables podrían experimentar cambios importantes en 2025, ofreciendo condiciones más accesibles para los prestatarios.

Las expectativas de reactivación del crédito hipotecario en Argentina, junto con una posible mejora de las condiciones macroeconómicas, están alineadas con lo que se espera en Europa, donde la reducción de la inflación y el cambio en las políticas monetarias del Banco Central Europeo (BCE) alientan esta tendencia.

La situación en Europa: Inflación y el BCE

En Europa, la inflación ha mostrado signos de desaceleración en países como España y Francia, donde en septiembre de 2024 la tasa se situó por debajo del 2%, con un 1.5% registrado en España. Sin embargo, la inflación subyacente, que excluye los precios volátiles de energía y alimentos, se mantiene en un 2.4%. Este panorama inflacionario, junto con el endurecimiento monetario de los últimos años, ha afectado las hipotecas variables, pero la previsión es que esta tendencia comience a revertirse pronto.

El BCE, que ha venido subiendo los tipos de interés para controlar la inflación, podría empezar a reducirlos a partir de diciembre de 2024, con una primera bajada de 50 puntos básicos. Este cambio afectaría directamente al Euribor, el índice de referencia para la mayoría de las hipotecas variables en Europa, que cerró septiembre en 2.92%, por debajo del 3% por primera vez en meses. Se espera que este índice continúe bajando hasta situarse por debajo del 2% en 2025, lo que representaría un alivio considerable para quienes ya tienen una hipoteca y quienes buscan adquirir una.

El escenario en Argentina

En Argentina, el mercado de hipotecas variables también está bajo el foco de análisis. Con la inflación esperada a disminuir en los próximos años, se prevé que los créditos hipotecarios sean más accesibles para la población. Actualmente, instituciones financieras como el Banco Nación y el Banco Ciudad ya ofrecen créditos hipotecarios con tasas competitivas, alrededor del 4.5%, destinadas a la compra, refacción o ampliación de viviendas. Esta oferta podría mejorar aún más para 2025, en la medida en que la situación macroeconómica mejore.

Además, factores como la desregulación de los alquileres y el blanqueo de capitales podrían incrementar la demanda en el mercado inmobiliario argentino. Según los expertos, estas políticas crearán un entorno más favorable para la inversión en bienes raíces, lo que sumado a la reactivación del crédito hipotecario podría dar un impulso significativo al sector. Al igual que en Europa, en Argentina se espera que las hipotecas variables se tornen una opción más atractiva para quienes buscan adquirir una vivienda propia.

En conclusión

Tanto en Europa como en Argentina, 2025 podría ser un año decisivo para quienes buscan acceder a una hipoteca variable. En ambos casos, la reducción de la inflación y la mejora de las condiciones macroeconómicas podrían facilitar el acceso al crédito, permitiendo a más personas adquirir una vivienda en condiciones más favorables. Aunque cada mercado tiene sus particularidades, las señales de ambos lados del Atlántico apuntan a una reactivación del crédito hipotecario y a una posible baja en las cuotas de las hipotecas variables.